Adam:
Me meto a bañar para quitarme el olor a sangre pero no dejo de pensar en Enma, en lo nerviosa y extraña que se veía, estaba llorando, a mí no me engaña.
¿ Será porque casi la beso ? Casi pierdo el control, de no ser por el ciervo hubiera hecho algo estúpido. Es que se me acercó tanto, sentía parte de su pequeño cuerpo frío y su rostro estaba tan cerca, ese sonrojo apareció de nuevo y sus ojos oscuros brillaban anhelantes con cierta inocencia, esos pequeños y redondos labios tentando mi juicio.
Maldigo cuando mi masculinidad responde en la ducha, muevo la cabeza bruscamente para dejar de pensar estupideces y me concentro en el agua cayendo sobre mi cabello y mi cuerpo.
¿ Qué rayos me ocurre ? Ya deja esa tontería, no estoy para tener otro pensamiento a parte de sobrevivir el tiempo que pueda y no quiero sentir absolutamente nada por Enma, eso me haría débil, no quiero volver a pasar por lo mismo.
Después de bañarme me visto pero siento como si algo estuviera diferente. Observo el armario, observo los monitores y los cajones pero al parecer no hay nada mal puesto. Me siento en la cama mientras me seco el cabello cuando observo el suelo de forma casual.
Frunzo el ceño y dejo la toalla a un lado, observo detenidamente, hay marcas en la cerámica, como si algún objeto fue arrastrado.
Me agacho observo bajo la cama, la caja de Alba sigue allí pero hay algo que no cuadra. La tomo y la saco. La tapa está limpia, se logra leer el nombre como si alguien hubiese pasado la mano. Recuerdo cuando metí la foto que no la limpie y las marcas en el suelo parecen recientes.
Abro la tapa, todo parece estar en su lugar excepto el cofre del anillo. Está con la tapa hacia arriba y yo siempre lo dejo hacia abajo.
Cierro la tapa de la caja y la empujo de nuevo a su lugar mientras me empiezo a enfadar. Aprieto mis manos en puño mientras respiro con fuerza. Solo hay una persona a parte de mí en el refugio.
Enma Suárez se atrevió a hurgar en cosas que no son de su incumbencia.
Me levanto rápidamente y salgo como alma que lleva el diablo de la habitación.
Llego a la sala, Enma está en la cocina picando un trozo de carne en la tabla mientras tararea una canción. Debo controlarme, trato de serenar mi humor pero esto es demasiado.
Se queda callada y se gira al notar que estoy detrás de ella. Me observa y nota que estoy de malas, se encoge de hombros y baja su mirada.
— ¿ Qué sucede ? — Pregunta y me acerco demasiado mientras mantengo mi mirada firme, retrocede pero la repisa la detiene.
Se asusta de inmediato.
— ¿ Entraste ha mi habitación? — Pregunto con una voz serena que esconde toda mi furia.
Se tensa y alza su mirada, pero no responde. Abre su boca pero se queda muda.
— ¡ Responde, maldita sea ! — Exigí.
Se sobresalta.
— No... Es que yo... — Tartamudea mientras empieza a temblar.
La tomo del brazo y suelta un pequeño jadeo. Hago que me observe los ojos, los suyos se empiezan a aflojar, me da una expresión de dolor.
— ¡ No mientas ! — Gruño mientras aprieto mi agarre.
— Me lastimas — Jadea mientras se le sale un sollozo.
— Responde...
— Si... Si entré — Murmura mientras su labio tiembla.
La suelto, retrocede de inmediato mientras empieza a llorar.
— ¿ Qué rayos buscabas ? — Pregunté mientras mi enojo aumentaba.
Se limpia las lágrimas y me fulmina con la mirada.
— Un libro... Quería leer un libro y pensé que tenías uno... — Gruñe mientras se abraza.
— ¿ Y no podías esperar a que yo viniera ? Tenías que entrar a registrar cosas que no son de tu incumbencia, meter tu naríz en mis cosas privadas como si tuvieras todo el derecho hacerlo.
— Se que no tenía derecho... No lo hice al propósito... Pero...
Se quedó callada mientras tragaba con fuerza.
— ¿ Pero qué ?
— Quería saber más... quería saber más de tí... — Dijo y me quedo desconcertado.
— ¿ Por qué rayos una mocosa como tú quiere saber más de mí?
— Curiosidad... — Corta rápidamente — Es que eres tan amargado, frío y... Me cuesta creer que exista una persona así, sin sentimientos — Gruñe mientras me observa a los ojos.
Me enojo de nuevo ¿ Cómo se atreve a decir que no tengo sentimientos? Ni siquiera me conoce.
— ¿ Quién es Alba ? Gritaste su nombre mientras tenías pesadillas... Y también ví su nombre en la caja, ví las fotos... ¿ Qué le sucedió a tu esposa y a tu hijo ?
Me altero cuando empieza a preguntar, jadeo. Las imágenes vienen a mí y me atormentan, se me salen las lágrimas, retrocedo y entierro las manos en mi cabeza.
Enma se acerca y me toca el brazo.
— Lo siento... No quise... — Dice y me zafo de su agarre.
— No sabes nada de mí y no tienes porque saber, no eres quién para tomarte el atrevimiento de meterte en mi vida... No eres nada, no significas nada, solo eres una chica a quién salve por pura lástima... Hubiera hecho lo mismo por un animal... Así que déjame en paz, que sea la última vez que haces algo como esto.
Se queda inmóvil con dolor en sus ojos ante mis palabras.
Se aleja llorando y se encierra en su habitación.
Maldigo en alto mientras intento controlarme. Me dejo caer al suelo mientras golpeo el suelo con mis puños.
¿ Por qué te importa tanto lo que me sucedió?
( Recuerdo del ataque)
La fila de autos en la avenida no se mueve de hace dos horas. Tocó corneta mientras maldigo en alto.
— Adam, calma... Seguramente ocurrió un accidente — Dijo Alba mientras se tocaba la barriga y sonríe — Ojalá no seas así de amargado que tu padre.
— No, quiero que se parezca a ti pero yo no soy amargado — Dije y se rió.
— Te enfadas fácilmente, tómalo con calma.
— Debíamos llegar a la casa de tus padres hace una hora — Dije y saca el teléfono de su bolso.
— Tranquilo... Los voy a llamar para avisarles que llegaremos tarde.
— Como siempre me echarán la culpa a mí.
Hace una expresión de que guarde silencio y me río. Se queda un momento esperando hasta que contestan.
— Aló... Papá... Estamos en la avenida, hay una cola y... ¿ Qué? ¿ Qué regresemos a casa... Pero... — Murmura Alba y luego baja su teléfono — Se cortó la llamada.
Frunzo el ceño — ¿ Ahora qué?
— Dice que volvamos, que hay un caos en el centro de la ciudad... Parece ser que la gente está saqueando y se han puesto agresivos.
— Aún así no podemos volver hasta que la fila se aligere.
Un sonido estremece el auto. Parece ser una explosión.
— Oh, Dios mío ¿ Qué fue eso ? — Dijo Alba asustada.
Observo por el espejo retrovisor como una nube de humo se expande hacia el cielo. Lo gritos empiezan a escucharse, hay mucha gente corriendo y otras bajan de sus autos para correr hacia la misma dirección.
Se empujan unos a otros, alguien choca contra la ventanilla de forma violenta y se vuelve a levantar para lanzarse sobre otra persona que intenta correr.
Del otro lado Alba observa espantada como un hombre es atacado por otros dos. Lo jalan de la piernas, observa a Alba suplicante. Ella lleva la ventanilla abierta y el hombre manotea.
— ¡ Auxilio, por favor, ayuda ! — Grita mientras intenta zafarse.
Alba abre la puerta.
— ¡ No, quédate en el auto, no vayas allá ! — Gruño, tomándola del brazo.
Me observa angustiada.
— Adam, hay que ayudarlo... No seas insensible.
— No, Alba... Piensa en nuestro hijo, está gente se ha vuelto loca... Pueden hacerte daño.
— Descuida, no van lastimar a una embarazada... No puedo permitir que ataquen a ese hombre.
Alba se zafa de mi agarre y sale del auto.
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Updated 67 Episodes
Comments
Natalia Beatriz Leguizamon
tiene razon
2025-01-29
0
Natalia Beatriz Leguizamon
uuuuuu
2025-01-29
0
Zafiro
Ay no! Que horror 😭
2024-03-14
4