No tengo miedo de saber que me espera sin protección.
Entonces ¿Por qué me detengo? Además de recordar que fui inyectada por unos malditos inútiles. Simple, estoy debil y no se cuando tendré otra crisis, así que no quiero ser descuidada y dejárselo facil a mis raptores. Si me atrapan será porque estoy casi muerta por luchar.
Subo una montaña dando saltos para acelerar la llegada a la cima. Me siento libre al moverme ágilmente sin pensar en mis problemas, tanto de salud, como de territorios o del clan. Llego a la cima en segundos con unos leves jadeos por correr. Suspiro profundo tomando aire en mis pulmones cuando me detengo.
¡WOW!
Mis ojos al levantar la cara, se encuentran con algo hermoso. El cielo nocturno con unas nubes que lo cubren apenas, con abundantes estrellas que brillan dando vida; una que otra estrella fugaz pasar y la luna llena en su mejor resplandor acompañándolos, llevándose mi mayor atención. Los arboles se vislumbran con su luz dandole vida al bosque oscuro.
Cierro los ojos escuchando a las criaturas nocturnas y el ruido de las hojas al golpearlas el viento con suavidad.
Hay demasiada paz y armonía, comparado con mi interior... incluyendo el exterior que es desastre e intranqulidad. Suspiro abriendo mis ojos y dando un ultimo vistazo a tan encantador lugar antes de mi partida.
Desaparezco y en un instante estoy en las afueras de la casa yendo a la puerta para adentrarme.
Creo que dejar las palabras en boca de personas se esta convirtiendo en mi hábito. También se convierte en hábito encontrar a Annie en mi habitación Y con su aura de molestia. Admito que dije que no se alejara, pero al menos debería esperar mi llamado ¿no?.
"¿Y? ¿no deberías estar en tu habitación?", digo sin voltear a verla. "... ¿o empezabas tu sesión de estimulación?", agrego con ironía caminando en direccion al baño
"Me gustaría explicar lo que sucedió aquel dia", menciona siguiéndome
"Mmm... ¿Que excusas dirías?", pregunto llegando a la entrada del baño mirándola de frente al voltearme. "...¿no fue obvio?"
Es su problema, pero en mi cama no debería hacer algo así.
"¡No! Me gustar..." cierro la puerta, respondiendo con el estruendo al cerrar con fuerza.
Tarde algunos minutos y salí fresca sin mal olor en mi por el sudor que tenía encima. Muevo a vestirme tomando un camisón grande y largo para cubrirme el cuerpo.
"Creo haber escuchado que explicarias", digo indiferente a su presencia, mirándola sobre mi hombro con una ceja alzada. "...así que, habla", mencioné toscamente.
"Acompañeme a mi habitación", invita con un sonrojo leve en sus mejillas moviendo sus dedos entre sí.
No sabía que podía enrojecer. Y tampoco es que me importe que le suceda a su cuerpo.
"¿Disculpa?", sonrío confusa, frunciendo el ceño por su pedido
¿No puede hablar en esta habitación? Ah. Claro. Seguramente tiene información oculta retenida en su cuarto porque su memoria es tan corta que lo ha escrito en un papel para que no se le olvidaran las excusas. Su mirada se suaviza al ver que no me moveré.
Suelta un suspiro y se acerca a mi. "Vamos", suplica tomándome de la mano, "... sera rápido"
"Tienes 15 minutos", le advierto
Su habitación no esta lejos de la mía, solo unos cuantos metros. No es tan grande pero desborda calidez y tranquilidad. Me indica que tome asiento en el sofá, y me ofrece un té, enarco una ceja por su ofrecimiento.
Algo me dice que esta situación no esta bien, tambien el aceptar lo que ofrece. Pero no me detengo por presentimientos y lo bebo esperando explicaciones.
Su mirada cae en mi, puedo ver algo de culpabilidad en ella ¿pero, por qué? se acerca más a mi y levantó mi rostro -ya que estoy sentada y ella de pie- para seguir su mirada. Pasan unos segundos y mi paciencia se empieza agotar. Annie no habla y me está estresando.
" ¿Hablarás?", pregunto con fastidio y algo de exasperación. "...¿o solo te querdaras mirando?"
Me da la espalda y apenas asiente. Mi cuerpo lo siento extraño minutos después, como si algo se expandiera lentamente... lo cual comienza alarmarme. Annie toma asiento al borde de la cama de lo más tranquila y me observa con curiosidad. Parpadeo varias veces y paso mi mano por mi rostro. Mi vista está empeorando. ¿Cómo podría pasar eso?
En mi mente comienzo a buscar algunas opciones para saber de por qué me siento así.
Mis sentidos empiezan a apagarse, mi visión comienza a tornarse borrosa, también mis movimientos se vuelven debiles.
"Sé que esta mal", dice y apenas la escucho ¿una crisis nuevamente? Pero... no siento dolor ni asfixia. "...es algo que necesitas, Vain", su voz es un eco que apenas logro definir en qué manera lo dice. "¿De que hablas?", sigo en la poca racionalidad que me queda, estrujo mis ojos tratando de quitar el sueño que está invadiendome.
"¿Que esta mal?", insisto y mi vista se pone borrosa completamente sin poder distinguir algo de su silueta. ¿Que... mierda?
"Lo que ocurrió aquel momento...", parpadeo varias veces tratando de fijarme en ella sin parpadear tanto. "... es su culpa", mi ceño se frunce ante su respuesta extraña... muy extraña de por sí. ¿C-como que mi culpa?. Niego lentamente, "¿Qué? No te ordene hacer eso", siento que mi cabeza da vueltas y me desorienta.
¿Que esta pasando? Además, ¿Por qué sale con que es mi culpa? No recuerdo algo parecido a lo que dice. No le ordené tocarse.
"Me provocaste hacerlo", rie con desgana y mi cara es confusión total por ello porque no la estoy comprendiendo del todo. Esas palabras que apenas entiendo por mi malestar. "Hablamos... luego", digo estrujandome los ojos inútilmente. "...tengo que irme", anuncio con aspereza y me levanto para regresar a mi habitación, pero lo impide.
Hago un esfuerzo por safarme, algo inútil porque mis movimientos son debiles, el marearme y no tener mi visión al cien, me siento como alguien ebrio. Supongo que así se deben sentir cuando eso ocurre
Luchar es inútil, por lo tanto, caigo al suelo perdiendo la consciencia.
Al cabo de ¿segundos, minutos u horas? despierto lentamente. Activando mis sentidos, Algo que no ocurre completamente. Mis habilidades están muertas, sin funcionalidad. Parpadeo somnolienta por el desmayo y reparo todo a mi alrededor.
Sensación de comodidad. Volteo. Me encuentro en una cama. Detallo cada cosa para recordar el sitio. Muevo las manos para apoyarme y levantarme de la cama.
Siento un frío que me recorre la piel, así que bajo mi vista y esa sensación es porque estoy completamente desnuda. Y lo segundo y peor... Para mi sorpresa: estoy con esposas y que las mismas, estan sujetas al respaldo de la cama impidiendo que me mueva y me levante. Hago el esfuerzo por romperlas; inútilmente fallo, no tengo fuerza suficiente para partir en dos unas malditas esposas.
No entro en desesperación, trato de tapar un poco mi intimidad cruzando mis piernas. Busco posibilidades de salir porque aun nosé donde me encuentro. Estoy inservible, nada funciona. Soy presa fácil.
Todos mis sentidos vampíricos no funcionan. Prácticamente soy humana.
Solo hay una planta que hace a un vampiro debilitarse de esta manera. Si lo bebes en dosis altas podrías morir; se utiliza para inyectarlo a vampiros que tienen que pasar por el interrogatorio.
¿Cuál era el nombre? Siempre ha llamado mi atención ese tipo de veneno, pero en estas tierras no se consiguen los ingredientes necesarios. En mi cabeza esta ese plan y que no se ha ejecutado por que prefiero usar mis garras para la tortura, sin embargo, eso no es lo que viene al tema.
El aire no entra bien en mis pulmones. Cierro con fuerza mis párpados y los abro para verificar.
Me siento sorprendida al ver la silueta con ropa interior sexy, mostrando muslos, ese tatuaje que se desliza a su parte intima, vientre que llamo mi atencion por lo atlético y su par de redondez que me emboban por lo firme y grandes que son. Trago saliva al ver esa mirada felina en esos ojos grisáceos, con su cabello marrón rojizo que cae a a sus hombros totalmente liso.
El cuarto de Annie es mi ubicación.
Esta es una situación que jamas pasaría o pasó por mi cabeza, donde yo sería la protagonista de tal cosa. Cierro mas las piernas y no pierdo de vista a ese cuerpo frente a mi.
Estar desnuda frente a ella, en este momento, es incomodo por el simple hecho de estar esposada al respaldo de la cama, como si fuera una bestia o algo parecido para evitar que se lanze o huya del lugar.
No me inmuto, ¿Por qué mierda ha hecho esto? ¿Ella es una de las que me traicionaron?... es la solución inmediata que se me ocurre por el nerviosismo y por el método de como lo hizo.
¿Por qué, sino? ¿Que otra cosa sería sino sacar mi sangre?
Intento desatarme rompiendo las esposas. Pero la debilidad no me permite ejercer la fuerza suficiente para eso.
Nada resulta.
Moriré estúpidamente por confiar en los que crei tenian lealtad a mi. Sonrió inorica.
Estoy alertada, mas no alterada o eso intento. No le daré el gusto de verme llorando y suplicando. Mi orgullo no me permite hacer eso, mucho menos ahora.
" ¿Que esperas? ¿Que suplique por mi vida?", digo con firmeza y con algo de ironía en mi voz.
Es muy patética si lo cree. "No, Usted no haría eso", dice sentadose en la cama. "Lograré hacer que suplique por otra cosa que no sea su vida", río cuando termina sus palabras.
¿Que? No. "¿De que hablas?", me confunde lo que dice y la sonrisa desaparece. Odio los rodeos. "¡Termina lo que piensas hacer! Moriré sin aceptar o hacer lo que tu quieras", ella frunce el ceño por lo que escuchó, supongo, y sus ojos están fijos en mí.
"¿Morir?", pregunta confusa con el rostro ladeado. "¿Como moriría usted?", suelta segundos después sin dejar de mirarme.
"Dimelo tu", la incito. "...¿como te ordenaron asesinarme?
Mis palabras la dejan impactada o ¿se sintió ofendida? ¿que significado tiene su reacción en este momento?. Abre su boca, ahora sorprendida y con algo de miedo. ¿Miedo de que la haya descubierto?
No logro descifrarlo, pero no me hace bajar la guardia. Hace un movimiento al intentar acercarse, pero por instinto mi cuerpo reacciona en rechazo encogiéndose.
"Al llegar tan bajo al punto de drogarme ¿No deberias sentirte avergonzada?", menciono con burla enarcando la ceja por... esa técnica.
Al pensar asi me hace enojar conmigo misma.
Puede que de impotencia por no poder hacer nada. No parece que asesinarme sea su intencion. Si es asi ¿Para que esposarme e incluso desnudarme?
Me siento tan incomoda en esta situación.
Pasan minutos esperando que proceda a lo que hará.
¿Aun espera que suplique? Bueno, si tuviera mi personalidad anterior podría decir que estaría soltando lagrimas por lo que esta haciendo e incluso podría pensar que querría asesinarme. Con la personalidad actual eso no ocurrirá y si pasa, tendrá que hacer mas esfuerzo por ello.
No ocurre nada.
Levanto curiosa por saber que hace. Solo Sigue en el sitio donde tomó asiento con la mirada en mi. Sin ningún tipo de sentimiento, solo seriedad. Desprende un aura de molestia o decepción ¿Cómo distinguir si tiene ese rostro serio?
"¿Aún esperas que suplique?", comento con ironía burlona.
Sin respuesta.
Se mueve, no se como, que sujeta mis piernas evitando que la golpee, ya que se sienta en mi vientre de lo mas normal. Su calidez me da un escalofrío, pero no dejo de intentar quitarla de encima y resulta bastante en vano. No se mueve ni un milímetro.
Acaricia desde mi vientre pasando de mi pecho, mi cuello, llegando a mis labios. Volteo rechazando su toque. Sujeta con ambas manos para que no evite: su mirada que tiene una intriga enorme que no logro descifrar y su toque que me da escalofríos.
"Eso sería estupido de solo pensarlo", murmura segura
"Que bueno que nisiquiera pase por tu mente", murmuro con falsa dulzura. "¿Esto es una nueva tortura?", hablo con diversión. Sin embargo, mi actitud titubea cuando está reduciendo la distancia.
Se acerca a mi mordiendo mi mejilla, sigue a mi cuello lamiendo y besando delicadamente, erizando la piel de mi cuerpo. Esto es algo completamente nuevo para mi. Y tal cosa hace surgir algo extraño, y como tal no me agrada por el simple hecho de qué mi cuerpo no le esta desagradando.
Intento como puedo de alejar esa boca de mi cuerpo, hundiendo mas el cuerpo en la cama, pero no es posible tal cosa porque tiene la facilidad reducir la poca distancia que hago.
"No se que pase por su mente", habla mientras baja por el valle de los pechos, olfatea sonrojandome. "... pero la haré cambiar lo que piensa".
Besa en medio de mi pecho, se mueve al izquierdo. Lamiendo con una lentitud que me comienza a alterar la respiración agitadamente. Muerde la punta con delicadeza como si fuera frágil y lo chupa sacandome un jadeo que, sin mi permiso, escapa.
Me remuevo bajo su cuerpo por como hace que mi cuerpo exija que me deje de mover y que disfrute. Las malditas esposas no se rompen cuando intento lo que sea. Ella, sin embargo, no se detiene de sus acciones y su lengua acaricia uno con demasiada ternura o se podría decir delicadeza.
Joder. Su boca es un fuego que esta incitando a mi cuerpo a quemarse junto a ella. Tan cálida.
Intento mantener mi actitud firme e indiferente, pero la calentura en mis mejillas no ayuda. "¿Cambiarás mi personalidad... en unos minutos... según quien?", cuestiono un tanto difícil por su toque en mi.
A medida que sigue envia electricidad a mi parte baja, llenando de esa sensación que percibí en varios días y distintas situaciones y que jamás pensé que que me la provocaría la persona en quien menos pensé.
No sé lo que pasa por su mente. Es demasiado impredecible.
"Su inocencia me pone mucho", dice entre un jadeo en mi oido, provocando que cierre mis ojos ante tan... deliciosa sensación que envió aquello. Suspiro nerviosa.
¿Inocencia?
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