El rey demonio maldijo internamente, era consciente de que a pesar de que Rogrand sea su consejero, este siempre se burlaba discretamente de él, como si se creyera más inteligente que su señor.
< a veces me pregunto el cómo permití que llegaras a ser mi consejero. > pensó el rey demonio sin apartar la vista del demonio anciano.
— tal vez sea mejor decirle que la Santa de la Luna sigue viva. — dijo Rogrand
Ante tal revelación el rey demonio se mostró sorprendido.
— ¿como estás tan seguro? si yo la mate— le cuestiono el rey demonio
— no subestime a este anciano, pude comprobarlo yo mismo — respondió él — yo fui testigo de ver como ella se arrastraba lejos del castillo
— ¿sin ser atrapada por un demonio? Eso es imposible —
— si fue posible —
— entonces ¿por qué no acabaste con ella? — le pregunto el rey demonio
— este cuerpo anciano tiene sus límites, aunque no pude acabar con ella, fue encerrada en lo más profundo del calabozo y es un hecho de que no sobrevivirá la semana y sé perfectamente que ella no volverá a aparecer delante de nadie nunca más... no se atrevería... — respondió Rogrand aunque en su voz había algo de malicia cuando dijo lo último
Azalea se hallaba sentada en la cama y acurrucado en sus rodillas estaba Mury, ronroneando por las caricias que recibía de su dueña.
Ya habían pasado tres horas desde que el rey demonio se fue con aquella criatura y no sabía en qué momento regresaría.
< ¿qué se supone que debería hacer ahora? Escapar no es una opción... > pensó Azalea aburrida de estar encerrada.
Mury chilló saltando de la cama mientras iba a la puerta y empezaba a rasguñarla con sus pequeñas garras.
— ¿te aburres de estar aquí adentro? — pregunto Azalea cargando a Mury. — yo también, pero no podemos salir, incluso si el rey demonio no está siempre hay demonios que vigilan todo el castillo
< si llegara a salir entonces le informaran al rey demonio quien podría interpretarlo como si quisiera escapar y quien sabe que castigo me dará. > pensó Azalea preocupada. < aunque tomando en cuenta que ahora estoy sana, el rey demonio podria dejarme al menos salir de esta habitación. Aún quiero irme y recuperar la vida en Sonlo, pero será imposible escapar de aquí, mis poderes no me sirven mucho... solo tengo que conocer este y descubrir una nueva forma de escapar. Hasta entonces, no debo bajar la guardia ni siquiera con el demonio más poderoso. >
— aguantar hasta entonces — dijo Azalea determinada
Mury la miro sin comprender.
— pero antes, necesito darme un baño — dijo Azalea mirando su cabello grasoso. — no aguanto estar más así. me pregunto si los demonios tienen tinas
Más tarde, el rey demonio iba de regreso aún pensativo por la reunión con su consejero.
— realmente despreciable...— murmuró disgustado el rey demonio
< ¿cómo fue posible que mantuviera a la Santa de la Luna con vida? ¡Si yo la mate junto al héroe... realmente lo hice ¿no? >
Intento hacer un esfuerzo en recordar los detalles de su batalla contra ellos pero unos pocos recuerdos borrosos pasaban por su mente dejándolo sin respuesta alguna, solo con una migraña cada vez que intentaba recordar.
< ¿por qué no recuerdo nada? ¿Qué sucedió aquel día para que olvidara todo? > pensó mientras sujetaba su frente y soltaba un siseo.
Al entrar a su habitación vio que Azalea se hallaba sentada sobre varios cojines aventando a su grifo para luego atraparlo, cabe resaltar que se hallaban lejos de la cama del rey demonio.
— si quieres puedo lanzarlo hasta la montaña— dijo el rey demonio
Abrazo inmediatamente a Mury mientras esté se frotaba cariñosamente contra su pecho.
— ni se atreva — gruño Azalea
El rey demonio miro directamente al grifo bebe y este miro al gran demonio.
Algo que Azalea no sabía era que Mury era agresivo con el resto de personas en especial los hombres que querían acercarse a ella.
Mury hizo una mueca burlona dedicada al rey demonio. Si Mury pudiera hablar diría "Envídiame"
< ¡escapo de un dolor de cabeza para encontrarme con otro! ¡Maldita sea! > maldijo el rey demonio internamente.
Hace unas horas tenía que lidiar con Rogrand y ahora con la alimaña de su querida humana.
— ¿has comido algo? — pregunto el rey demonio intentando dejar de pensar en el molesto grifo
— nada aún — respondió Azalea cortante
— en ese caso seria una buena oportunidad para comer en el comedor nosotros dos — sugirió el rey demonio
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 63 Episodes
Comments