Silvana es obligada a casarse con Carlos sin saber qué él es el padre biológico de sus dos hijos. Silvana se enamora de él, y lucha por sus dos hijos.
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Algo inesperado
Dos semanas después, Silvana logró recuperarse por completo de todo lo que su abuelo le había hecho.
Era tiempo de que se mudara a la mansión de su esposo. Durante esas dos semanas, Carlos no había podido ir a verla, el trabajo en la empresa se había acumulado enormemente.
También durante ese tiempo, Marcos le enseño como debía vestirse de ahora en adelante.
Como debía hablar, y cuáles serían sus obligaciones mientras estuviera casada con Carlos.
Silvana escogió un conjunto de ropa negra. Ató su cabello por completo, y puso un maquillaje que resaltara sus facciones.
Esteban, a primera hora de la mañana, arregló todas las maletas de la chica y las subió a la cajuela del auto, tal y como lo había dejado ordenado Marcos.
_______ Es una lástima irme de este paraíso. Fernando y Diana hubieran sido tan felices en este lugar. _____ Pensó Silvana con tristeza.
Esteban abrió la puerta del auto, ayudando a la esposa de Carlos a entrar. Silvana se mantuvo callada hasta llegar a la mansión de su esposo. Se quedó con la boca abierta al ver lo impactante que era esa mansión.
Nunca en toda su vida había visto una mansión tan grande e imponente. Era hermosa, lujosa, y sobre todo enorme.
______ Bienvenida a su nuevo hogar, señora Armendáriz... _____ El chofer bajó del auto y abrió la puerta trasera.
Silvana todavía no salía de su asombro. Miraba a todas partes, sin poder creer en donde estaba. Marcos, al ver al auto estacionarse en la entrada, de inmediato fue a recibir a Silvana.
_____ Deja de mirar así. Todos se van a dar cuenta de que no has visto una mansión como esta. Vete acostumbrando a vivir como una reina, y a dar órdenes como la señora Armendáriz que eres. _____ Dijo Marcos.
Silvana miró a Marcos confundida. No sabía exactamente qué es lo que haría en esa enorme mansión. Aunque el hombre le había explicado un poco cómo serían las cosas, sería muy difícil para ella llevar el manejo de toda esa casa.
_____ Esteban sube las maletas de la señora a la habitación principal. Ella debe ir a ver a su esposo a la empresa Armendáriz. ____ Ordenó Marcos, volviendo abrir la puerta del auto.
Silvana volvió a subir al auto. Marcos no le dio tiempo de reaccionar, y mucho menos de decir ni una sola palabra.
______ Que sea la primera y la última vez que me tratas de esta manera. No soy una objeto, al cual puedes traes y llevas de un lado para otro.
Marcos miró a Silvana a través del espejo del auto, una sonrisa apareció en sus labios. Sin duda sería un fuerte dolor de cabeza para Tania.
______ Ahora eres un objeto más del señor Armendáriz. No se te olvide qué él te compró. ______ Contestó Marcos con seriedad.
______ Soy su esposa, no un objeto. Aunque me haya comprado, llevó su apellido. Tú eres quien debería cuidar la manera en que me hablas.
La sonrisa se borró de los labios de Silvana. La chica parecía haberse convertido en otra mujer, luego de despertar.
_______ El señor Monte mayor ha recuperado todas sus empresas, gracias a ti. Has hecho un gran trabajo ______ Marcos cambió de tema, esperando ver la reacción de la chica.
Silvana apretó sus dientes. Mil veces hubiera preferido que él y Lorena durmiera en la calle. Sin embargo, le tenía que agradecer haberla vendido.
De lo contrario, jamás hubiera podido escapar del infierno en el que estaba, y lo más importante, nunca hubiera podido sacar a sus hijos de ahí.
______ No me interesa saber nada de ese hombre, ni de mi hermana... ______ Contestó, la chica con frialdad.
Marcos no dijo nada. Había intentado investigar todo lo que había pasado en la familia Monte mayor.
Sin embargo, cada vez que pensaba estar cerca de algo importante, todo desaparecía como arte de magia. Era muy extraño todo lo que pasaba en el seno de esa familia.
Al llegar a la empresa de Carlos. Silvana no esperó a que Marcos le abriera la puerta. Ella misma baja del auto y entró al vestíbulo de la empresa.
Marcos dio un profundo suspiro de impotencia. Silvana era una chica demasiado rebelde.
No le gustaba acatar órdenes de nadie, y lo peor de todo era que siempre le llevaba la contraria.
Silvana se acercó a la recepcionista, con una sonrisa entre sus labios. Ella misma quería ir a hablar con Carlos, sin que Marcos ni nadie interfiera.
______ Buen día.
______ ¿Me puedes decir cuál es la oficina del CEO?
La chica miró de arriba abajo a Silvana. Tenía la apariencia de una mujer de clase. No obstante, nadie podría hablar con Carlos, sin tener una cita previa.
_______ ¿Tienes una cita? De otra manera no puedo darte esa información.
Marcos entró al vestíbulo, después de haber estacionado el auto. Se acercó a Silvana antes de que diga algo más.
_____ Ven conmigo. _____ Marcos señaló el ascensor.
Silvana se dio la media vuelta y siguió a Marcos hasta subir al elevador. Al llegar al pasillo dónde quedaba la oficina de Carlos, Marcos detuvo a Silvana...
______ Esta vez, no seas impulsiva. Antes de hacer cualquier cosa, iré yo primero. ¿Entiendes?
Silvana levantó un poco los hombros. Vio a Marcos alejarse de ella, y caminar hasta donde estaba la secretaria de Carlos. Ambos intercambiaron algunas palabras.
Marcos parecía estar nervioso, ya que volteaba constantemente hacia Silvana. Al interior de la oficina se encontraba, Carlos con Catalina.
A primera hora de la mañana, Catalina fue a ver a Carlos. Dejó caer la gabardina que llevaba puesta, dejando su hermoso cuerpo a la vista de Carlos.
________ Dime que no me deseas más...
Carlos, que se encontraba sentado al otro extremo del escritorio, miró el cuerpo desnudo, de la mujer con la que compartió tantas noches, llenas de pasión.
El hombre no mostró ni un poco de emoción. Cada una de las letras escritas en el mensaje que leyó aquella noche, jamás se han borrado de su mente.
Carlos levantó el teléfono, y estaba a punto de llamar a los guardias. Catalina se apresuró y corrió al otro extremo del escritorio, enredando sus manos en el cuello de Carlos...
_______ No me hagas esto, por favor. _____ Catalina, besó los labios de Carlos. Sin darle la oportunidad de rechazarla.
En ese momento, Silvana abrió la puerta de la oficina, y entró. Mirando a su supuesto esposo, besar a otra mujer...