Capítulo 19: Dos hermanos Enfrentados

Fabricio

Fui al casino a trabajar, echaba de menos la compañía de mariza, sentada en su escritorio.

Marcelo estaba conmigo, vino a traerme unas invitaciones que me llegaron de unos eventos al cual no me interesaba ir.

— ¿Viste esto Marcelo? —Mencione.

—No ¿que cosa? —Comento con interés Marcelo

—Esta noticia es increíble—Solté—Habla sobre un delincuente el que se ha convertido en el nuevo Robín Hood del momento ya ha entrado a varias casas de gente adinerara principalmente a políticos y personas involucradas con el narco tráfico .Además hace una semana desbarato a una banda encargada de tráfico de personas.

Se caracteriza por dejar una flor y una tarjeta con la inicial Mn (Manto Negro)

—Qué tipo más increíble, definitivamente soy su fan—Le celebre.

—Si la leí , la policía está muy movilizada quieren atraparlo y a la vez no... .sigue acarreando fama y la gente lo aclama como un héroe nacional—Explico Marcelo.

—Y yo que creía que estas cosas solo pasaban en los cuentos , la vida no deja de sorprenderme.

—Así es Fabricio —Asintió Marcelo

—Bueno ¿qué tienes ahí? —Comente.

—Son invitaciones para el sábado, el casamiento del hijo del gobernador.

— ¿El sábado? No no voy a ir

—Pero es el hijo del gobernador

—Y que tiene Nunca hemos hablado, dile que se me hace imposible asistir, que ya tenía otros compromisos pactados, y que lamento muy enormemente no poder asistir a un evento de tal magnitud, envíale un regalo y listo

—Está bien ya me encargo.

Como a las dos horas golpean la puerta y entran, era Martin y venía con un ramo de rosas rojas, y una caja de chocolates

— ¿Qué mierda haces aquí? —Me puse de pie tirando mi lapicera sobre el escritorio—Lárgate ahora

—No he venido a verte a ti—Martin levanto una ceja —Así que cierra el hocico.

—Para que lo sepas yo la vi primero.

—Mira yo no vine a verte a ti, donde está mi flaquita

— ¿Tu qué? —Fruncí el ceño—Mejor ándate antes de que no responda de mí.

—¿Oh por qué la agresividad?, yo a ella no la he visto con un anillo en la mano ¿tu si? , para mi hasta que no la vea con un anillo estará disponible. Y si me elige a mi sobre ti te la vas a tener que aguantar—Espeto de mala gana— ¿Como la ves?

—Que mierda que eres definitivamente, le quieres quitar la mujer que quiere tu hermano—Menee la cabeza—Eres peor que judas.

—No veo el por qué, además ni novio son ustedes ¿qué me reclamas?

—Estás acostumbrado a quitarme todo, desde niño, pero no te lo voy a permitir—Le advertí.

—Bla bla hace lo que quieras no me importa—Se acercó a mi —A partir de ahora somos rivales por esa mujer, que te quede claro.

—No la vas a lastimar como las fáciles que te saben rondar, no tienes oportunidad alguna

—Muy bien eso lo veremos—Soltó una leve risa—Bien ¿dónde está Mariza?

—Le di el día libre, mejor vete y llévate esas flores horribles que trajiste— Me senté en mi escritorio.

—Ten, te dejo unos chocolatitos para que se te quite lo amargo.

—Retírate por favor, ah y cuando vayas a la casa vamos a hablar de otro tema muy seriamente—Le advertí —Y espero aparezcas pisas la casa cada vez que pasa un cometa.

Martin se ríe sínicamente—Si como digas, adiós perdedor salió por la puerta sin cerrarla.

— ¡ tienes cortinas en tu casa! —Vocifere.

Dios dame paciencia, como me enferma este tipo, si no fuera mi hermano ya lo habría agarrado a los golpes por irrespetuoso.

Siento que vibra mi celular en la mesa

Mensaje de Flor:

Voy al hospital de las Mercedes, Eric se hizo un corte el brazo ven rápido.

—Dios mío—Salí corriendo.

Al llegar estaba Florencia con Eric, lo estaban atendiendo

—Campeón ¿cómo te hiciste eso? —Averigüe.

—Jugando papa, perdón —Solloza.

—Estaban en el patio jugando con unas pistolas de agua, se resbaló y se cortó con el filo de la baranda de la escalera en el jardín—Explico Florencia.

—Voy a mandar que la dejen más segura, la verdad no me había dado cuenta que fuera peligroso—Respondí.

—Yo menos—Replico Florencia.

—Creí que era correcto que vinieras, no quería preocuparte

—Hiciste bien, me corresponde estar a mi presente—Reconocí mi posición —Gracias hermana

—A ver Eric no te muevas cuando el doctor trabaje —Le Advertí—Oh te puede cortar la yugular—Me mofe

— ¡Mentiroso! —Se quejó Erick.

—Si te portas bien te compro algo rico de comer ¿Qué quieres comer? —Pregunte.

—Una hamburguesa

—Bueno te llevo solo si te portas bien—Le advertí.

—Está bien.

Le hicieron varios puntos en el brazo y lo vendaron, por suerte no fue nada grave aunque se asustó bastante al ver tanta sangre.

Fuimos al Mc Donald a comer con Eric y Florencia

— ¿Y te gusta, Eric?

—Si está muy rico—Reconocio.

—Ah

—Hermano, ¿cómo vas con Mariza? —Pregunto Florencia

—Mal —Gruñi—El infeliz de Martin le dijo que era gay.

— ¡Que! Me imagino que se lo negaste—Me observo atentamente

—Emm no...

— ¿Como que no? —Frunció el ceño desconcertado.

—En realidad no pude hacerlo porque me ganaron los nervios, estábamos en la biblioteca me arrodille ante ella y estaba por decirle todo lo que siento, me sentía tan emocionado, y cuando estaba a punto de decirle todo, me cayó la boca, diciendo que ya sabía mi secreto

— ¡No! —Flor se ríe —No lo puedo creer.

—No me parece chistoso—Bufe—Ella piensa que soy gay no supe cómo reaccionar, solo pensaba en el infeliz de Martin

—Papa ¿qué es un gay?

Lo mire sin saber que decir, Florencia se reía

—Las personas malas y de mal carácter como tu tío Martin

—Ahh—Dijo Eric y siguió comiendo.

Florencia se reía

—Yo creo que deberías hablar con ella y decirle la verdad—Sugirió Florencia—Antes de que la cagues horriblemente.

—Se lo diré en algún momento, por ahora no le digas nada a ella

—Bueno pero habla con ella—Me advirtió Florencia.

—Si—Mire para otro lado

—Fabricio — ¿Que estas ocultando?

—Nada porque ocultaría algo

Se ríe

— ¿Bueno. Vamos a la casa? —Inquiri.

Llego el sábado

Le Mande un mensaje a Mariza:

Yo : A las nueve de la noche voy a tu casa

Mensaje de Mari:

Dale te espero

Le deje los niños encargados a Florencia, y que cualquier cosa que pasara me llamara urgente

Me di un baño estuve un buen rato en el vapor del agua meditando sobre al respecto de lo que paso y llegue a la conclusión de que sería lo correcto decirle la verdad

Pero no por ahora...Je.

Me puse un jean azul, unos zapatos negros una camisa negra un poco de perfume, tome mi celular las llaves de mi auto y salí

Al llegar a su casa golpee la puerta pero no me atendía.

¿No estará? —Pensé— A ver le llamare.

— ¿Hola? ¿Fabricio venís? —Inquirió Mariza

—Estoy afuera

—No te oi ya te abro—Corto la llamada

Abre la puerta la veo siempre sonriente con esos labios perfectos que me enloquecen, tenía puesto unos jean que marcaban toda su silueta, una musculosa y zapatillas, sencilla pero sumamente atractiva, se pude poner una bolsa de vestido y seguirá estando buena para mi.

—Disculpa no te escuche, creo que debería colocar un timbre—Soltó una risa

—No te preocupes, para eso está el celular a veces

Le entregue una bolsa con tres botellas de buen vino—Para relajarnos como debemos—Reí

— ¡Genial! —Reconoció—Es relajante—Tomo la bolsa

Mariza se acerca y me huele el cuello—Mmm que delicia ese perfume.

Dios santísimo ¿Me estas poniendo a prueba?

—¿Viste? lo amo es exquisito—Sonreí—Pero a ver el tuyo—la tome por la cintura y pose mi nariz sobre su cuello—Que rico tu aroma—Volví a oler—Es delicado, como las flores

—Es perfume del barato —Se ríe — ¿Te gusta? —Pregunto Mariza con una tierna sonrisa

Exhale—Muy lindo

—Fuimos a la cocina, su hermana estaba sentada en la mesa

Tenía un vestido Blanco no me canso de decir que esta chica parece una muñequita.

—Hola Abril ¿cómo estás?— La abrace por atrás y le di un beso en el cachete

—Hola Fabricio.

— ¿Sabes que me encantaría que fuéramos buenos amigos? —Mencione.

—Lo dices enserio—Abril se maravilló.

—Claro que si—Reí— ¿A ti no te gustaría?

— ¡Me encantaría! ¡Me caes súper bien! —Expreso Abril dándome una cálida sonrisa

—y tú a mi mucho más—Apoye mi mano sobre su cabeza despeinándola un poco

—Bueno aquí traje las copas—Comento Mariza y se puso a descorchar una botella.

—Brindemos por nosotros por nuestra amistad, que sea larga y duradera —Exprese

— ¡Por nuestra amistad! —Chocamos las copas.

—Que feo que es el vino —Contesto Abril

Solté una carcajada

— ¿Que quieren comer? ¿Pedimos unas pizzas? —Inquirí

—Sí, me parece bien ¿a ti abril? —Inquirió Mariza

—Me encanta—Comento Abril

—Perfecto ya las pido—Comento Mariza caminando por su celular

—Bueno, ¿cuánto es? —Pregunte sacando mi billetera.

— ¿Cuánto es qué? Yo pago no te hagas problema—Indico Mariza.

—no, ¿cómo crees? déjame pagar

—Hoy pago yo la próxima vez tú ¿te parece? —Sugeri—Por que me imagino que habrá otras veces—Levante una ceja

—um bueno, está bien pero que así sea, claro cenaremos otras veces.

Cuando llego el delivery , le pague y nos sentamos a la mesa ,

— ¿Saben? no tienen una idea de lo a gusto que estoy con ustedes, de compartir un momento así, Mi madre enferma, mi padre que se la pasa viajando, mi hermano que hace lo que quiere, solo somos yo y mi hermana en la mesa a veces, otras con mama somos tres pero general mente como solo o con mi hermana—Rei tristemente—Me siento en familia...Me siento tan bien con ustedes—Exprese.

—A nosotras también nos gusta tu compañía ¿No, abrí? —Inquirió Mariza.

—Por supuesto—Comento Abril.

Después de cenar pusimos música y nos pusimos a bailar

Un montón de ritmos, en algunos era bueno, en otros no tanto

Hasta a Abril la hicimos bailar como loca, estaba tan feliz y con esa mirada tan alegre, veía que pasaba un buen momento

Bailamos un montón de ritmos un poco de bachata, salsa, música tropical, música popular.

Dios me estaba volviendo loco al ver la sensualidad que desprendía esta mujer, Mis pulsaciones deben superar cualquier limite humano.

Nos reímos muchos, hicimos payasadas, tanto así que nos dolía la panza de tanto reírme

Estaba tonteando con abril y sin querer me choque a Mariza y me derramo la cerveza encima

— ¡Ay discúlpame! yo te limpio, lo siento, lo siento

—No, está bien, no es nada.

—Sí, déjame quítate la camisa—Ordeno

— ¿Qué? —Levante una ceja

—Dame tu camisa así la lavo en el lavarropa

—No hace falta...

—Vamos no seas tímido—Solto Mariza

¿Yo tímido? Ja ya que tú lo quieres...si te pones en ese plan tú dices rana y yo salto—Pense para mis adentros

Comencé a desprender los botones de mi camisa los del abdomen

—Está bien, aunque me da vergüenza que me veas—Me hice el tímido

Mariza me miraba a los ojos y yo a ella

—Que lindos abdominales —Me deslizo su mano por mi abdomen—Debes hacer mucho ejercicio para mantener esa tabla.

Trague grueso ¿Por qué eres así dios?

—Si tengo un gimnasio en casa—Confesé—No me gustan los gimnasios públicos es un chismerío bárbaro —Reí—Me agrada mi privacidad.

—Tú no te quedas atrás, tienes un cuerpo hermoso Mariza— le di una vuelta

— ¿Eso crees? —Bajo la mirada—Tengo que admitir que no estoy conforme

—Si—Le di una mirada de arriba bajo—Eres hermosa...

Me le quede viendo un rato—Bueno ten la camisa—Se la entregue.

—Ahora la pongo a lavar—Comento, se giró y camino hacia adentro de la casa.

—Bueno.

Me siente en el sillón, mire hacia todas partes para ver si no estaba ese perro desgraciado

—Listo ahora hay que esperar—Anuncio Mariza.

—Ven siéntate—Di palmaditas en el sillón.

—Dime porque siendo tan perfecta como eres ¿no eres feliz? —Inquirí

— ¿Se me nota? —Pregunto Mariza

—Un poquito—Le guiñe el ojo.

—Porque desde chica me he golpeado con la pared una y otra vez , el engaño de mi padre , la perdida de mi madre , luchar día a día para que no le falte nada a abril , mi ex que casi me mata , no es fácil te aseguro estar en mis zapatos, no es fácil...No sé si confiar en los hombre, siento como miedo, pero a la vez no quiero estar sola.

—Debes animarte una vez más, pero ve despacio sin apurarte—Sugerí

— ¿Tú crees? —Inquirió Mariza

—Si—Asentí.

—Aunque en ti no veo una mirada de completa felicidad —Menciono Mariza.

—Estas en lo cierto, si bien tengo una estabilidad económica, no soy completamente feliz, También me siento solo a veces

—Seguro encontraras a alguien, un hombre que te quiera de verdad—Menciono Mariza

Te quiero a ti ¡Estúpida!

—Sí, seguro ya llegara ese momento

—Me dio sueño me voy a dormir hermana —Comento Abril.

—Un segundo Fabricio ya vuelvo—Menciono Mariza

—Vamos a lavarte esos dientes lindos que tienes —Le hace cosquillas.

Que buena persona que es esta mujer, completamente diferente a toda mujer que he conocido.

Luego de un rato Mariza bajo.

—Ven ¿vamos a mi cuarto? —Tomo unas par de botellas

—Vamos—Lleve las copas

Su cuarto era extremadamente bello .las paredes eran de color rosa, tenía una linda biblioteca, un espejo grande rodeado de luces navideñas, un escritorio, una computadora, una cama grande y muchos ositos de peluche.

—Qué lindo que es tu cuarto, veo que te encantan los ositos—Mencione

—Gracias sí, son tan adorables.

Me senté en el suelo contra el placar, mariza al frente mío, note que miraba mi abdomen—Descorche la botella—Hace mucho que no tomo con alguien

—Me siento halagada entonces

Me recosté sobre la alfombra y la observe—Háblame de ti—Sugerí

— ¿Qué quieres saber? —Pregunto

Tome un sorbo de vino—Todo...—Reí—Veamos ¿Te has enamorado alguna vez?

—No lo sé, creí estarlo, pero fue una mierda—Le dio un buen trago a su copa hasta que se la bajo completa, se sirvió más— ¡Fue un bastardo! El muy infeliz tenía otras encima ¿Sabes lo insignificante que me sentí? —Le dio otro trago a la copa—Una basura me sentí, pensando en que mierda había fallado ¿Cuál era mi problema?

—No tienes ningún problema, él se lo perdió—Reconocí

—Lo odio—Soltó Mariza bebiendo su copa.

Le di un fuerte trago a la mía— ¿Qué buscas en un hombre?

—Que sea simpático, divertido, respetuoso, lindo, que se preocupe por mí, que sepa escuchar, que le guste trabajar—Se encogió de hombros—Lo normal.

— ¿Cuándo descubriste que eras gay? —Pregunto Mariza

Tome valor mandándome una copa entera de vino al organismo.

—Bueno veras...

Mariza

Al día siguiente desperté por el ruido de una ambulancia que paso por la calle a toda prisa, note que tenía algo en mi mano derecha, algo grueso y largo ¿Una palanca?

Abrí los ojos de golpe al ver a Fabricio desnudo en mi cama, mire mi mano y la saque de golpe

— ¡Eh!

¡¿Que paso?! —Me horrorice

Observe su abdomen estaba lleno de chupones y rasguños

¡¿Yo hice eso?! ¡Me va a echar del casino! ¡¿Qué paso?! —Me lleva las manos a la cara

Observe el lugar había botellas en el piso nuestra ropa tirada

Me dolía abajo

—No puede ser...—Levante levemente la sabana observando— ¿Todo eso ingreso en mí?

Fabricio abrió los ojos observándome.

Tape mis pechos con las sabanas— ¡Ah! ¡¿Estas despierto?!

— ¿Qué estas mirando? —Me dio una sonrisa torcida— ¿Soy demasiado guapo para dejar de mirar?

Abrí mi boca como el meme de Picachu.

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