Los preparativos para el funeral fueron rápidos, solo asistieron los más allegados a la familia y los familiares más cercanos, siendo primos segundos, tíos lejanos y otros, pues, de la familia principal solo quedaban Felipe y Andrew.
El humor estaba por los suelos, Felipe estuvo todo el tiempo hundido en sus propios pensamiento mientras Andrew intentaba sobrellevar todo de forma responsable y calmada, después del entierro Andrew me mando a llamar a su oficina.
Al entrar a la oficina pude notar los aires de soledad que tenía, era la misma oficina a la que entré el día que conocí a Antonio y comencé a trabajar, a pesar del ser la misma oficina no se sentía igual, además de que todo empezó en esa misma oficina tal parecía que todo terminaría allí también.
—Hola ¿Para que me llamaste?
—La verdad ya puse la última cuota en tu cuenta, pero quise agradecerte en persona por todo lo que hiciste, incluso te ganaste nuestro cariño.
—Honestamente, no me siento cómodo aceptando ese dinero, lo mejor es que se lo regrese, le tome mucho cariño al señor Antonio y ustedes me alimentaron y me dieron un techo.
—Lucas, no sé si eres estúpido o muy bueno, no me tienes que regresar nada, estuviste aquí por meses, con ese dinero podrás hacer lo que quieras, además de que lo trabajaste, cuídate a mi padre y si, le mentiste, pero no lo hiciste con una mala intención de por medio.
—¿No me dejará regresarle el dinero?
—No, además a mí me sobra, en cambio, tú no es que lo necesites, pero es lo justo, fue lo que se decidió en el trato, solo quiero que lo uses bien, ya que es mucho.
—Gracias señor Andrew, sé que como dijo es parte del trato, pero usted nunca me trató mal y siempre respeto mis decisiones, me alegro de haberlo conocido.
—No hables de esa forma, siento como si te estuvieras despidiendo y no también como si me estuvieras diciendo directamente que no nos veremos más.
—Pienso irme de viaje, no es que no lo vaya a ver más, también me aseguraré de escribirle y seguir en comunicación con usted.
—¿De viaje? Suena bien, no olvides comunicarte conmigo.
—Si señor.
Hice una pequeña reverencia y me despedí, pero al momento en el que me dispuse a salir de la oficina Andrew se levantó y me dio un fuerte abrazo.
—Recuerda que no solo fuiste un simple empleado, espero que te vaya bien.
No pude evitar corresponder el abrazo de Andrew, estuvimos así por casi un minuto y después me despedí, Andrew insistió en acompañarme a la salida, pero me negué.
De camino a la salida vi a Felipe acercarse a mí, pero al pasar junto a mí me ignoró totalmente, vi que me miró de reojo, pero ni siquiera intento hablarme, me quedé parado un segundo con la mente totalmente en blanco hasta que recordé un leve detalle, no estaba travestido era yo.
Era más que obvio que no me reconocería, no importaba que él solo reconocería a Ana, no a Lucas, continúe caminando y salí de la casa de Andrew, un chófer se ofreció a llevarme, pero decidí ir a pie.
Le eché una última mirada a la casa de Andrew y solté un largo suspiro, las vivencias del último mes me acompañarían toda mi vida, a pesar de irme, sentía un gran vacío, ignore ese sentimiento y me encamine a la cafetería donde trabajaba Carlos.
Cuando llegue, Carlos estaba sentado en una mesa, al parecer llegué justo en su hora de descanso, me acerque a él y este me miró dedicándome una sonrisa llena de cansancio.
— ¿Qué ocurre? –Preguntó Carlos de forma amable– Te ves triste, no me gusta verte así ¿Sucedió algo en tu trabajo?
Había soportado todo perfectamente bien, pero al ver a Carlos y escuchar su pregunta no pude evitar romper en llanto, todavía no podía creerlo, mientras intentaba controlar las lágrimas que no tenían intención alguna en parar de salir abrí mi boca con intención de hablar, sin embargo, me costaba formular algún tipo de oración.
—Murió… el señor Antonio murió.
Los ojos de Carlos reflejaron tristeza, se levantó de su asiento y me abrazo, al sentir el cálido abrazo intenté calmarme, pero lo único que pude lograr fue llorar con más intensidad.
—Tranquilo Lucas, sé que duele, ni siquiera puedo decir que te lo dije… no sé la manera correcta en la que podría consolarte.
—No necesito que me consuelo, solo quédate así un poco más.
Las personas nos comenzaron a ver de forma extraña, pero Carlos no dejó de abrazarme, cuando mis lágrimas dejaron de salir y mis sollozos se calmaron totalmente, Carlos dejó de abrazarme y sonrió al sentarse frente a mí.
—Gracias, eres un buen amigo…
—No debes agradecerme Lucas, no quiero hacerte sentir mal al recordarte ese tipo de cosas, pero entonces¿Eso quiere decir que ya no trabajaras más fingiendo ser Ana?
—Si, ya me pagaron todo el dinero que acumule en estos cuatro meses, tal vez pueda ir a Estados Unidos, bueno, si quieres acompañarme podemos fácilmente ir juntos.
—¿Estás hablando en serio?
—Sí, quiero cumplir mi sueño, pero todavía no tengo ánimos, tampoco he revisado mi estado de cuenta y mucho menos sé cuanto dinero hay.
—Ya que estás aquí y yo soy muy chismoso, revisa tu estado de cuenta para ver cuanto dinero ganaste.
—Está bien.
Saque mi teléfono y comencé a revisar, Carlos se levantó rápidamente y me trajo una taza de café, cuando Carlos puso la taza frente a mi casi grito, el dinero en mi cuenta era una suma inimaginablemente alta, al ver mi rostro Carlos se confundió.
—¿Estás loco? ¿Por qué pones esa cara Lucas?
Ni siquiera podía formular de forma coherente una simple oración, le mostré la pantalla de mi teléfono a Carlos y casi se desmaya.
—¿Cuántos órganos vendiste?
—Ninguno… pero esto es casi el triple de lo acordado por cuatro meses.
—Lucas, con ese dinero puede pasar años sin trabajar y malgastando mucho.
—Bueno, esto quiere decir que podemos irnos en dos semanas a Estados Unidos.
—Es una buena noticia.
—Si –Dije con un tono muy desanimado– si lo es.
No podía negar que era una buena oportunidad para comenzar una nueva vida y abrir mis oportunidades, tal vez esta era mi única oportunidad para cantar, pero en el fondo de mi corazón me sentía mal, Antonio había muerto y tal vez ya no volvería a ver a Felipe y Andrew.
Después de charlar con Carlos, él decidió renunciar ese día, Carlos me ha apoyado desde niño, no creo poder irme sin él, además de que es una oportunidad única para ambos de conseguir mejores vidas.
Parece falso, pero el dinero ayuda a abrir buenas oportunidades y además ayuda a resolver muchos problemas, no todos, pero si la mayoría.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 23 Episodes
Comments
ᰔᩚ ʏᴜᴍɪᴋɪ ʜᴀʀɪsʜᴀᴍᴀ ᰔᩚ
también me dolió perder a Antonio... pero cosas buenas vendrán espero
2023-01-11
6
Diana
Pobrecito mi bebe, ya no soporto más
2023-01-12
0
Diana
No, no te va a dejar, tu te lo ganaste
2023-01-12
0