Capitulo 19: Baile

El día de la fiesta de cumpleaños de Augustus había llegado cientos de carruajes que se estacionaban cerca del palacio imperial y muchas personas bajaban de estos carruajes entre esas personas estaba Amarilis con un bello vestido de color negro y rojo, con un encaje blanco y pequeñas decoraciones en oro puro, haciendo aún más notoria su belleza ante todos en el palacio.

Ella se presentó junto a su padre, sus madres y Annabelle, quienes hicieron una perfecta reverencia ante su majestad, aquel Emperador estaba más que feliz al ver a esa familia, su hijo Augustus siempre hablaba maravillas sobre la segunda hija del Conde y vaya que nunca mentía, el mismo pensaba que si ella hubiera estado en sus años de príncipe, gustosamente la hubiera aceptado como Emperatriz o concubina.

- Señorita Amarilis es un gusto saludarla y poder verla formalmente, como es debido - *Dijo Augustus sonriendo al verla*

- Es un placer verle majestad y déjeme felicitarlo por su cumpleaños - *Dijo Amarilis en un tono serio y algo molesto*

Y no era de menos, el descaro de saludarla después de todos los problemas que le ha dado a ella, por ejemplo interferir con su ascenso hacer nueva heredera del Condado, ya que el difundió rumores sobre cosas maliciosas de ella y muchas veces su padre le menciono sobre las múltiples cartas de propuestas de matrimonio para convertirse en Emperatriz, obviamente su padre nunca aceptó ninguna, ya que el también se enteró sobre los trucos sucios que realizaba el príncipe solo para tenerla a su lado.

Amarilis agradecía poder contar con el apoyo de su padre y Annabelle también le tenía rencor, ya que oír culpa suya tuvo mucho dolor en su cuerpo por las heridas que ese inútil le causó, su relación con el Duque Alejandro y se podría decir que algo comenzaba a surgir entre ellos, pero no era el momento de hablar de ello.

- Bueno, señorita Amarilis me gustaría invitarla a bailar formalmente, ya que de cualquier manera usted y yo seremos prometidos - *Dijo Augustus con una sonrisa aterradora*

Amarilis solo miro esa sonrisa y un inmenso miedo se apoderó de ella y como si fuera por instinto acepto bailar con el tomando su mano, Augustus sonrió de oreja a oreja por eso, sabía muy bien que ella era fácil de intimidar, y no era menos durante un tiempo la tuvo en prisión e hizo de ella un sin fin de cosas que solo se quedó en aquel calabozo oscuro como recuerdo de cuántas lágrimas le hizo derramar y cuánto la hizo sangrar.

El baile comenzó y mientras el príncipe sonreía por ello a cada segundo, Amarilis se encontraba como en un trance, su realidad para ella no existía en ese momento, cada pasó que daba era como caminar entre rocas tan filosas que se enterraban en sus pies, su mano y cuerpo seguía a Augustus como si ella fuera una marioneta a la cual Augustus manejaba a su antojo, el baile termino, pero al final Amarilis sintió como los labios de Augustus se unían a los de ella.

Ese beso era muy rudo y sentía ganas de vomitar, así que sus ojos se comenzaron a llenar entre lágrimas, empujó a Augustus y ella salió corriendo del salón sin mirar atrás y sin prestar atención a su padre quien la llamaba muy asustado, ya que había notado ese rechazo y gran miedo en ella.

.

.

.

.

.

Amarilis llegó hasta el jardín más lejano del palacio, había corrido durante tanto tiempo que sus piernas no daban para más, así que se dejó caer al suelo y cubrió su boca, ya que las ganas de vomitar aún no se iban de ella, así que busco un lugar y finalmente vacío su estómago en un lugar, mientras lágrimas caían de sus ojos.

Ella creía que había olvidado todo lo que ocurrió en el calabozo del palacio, aquel día en el que perdió lo que una mujer tiene y conserva hasta llegar al altar, el ardor de su vientre, la sangre que corría por sus piernas y esa constancia sensación de asco que recorría su cuerpo, mientras Augustus se aferraba a su cuerpo lastimado y hacía sangrar su boca.

Sobre todo que no fue una sola vez, fue tantas veces que ya ni siquiera podría contarlas de todas las veces que fue tomada en contra de su voluntad, Amarilis lloraba desconsoladamente, cubría su cara como siempre lo hacía cuando lloraba.

Maximiliam quien la vio salir del salón llegó hasta ella, pero prefirió no acercarse, se suponía que el no debería estar ahí, por ello incluso aunque quisiera ir corriendo hacia ella, abrazarle contra su pecho y calmar su llanto, no podría hacer nada, no por ahora, por ello se fue hacia otro lugar para no interferir.

Más populares

Comments

Isabel Conde Lema

Isabel Conde Lema

qué asqueroso es el príncipe, espero que reciba una buena tortura /Determined//Curse/

2024-03-08

2

Lenita

Lenita

Es una pena pero tienen que encontrar una forma de alejarse de Augustus.

2024-03-08

1

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play