Capítulo 12

--Leonid Zaytseva--

habia aceptado casarse conmigo alfin, hare los arreglos de la boda lo mas rápido posible no puedo permitir que se arrepienta de ser mi esposa, la unica mujer en la vida que me ha interesado de tal forma, es todo un enigma esta mujer sin duda, unos días es fuerte como una toca, otros se desmorona en la tristeza que agobia su corazón y al siguiente día es decidida, segura de si misma, no se cual es la faceta que mas me gusta de ella, pero de lo que si estoy seguro es de que ahora que la tengo en mis brazos por voluntad propia jamas la dejaré ir, empezó a removerse hasta que abrió sus ojos lentamente

-¿ que acaso estaba roncando, porque me miras tanto?- pregunto esta, la reaccion de la chica saco una fuerte carcajada de Leonid

- de hecho si roncabas tal cual leon hambriento, hasta creí que me comerías- contestó bromeando este, recibiendo así un golpe con la almohada

- muy chistoso, no sabia que al Padrino le gustara bromear tanto, ire a ducharme-

- quiero que nos casemos ahora mismo- pronunció este

- ¿espera que?¿ acaso estas enloqueciendo aun más?- pregunto perpleja

- no! debemos casarnos antes de anunciarlo, luego haremos la debida ceremonia, se que al nombrarte mi prometida muchos intentaran evitar que nos casemos y si por alguna razón llega a pasarme algo necesito que te hagas cargo de mi rescate y si no tienes un título para entonces estaremos acabados-

al escuchar la palabra "hacerte cargo" Irina sonrió internamente esto seria mas facil aun si tenia control de las cosas, pues Leonid ya habia anunciado que estaban comprometidos el día del evento imperial pero no habia fecha de bodas porque ella aun no habia aceptado, ahora que la hay es lógico que mas de uno quiera aprovecharse de la situacion

- bien pero ahora es imposible, donde consegui..- fue interrumpida

- ve a ducharte, en el armario hay algo para ti, quiero que lo uses, el notarío espera en el despacho por favor apresurate-

Irina no sabía como reaccionar ¿de verdad se casaría con Leonid? no sabía si realmente sería capaz de firmar ese papel después de todo el fue el verdugo de sus padres y aunque esto era parte del plan, sentia una sensacion extraña en su corazón al saber que se convertirá en la esposa de Leonid, pues en el momento en el que el agua empezó a caer en su cuerpo los recuerdos de la noche anterior invadieron su mente como destellos de luz, una sonrisa tonta se asomó en sus labios y paso sus dedos por estos recordando cada beso desenfrenado que habia recibido del hombre que para ella era su enemigo, pero que en su corazón comenzaba a ocupar un lugar sin saber por que, termino de ducharse y abrió el armario encontrándose un hermoso vestido blanco y ahí entendió todo, las acciones de Leonid la hacían sentir importante para alguien, era algo que no experimentaba desde... y su sonrisa se esfumó tan rápido como habia aparecido

tres años han pasado desde que el se fue, a veces lo extrañaba tanto pero había sido un interesado y un cobarde al haberle vendido el amor que Irina sentia por el a aquel despreciable viejo pervertido que la tuvo como sirvienta y aunque ese tambien era parte de su plan jamas penso que koll fuese capaz de eso, para su mala suerte el mismo viejo traicionero lo asesino después de entregarle aquella maleta con miles en su interior, ¿como podria confiar ahora en un hombre y mas en uno que desde un principio la lastimó aun sin saberlo? el único consuelo que tenia era que al menos Leonid se mostraba tal cual era, no como Koll que disfrazó su ambición y traición con un falso amor que la destruyó aun mas, si no hubiese muerto ella sin duda habría matado al bastardo con sus propias manos!

se colocó el hermoso vestido blanco y arreglo un poco su cabello, luego colocó un ligero brillo en sus carnosos labios sin duda no habia nada que la hiciera ver mal las decoraciones doradas del vestido la hacían ver mas hermosa aún, salió de la habitación con nervios pues a pesar de que para ella todo esto era una farsa se sentia como si de verdad se casaría con el hombre que amaba y sus nervios la traicionaban, llegó hasta el despacho y toco la puerta luego se sento seductoramente en el sillon del recibidor

por su parte Leonid al ver que nadie habia ingresado al despacho intrigado se dirigió a abrir la puerta, en cuanto salió trago grueso

- ¿y bien, como me veo, si parezco la esposa del Padrino?- pregunto Irina sonriente

- definitivamente tendremos que consumar el matrimonio antes de volver a la mansion- contestó este tragando grueso la sexi figura de la chica era toda una escultura digna de admirar

- pues tu no te ves nada mal- respondió esta observando al apuesto hombre frente a ella

Leonid estaba vestido de blanco, con un elegante sueter cuello alto y unos lentes que lo hacian ver vomo todo un Adonis

realmente ambos hacian una pareja perfecta ante los ojos de cualquiera

-¿ estas lista? el notario espera-

- si estoy lista, andando-

ambos ingresaron al despacho donde un hombre de mediana edad esperaba con los documentos listos para ser firmados, luego del respectivo protocolo Leonid fue el primero en firmar orgulloso de la hermosa mujer que ahora se habia convertido en su esposa, Irina tomó el bolígrafo aun nerviosa y con una ultima mirada a su ahora esposo firmo los papeles frente a ella, dos empleadas sirvieron de testigos felicitando asi a la joven pareja de recién casados

- ahora si, me perteneces totalmente, te aseguro que jamas te dejaré ir- pronunció sonriendo el joven Padrino

- pues que te quede claro que ahora tu tambien me perteneces Leonid Zaytseva-

el notario estrecho la mano de ambos para luego retirarse de la Villa, Leonid tomo a Irina y la llevo escaleras arriba a veces no parecia ser el despiadado Padrino de la mafia Rusa, con ella era diferente y sólo hasta ahora comenzaba a notarlo, realmente para el era importante y eso aunque no sabía si bueno o malo hacia brincar su corazon de alegria, tras varias sesiones de pasion por toda la habitación la joven pareja se subió al deportivo negro y en marcha rumbo a la mansion Zaytseva, con todo lo ocurrido la noche anterior en la villa y su reciente boda al joven Padrino se le olvidó por completo su teléfono, llegando así a la mansión entró en el recibidor tomado de la mano con Irina, a Franco casi le da un ataque al ver la cercanía con la que se trataban aquellos dos y explotando su enojo hablo

- ¿donde carajos te habías metido? mientras tu paseabas aqui se esta desatando un desastre- rugio franco furioso

- ¿disculpa?- pronunció Leonid frunciendo el ceño- que no se te olvide que soy el maldito Padrino de toda Rusia y, aunque seas mi amigo casi hermano no te da el derecho de hablarme de esa forma y mucho menos reprocharme lo que hago o no- fue la respuesta de Leonid a la furia de Franco

- ¿con que a eso hemos llegado no?-

- no entiendo tu enojo y me parece algo infantil, ahora dime cual es el maldito problema por el que te comportas de tal manera- pregunto Leonid con una mirada severa

- hemos perdido la mansion Camflit y la mitad de los negocios, ademas de muchos de nuestros hombres-

inmediatamente la mirada de Leonid se oscurecido, dándole un beso posesivo a Irina soltó su mano se dio media vuelta, de pronto se detuvo y, sin voltearse dijo

- Rocco a mi despacho ahora, trataremos este asunto, Franco si aun no se ha calmado tu berrinche puedes regresar luego, yo me hare cargo- dicho eso retomó su camino hacia el despacho

como si dependiera de su vida Rocco prácticamente corrió tras su jefe, dejando asi a todos con la boca abierta, bien se sabía que el joven Padrino era de temer y que era un alma despiadada, pero jamas le habia hablado de tal forma a su amigo,¿ sera que habían problemas entre aquellos dos cuyo enojo era de temer? rápidamente todos siguieron sus labores al tiempo que Franco salió furioso de la mansión

Japón mansion de la familia Yong

Zei Yong el joven Padrino de la mafia japonesa reia para sus adentros mirando a traves del enorme ventanal de su despacho, pues se habia enterado de los problemas que presentaban actualmente los Zaytseva y los Bennati, claramente para el solamente Leonid era una amenaza fuerte, puesto que Franco aun no era nombrado el sucesor de su padre por lo tanto la mafia Italia seguía teniendo al vegestorio de Luca Bennati en su mando y si queria tomar aquellas dos mafias y desaparecerlas debía actuar antes de que el nuevo sucesor fuera nombrado, eso le daria aun más ventaja sobre el resto de los altos mandos

- Jao necesito que filtres a uno de nuestros mejores hombres entre los soldados de Leonid, si la mafia Rusa tiene problemas quien soy yo para quedarme sin un pedazo del pastel- ordenó Zei Yong sonriendo

- si señor, tengo a la mujer perfecta para ese trabajo- contesto este

- ¿mujer, crees que una mujer este capacitada para trabajar para mi?- pregunto arrogante el hombre

- estoy más que seguro que sera nuestra mejor arma señor, se trata de mi hermana Saiyin a demás de ser hermosa, tiene entrenamiento militar y sabe manejar perfectamente los equipos de seguridad y trasteo lo que nos garantiza que podra usar su belleza para acercarse al hombre-

- eso es justo lo que necesitaba, como sabes Leonid esta a punto de casarse y si lo hace tendra mas poder del que ya tiene pues se le vera como un Padrino completo, si logramos evitar esa boda podría usar a tu hermana para destruir al imperio Zaytseva- sonrió Zei Yong encantado con la idea

- bien, mañana mismo la traeré para que pueda ponerse a sus ordenes señor-

- de acuerdo, ve a la casa de yakuza y traeme a eda jovencita que tanto me gusta, debo celebrar por nuestra nueva arma-

- enseguida estara frente a usted- luego de eso Jao se retiró a cumplir las órdenes de su jefe

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