Siempre Te Amaré

Liam me invitó a caminar al parque, como le decía que no al jefe, así que me fui a cambiar, salí y Liam no dejaba de mirarme, al salir me llevo al parque del frente, era bastante grande así que caminamos un rato, en el camino comimos comida callejera no pensé que alguien como él se atreviera siquiera a probar algo así, nos sentamos en una banca y yo miraba a los niños jugar, yo y mi bocotá le pregunto que si él quisiera tener hijos y su respuesta me rompió el corazón, él ya tenía a la elegida para ser su esposa, no entendí por qué me sentí como si me hubiera atropellado un carro, sentí un gran dolor en mi alma, así que le dije que mejor volviéramos al edificio, él se negó y me llevo a un jardín, era la cosa más bella que había visto se parecía mucho a mi pueblo y ahí voy otra vez a deprimirme y es que extrañaba mucho a mi mamá, Liam me preguntó por ella así que le conté mis planes y este me dio el mejor regalo de todos, permitió que mi mamá viviera en su departamento, estaba tan feliz que lo abracé, cuando me di cuenta de lo que hacía me separé y le pedí disculpas lo que nunca espere fue que me diera un beso, este era mi primer beso, y si soy sincera fue mucho mejor de lo que alguna vez imaginé, sentí un millón de mariposas en mi estómago, sentí el tiempo detenerse como pude le correspondí el beso, ya que no tenía ni idea que hacer, nos separamos y fuimos al apartamento ahí me dio dos besos más y se fue, yo sabía que él era bipolar así que no me sorprendió que se fuera así.

Llame inmediatamente a mis amigas tenía que contarle lo que estaba pasando.

Irene: amiga hasta que te acuerdas de nosotras.

Emma: no exageres las llamé en la mañana.

Maria: claro como ahora paso todo el día con el bombón psicópata entonces no tengo tiempo para ustedes.

Las tres nos echamos a reír.

Emma: hablando en serio tengo algo que contarles.

Maria: habla ya niña estamos ansiosas por saber.

Emma: Liam me besó

¿QUEEEEE?

Casi me dejan sorda creo que sus gritos se escucharon en todo el edificio.

Irene: cuenta como estuvo eso, no lo puedo creer nuestra niña está creciendo.

Emma: no soy su hija ya dejen de pensar así.

Maria: ya termina de contar.

Les conté todo lo que había pasado y lo que estaba sintiendo y estás estaban más emocionadas que yo, ellas siempre tan lindas.

Irene: hija mía te hablo como tu madre, eso que estás sintiendo es amor.

Maria: así es querida hija y si él quiere algo serio contigo será mejor que hable con nosotras primero no crea el que estás sola.

Seguimos riendo ella siempre sabía cómo sacarme una sonrisa y sin ellas mi vida hubiera sido un infierno.

Emma: solo me preocupa algo, creo que es bipolar, porque después de besarme solo sé fue, sin más.

Maria: jajaja mi querida amiga ya deja de ser tan inocente, él se fue así porque estaba prendido y obviamente no quería pasar a segunda y tercera base tan rápido.

Irene: es todo un caballero, amiga te sacaste la lotería.

Emma: soy tan estúpida, y yo pensando que era por su bipolaridad.

Maria: mi querida Emma tendremos que explicarte algunas cosas de las abejas.

Irene y María seguían riendo y es que si no sé muchas cosas, pero no quiere decir que sea una ignorante en toda la materia.

Hablamos de mi mamá y que pronto estará aquí conmigo y así estuvimos como tres horas hablando hasta que el sueño nos ganó.

Colgamos la llamada y a mi mente llegó la pregunta, será que lo amo? Es muy pronto para saber eso es mejor dejar que el agua siga corriendo.

Me quedé dormida pensando en esos besos y aún sentía esas mariposas en mi estómago. Llegó el siguiente día, era domingo y Liam me envió un mensaje diciendo que si quería pasar el día con él, solo viendo películas, no le vi nada de malo así que acepte.

Me levanté para hacer mi desayuno leer algunas noticias y salir a ver a Liam.

Alguien llamo a la puerta y fui a abrir y ahí estaba Liam con ropa de casa y una cantidad de cosas para pasar el día.

Liam: buenos días, cariño, huele bien, que haces?

Emma: buenos días, solo preparo el desayuno, gustas?

Liam: si por favor nana no me dejo comer nada solo un pan con café.

No le creo nada seguro se escapó antes de que estuviera el desayuno.

Emma: bueno siéntate mientras que sirvo la comida.

Liam: gracias cariño.

Esa manera de llamarme me está gustando, pero él y yo no somos nada, bueno por lo menos espero que me pida ser su novia.

Lleve el desayuno a la mesa y Liam parecía un niño esperando con ansias comer.

Emma: espero y te gusté la comida. No tengo mucho aquí así que prepare lo que pude.

Liam: si quieres ahora salimos a comprar algunas cosas, si me vas a estar cocinando al menos puedo colaborar con algo.

Emma: señor Miller soy su asistente no su cocinera personal.

Liam: si fuera por mí hasta mi esposa serías ya.

No supe que contestarle ni siquiera me había pedido ser su novia y ya se quiere casar conmigo.