FEROMONAS DE VENGANZA (EL OMEGA DE LA MAFIA)

El Omega no vaciló en responder, por un momento se preocupó, pero dado que conocía la historia de esa gema, pensaba que el alfa solo estaba hablando metafóricamente. Era completamente imposible que Linus supiera de lo que realmente le pasó.

—sé que era muy importante para Lewis, lo consideraba su tesoro más grande en el mundo, estaba convencido que si lo mantenía con él podía encontrar a su familia, también sé que vale muchísimo, en más de una ocasión intentaron robarlo, o que él lo vendiera, gracias a la señora Rafaella, sé que es tradición en su familia que los miembros mayores obtengan una al nacer, también, se que le llaman la piedra de la vida o del regreso, creen que si la persona la lleva hasta el momento de su muerte podrá regresar y encontrase con las personas que amaba en otra vida.

—mi madre cree eso último.

—tu no, según veo.

—no sé si llevarla te hará reencontrarte con las personas que amas en otra vida... pero si sé que te permite regresar, también sé que tú lo has experimentado.

—(él sabe eso también?, ¿desde cuándo?) no sé de que estás hablando, mirándote no pareces un hombre que crea en cuentos de hadas, que inesperado. —aunque se veía serio y convincente, Kelsey estaba algo preocupado.

—hay una parte de la historia que no te conté.

—¿eres un duende mágico, o puedes transformarte en un dragón? —ese sarcasmo solo era para irritar al alfa y poder terminar ese tema ahí, pero no funcionaba.

—está bien si usas esa actitud para despistar, pero ya te lo dije, lo sé todo.

—¿que sabes?

—absolutamente todo Kelsey.

—(eso es imposible). —sabiendo que tenía la atención del Omega el alfa se sentó.

—no tienes que preocuparte, tampoco tienes que contarmelo todo ahora sino quieres, soloescucha con atención... cuando tuvimos el accidente hace 15 años, estoy seguro de que morí en la exploración, pero regresé unos momentos antes y pude sacarnos a Lewis y a mi del auto, por eso estaba más seguro que nadie de que mi hermano no murió.

—(yo sospechaba que mi regreso podía deberse a esta piedra, pero me resultaba un poco confuso lo que acabo de oír, incluso si yo lo viví, resulta que fue Lewis quien nos dio otra oportunidad). —Linus seguía narrando y Kelsey oía atento.

—Una vez que la gema es usada su color se torna lila, la tuya tiene ese color, si pudiste usarla, significa que mi hermano nunca necesitó su poder antes. Solo puede ser usada una vez.

—significa que si Lewis hubiera tenido esto cuando lo atacaron, habría podido salvarse... E...es mi culpa que no esté aquí...

—no es tu culpa, quizás tener el objeto le hubiera permitido regresar, pero entregarla fue su decisión.

—él no sabía lo que podía hacer.

—¿crees que si lo hubiera sabido no te la habría dado?, si tienes la certeza de que él no te la entregaría si supiera de su poder entonces puedes culparte y sentirte miserable, pero el Lewis que yo conozco se puso delante de mí para evitar que un perro me mordiera incluso si les tenía pavor.

—el era más amable que nadie.

—siempre fue así, y creo que, hubiera hecho mucho más por ti. ¿lo sabes verdad?

—lo sé, es solo que lo extraño tanto, y ahora que sé esto... —Linus lo abrazó.

—si te lo dije, es para que sepas que puedes contarme todo, contar conmigo para todo, no tienes que pasar por todo esto solo. —Kelsey se alejó.

—gracias, pero...

—está bien, seguiré cumpliendo mi palabra, descuida, lo que acabo de decirte no lo sabe nadie, ni siquiera mi madre, para ella esa gema es una tradición, un cuento bonito para darle más valor a la gema. No tienes que sentirte culpable, vive esta vida como mejor te parezca.

—eso haré gracias! —el alfa se fue, y Kelsey, se quedó mirando la información de esas personas, dos semanas después el médico le levantó las restricciones, y 3 días después fue su presentación como parte de la familia Gold, aunque no invitaron a nadie de los medios por petición de Kelsey, y tampoco anunciaron que era el esposo omega de Lewis, aunque muchos tuvieron preguntas para sus condiciones, nadie volvió a preguntar nada cuando Linus los frenó y ordenó que se cumpliera todo al pie de la letra.

En la fiesta todos llevaban muchos regalos, para el miembro desconocido de los Gold que volvía de un largo viaje en el extranjero. Muchos solo iban buscando una oportunidad, por lo que podían ver esta persona tenía el favor y el apoyo de todos en la familia, así que ganárselo sería una buena forma de asegurar buenas relaciones futuras.

Sus planes no iban muy bien, jamás estaba solo, casi todo el tiempo Linus estaba con él, y cuando no, dos o 3 miembros más de la familia. Parecía que era cuidado más que nadie, eso molestaba a los buitres que buscaban sacar beneficios de esa persona.

—¿estás bien? —Linus había sujetado a Kelsey mientras este frotaba su cien con molestia, y había dado un tras pie.

—si, solo me mareé un poco, empieza a volverse más fuerte un olor desagradable que percibí antes, es demasiado molesto.

—es algo de la comida, alguien en la fiesta?, ¿puedes decirme cómo es el olor?

—es...

—amor... —la despampanante castaña salió de la nada y se colgó del cuello de Linus besándolo frente a todos, Kelsey se apresuró en alejarse de ahí, el alfa apartó rápidamente a la mujer y fue tras él. Lo encontró en el baño devolviendo.

—Kelsey, ¿estás bien?, te traigo algo.

—aléjate!, traes ese olor y es demasiado desagradable...

—lo que te estaba causando tanto malestar es el perfume de Ivette? —viendo que el omega devolvía más que antes, decidió salir y cambiarse.

—¿te sientes mejor?

—no, siento que todo mi estómago se quedó allá. Muero de hambre.

—vamos para que comas algo. Lo que sobra es comida en esta fiesta.

—será mejor que te mantengas lejos, no quiero que la mujer con el perfume de zorrillo se me acerque.

—descuida, ya pedí que la sacaran.

—¿la echaste?, ¿no era tu novia?

—solo salimos algunas veces, además es tu fiesta y ella no está invitada.

—vale, gracias, (no parece que esa mujer le importe mucho, al parecer mi cuñado es de esos que solo juega por ahí, bueno no es mi asunto)... Quiero de eso, se ven deliciosos. —Linus lo acompañó a la mesa, sostenía el plato mientras Kelsey ponía todo lo que quería comer en él.

Los invitados veían la escena con bastante incredulidad. No es la imagen que esperas ver del imponente hombre de negocios Linus Gold. Los miembros de la familia que ya estaban acostumbrados a verlo hacer cosas más extrañas por Kelsey solo sonreían, porque aunque ninguno se atreviera a decir nada, ellos sabían que Linus cocinaba para el omega en las noches e incluso tarde en la madrugada. Algunos se sentaron a hacerle compañía en la mesa mientras comía.