Capítulo 13: No los dejemos escapar

Mariza

Después de hablar con Fabricio decidí volver a trabajar con él.

Al día siguiente entrando en el casino, me topé con Priscila.

Me agarro del brazo—¿Qué piensas qué haces aquí?, después de lo que le hiciste a Fabricio ayer ni pienses que vas a volver a entrar.

—¿Perdón? ¿tu eres la dueña? , no recibo ordenes tuyas solo de Fabricio, vete a hacer tus tareas —la mire con autoridad.

—¿No vas a entrar!—Levantó la voz—¿que fue eso de anoche?, ¿acaso ustedes se entienden? —Espeto

Le di una cachetada—Es mi problema, muévete

—Esto no va a quedar así—Me miró con furia en sus ojos.

—Si claro como digas—Rodé los ojos y segui caminando.

Entre al despacho y me encontré un desayuno preparado, para los dos

—Buen día, pasa, te estaba esperando—Comentó Fabricio.

—¿Usted me quiere hacer engordar, le aclaro que si no me entran los vestidos después usted me va a tener que comprar unos nuevos.—Rei

—Por mí no hay problema con tal que venga a trabajar.

—¿Cómo empezaste el día? —Pregunto Fabricio

—Bien bastante tranquilo dentro de todo, tuve un inconveniente con una empleada hace un momento, pero nada grave.

—Bueno creo que sabrás manejar la situación.

—Si no se preocupe—Mire mi escritorio — no fue nada.

—Mmm el café está delicioso y estas masas, están estupendas.

—Si la cafetería, se esmera demasiado, por eso siempre tenemos lleno ese sector.

—Nunca empiezo a trabajar sin antes desayunar, y tomarme mi café como mucho

—Se da sus mañas,con ese cuerpo debe comer bastante.

—Claramente

—Por cierto, ¿me había dicho que vivía con su hermana?—Inquirió Fabricio.

—Si así es.

—¿Y tus padres?—Pregunto Fabricio

—Es algo difícil de decir, mi padre me abandonó , un día salió con sus papeles como había hecho durante toda la semana para buscar trabajo y no volvió más , Al mes le llamo a mi madre diciendo que tenía otra mujer ,y que no regresaría , que ella sabría cuidar muy bien de nosotros .Mi madre siempre lo amó , desde ese día ella salió a trabajar para darnos lo mejor ,trabajo años de ordenanza en un colegio , hasta que le dio un infarto en un aula , cuando llegó la ambulancia no pudieron hacer nada y así nos quedamos solas , yo trabajaba y estudiaba para poder recibirme , la muerte de mi madre ocurrió cuando termine el secundario.

—¿No tienes más familiares?—Inquirió Fabricio.

—Solo tenemos un tío, al que le ayudaba en su negocio y me ganaba algo de dinero extra mientras buscaba trabajo. Y bueno esa es la historia de cómo nos quedamos solas.

—Es una historia bastante dura, pero lograste alcanzar tu meta, te superaste eso es lo importante.

—Fue todo un sacrificio— Comente.

—Me impresionan bastante.

Nos miramos a los ojos.

En ese momento entra Marcelo.

—Gente tengo buenas noticias , anoche , vi a la mujer del tipo que desbancó la ruleta la vez pasada , precisamente , iba ganando bastante dinero , sin perder ni una sola vez , cuando me acerque a la mesa se puso nervioso el crupier y la señora empezó a perder , y cuando esto paso no jugó más y se retiró ,además iba acompañada del hombre con el que cambio de automóvil la vez pasada.

Y no solo eso ya sé dónde vive esta mujer, cuando se retiraron los seguí y esta vez no falle , casi los tenemos.

—Muy bien Marcelo, déjalos tomar gusto por el dinero, no habrá mejor recompensa que arrebatarles todo—Comentó Fabricio.

—No solo eso hice poner una cámara en otro ángulo y saben que notamos un movimiento extraño al momento en el que el crupier hace girar la bola

—Yo creo que debemos actuar con cautela, veamos que pasa esta noche, pero estemos atentos—Comente

En la noche

—Fabricio traje fotos de las caras de esos dos y del tipo que ganó la ruleta la vez pasada —Dijo Marcelo poniéndolas en mi escritorio.

—Muy bien dámelas así se las mandó a la policía.

—Está todo preparado—Comentó Marcelo.

— Cuando Marcelo de la señal, la policía va a ingresar al establecimiento, estarán en una camioneta a una cuadra de distancia para no despertar sospecha, ustedes actúen tranquilamente como si nada pasara—Explicó Fabricio.

En el momento que los atrapen la policía va a entrar a la casa de la mujer, lo más seguro sea que el tipo este escondido ahí.

—Usted mariza recorrerá las mesas y se encargará de ver que los clientes estén a gusto

—Muy bien entendido—Comente

—Ahora solo nos queda esperar—Dijo Fabricio—Yo estaré en el despacho viendo todo desde arriba, en contacto directo con la policía y con la gente de seguridad.

Todo estaba muy tranquilo, la gente ganaba y perdía dinero, pero los sospechosos no llegaban.

Yo merodeaba de juego en juego, hablaba con los clientes, era cordial y atenta.

—Mira ahí están devuelta ese par, están entrando al casino de la mano. —Me susurra en el oído Marcelo

—El hombre era alto, cabello corto castaño, ojos verdes, con bigote, vestía un traje, gris, camisa blanca, y una corbata azul. Tenía una mirada desconcertante

La mujer era hermosa parecía una modelo, con curvas pronunciadas, vestía un vestido rojo al cuerpo, cabello ondulado, castaño, labios gruesos, y ojos marrones.

No encajaban con la apariencia de criminales, nos desconcertaba bastante.

—No los molestamos, dejemos que ganen tranquilamente —Dijo Fabricio al teléfono

Las personas se empiezan a acumular alrededor era una gran fiesta.

La señora ofrece tragos para todos, está en el punto máximo de confianza.

—Todo al 13 negro— Dijo la dama.

—Muy bien juega— Dijo el crupier.

—Ganador 13 negro.

—Señores no se aceptan más apuestas, la ruleta se declara desbancada.

¡Aplausos para la nueva millonaria! —Grita la gente.

La gente aplaudía como loca y silbaba.

Marcelo da la señal.

Se abre la camioneta, empiezan a bajar los uniformados, con sus armas, entran cinco

El crupier sale corriendo.

Marcelo se tira por arriba de una mesa donde había una pareja cenando y lo sujeta del cuerpo, le da un golpe en la cara, que lo desmaya.

La mujer abre su bolso y saca un revolver y el acompañante, abre su saco y hace lo mismo , abren fuego a los oficiales ,la gente se tira al suelo , salen despavoridos a la calle , un hombre mayor cae al suelo del susto y lo pisan las personas que salían corriendo , rápidamente es ayudado por un oficial y un empleado lo llevan detrás del mostrador.

Un oficial cae al suelo, los dos maleantes empiezan a apuntar a todos, nadie sabe quién va a ser la próxima víctima.

Fabricio

Al salir de la oficina me detiene Priscila.

—No , es peligroso, hay gente lastimada te puede pasar algo.

—Tengo que estar presente.

—Si te pasa algo no sé lo que haría

—Basta, suéltame.

La mujer toma de rehén a Mariza, le pone un arma en la cabeza, y el otro malhechor toma a una anciana.

La gente empieza a abrir el paso, los oficiales retroceden, con el fin de salvar la vida de las personas .una vez en la calle un auto frena en el medio de la calle, los rehenes y los malhechores entran en el auto , y salen disparando a todos.

— Oh no dios mio

—Vámonos, sigamos a los oficiales

—Está bien señor.

Un oficial avisa por el radio,

—Tomaron la avenida Morrison van a toda velocidad, tienen dos rehenes, necesito apoyo cierren la avenida

—Entendido, ya mismo salen patrullas.

—¡Necesitamos dos ambulancias con urgencia, oficial herido, disparó en el muslo izquierdo!

¡Hombre de edad avanzada, con aparente fractura en un brazo y pierna!—Espeto el oficial.

Vamos muchachos, las patrullas están a la vuelta , Si nos apuramos los alcanzamos, pongamos la sirena—Explico el oficial.

Iban a toda velocidad

Mariza

—Por favor no me maten

—¡Cállate! tú nos vas a servir si salen las cosas mal, así que coopera

—Nos están alcanzando dice la mujer, date prisa

—¡Voy lo más rápido que puedo!

—Maldita sea nos cerraron el paso

—¡Frena!

El auto derrapa, se bajan rápidamente, apuntandonos

—¡No pueden ir a ninguna parte tienen todos los caminos rodeados!

Usan de escudo a los rehenes, los policías lo estaban presionando.

Un grupo de oficiales, los rodean por detrás

Y los reducen

—¡Al suelo o disparo!

—¡Manos atrás todos!

Son esposados

Un alivio sentí en el cuerpo cuando me dejaron libre que no hay forma de describirlo

—Quedan detenidos por el delito de estafa e intento de secuestro. —Dijo un oficial —Van a pasar una larga temporada tras las rejas.—Dijo Un oficial a los delincuentes.

Fabricio

Al llegar al lugar vemos que los delincuentes estaban esposados, y mariza y la señora estaban bien, hablaban con un oficial le estaban tomando declaración de lo sucedido.

Me baje del auto corriendo, no pude hacer otra cosa más que envolverla en un abrazo,

—Gracias a dios estas bien.

—Tenia mucho miedo — Dijo Mariza —Se larga a llorar

—Me preocupe muchísimo, Gracias dios ,ven te llevo a casa, sube al auto ,fuiste muy valiente

—Solo pensaba en mi hermana, si la dejaba sola, que sería de ella.

—¿Le vas a contar a tu hermana?, yo te recomendaría que no, para ya sabes, no preocuparla y hacerla sentir mal.

—Ya lo había pensado y no pienso contarle.

—No pienses en nada malo, solo en cosas buenas—Sugeri

—Muchas gracias por acompañarme—Tomo mi mano— Es una gran persona Fabricio.

—Cada día me sorprende más Mariza —La salude con un beso en la mejilla.

—¿La veo mañana?—Inquiri.

—claro que sí.