Te Elijo A Ti

Irene: Oh está delicioso - digo apretando mis mejillas, veo como mi esposo se rie así que le devuelvo la sonrisa - ¿No vas a comer?

Diego: Estoy lleno con solo verte comer - yo asiento y continuo comiendo - Hoy salí al pueblo y escuché que tu familia le hará una fiesta a tu hermana - yo sigo comiendo tranquilamente - ¿no fuiste invitada? - niego - Si deseas ir pued...

Irene: oye - lo interrumpo - es mi hora del postre ¿por qué deseas arruinar mi tarde hablando de esas personas?

Diego: ¿No te molesta? - yo dejo la cuchara de un lado y lo veo

Irene: ¿esposo me veo algo molesta o preocupada por no haber sido invitada a esa estúpida fiesta? - él niega - exacto aún si me hubieran invitado no iría. No tengo interés en ver cómo van a verme de pies a cabeza buscando cualquier falla de mi oh - tomo un poco más de sirope de chocolate y lo coloco en mis fresas - Delicioso

Diego: jajaja ¿no estás comiendo mucho estos días? - yo lo veo con una ceja alzada

Irene: ¿Me estás llamando glotona?

Diego: jajaja ¿no como me atreveria? -

Irene: y no estoy comiendo mucho solo lo suficiente - digo muy tranquila, veo como pasa un pañuelo por mis labios

Diego: está bien esposa, come tranquilamente

Julián: Marqués tiene visita - Diego se levanta y sigue a su capitán y yo me quedo aún en mi lugar comiendo

Irene: Marian quien es?

Marian: Es el conde de las tierras del sur el que ha venido - yo asiento y continuo comiendo ya que no es alguien con demasiado interés para mí - Señora estos días se le ve más rellenita

Irene: también crees que estoy comiendo mucho? - ella asiente - Pero es que estos días he estado trabajando muy duro y eso me deja sin energía

Marian: tiene razón señora, además a el marqués le encanta verla comer - yo sonrió feliz y continuo

X: Marquesa - veo a una chica joven delante de mi, así que me levanto y hago una pequeña reverencia

Irene: Si la marquesa Irene de Kennedy ¿con quién tengo el gusto?

X: O no debe de ser tan formal pronto seremos familia - yo veo a Marian sin entender y está también lo hace evidentemente sin saber de lo que habla la tipeja está - Soy la señorita Sofía Mondragón pronto la concubina del marqués Kennedy - yo me río mientras veo a la mujer haciendo una reverencia

Irene: ah, que bueno querida bienvenida a la familia - digo con una enorme sonrisa - Marian ve y prepara un lugar especial para la señorita - digo mirando a Marian ella entiende mi punto y se va corriendo

Sofia: ¿no le molesta que el marqués tenga concubina? - yo niego para volver a sentar

Irene: Por supuesto que no, no ves que te doy la bienvenida con una gran sonrisa - suspiro - espero que se pueda adaptar bien a este lugar

Sofia: Bien - dice con una sonrisa igual que la mia (que estúpida en verdad creyó que la dejaré casarse con mi esposo? Es mío y quitaré a cualquier z*rra del camino)

Irene: ¿Desea té?

Diego: Irene - veo como viene mi esposo apurado y más atrás un hombre mayor - ¿Que te dijo esa mujer? - me pregunta en cuánto llega donde estoy

Sofia: no he dicho nada de otro mundo solo la verdad, pronto seré tu concubina - Diego la ve molesto

Diego: No digas estupideces a mi esposa, yo no deseo una concubina

X: Marqués esto ya fue algo decidido por sus padres, no puede cambiar de opinión

Diego: No me casare - yo lo callo

Irene: tranquilo cariño yo no tengo ningún problema con eso - digo viendo a las dos personas presentes - ya le mandé a preparar una habitación a la señorita, no se si el señor se va a quedar también - él hombre sonríe ampliamente

X: Es una señora muy condescendiente menos mal que entiende está situación - yo sonrió

Irene: por supuesto que lo hago, mi esposo ya vamos para un año de casados y aún no hemos visto herederos, yo solo pienso que es lo mejor para esta familia - en eso Marian regresa - mi doncella los guiará a sus habitaciones espero que estén cómodos el tiempo que estén aquí y espero que puedan salir vivos los dos - digo con una gran sonrisa mientras los veo como se alejan

Diego: ¿En qué estás pensando? - yo lo veo como mis ojitos de cachorro

Irene: ¿De que hablas esposo? - lo jalo y lo siento en la mesa - he perdido un poco el apetito, pero si mi esposo me acompaña estaré mejor - digo poniendo mi cabeza en su hombro, él saca un abanico y comienza a echarme brisa

Diego: lo lamento esto tuve que haber sido una situación verdaderamente incomoda para ti - yo levanto mi rostro para verlo

Irene: por supuesto que no, tú no tienes la culpa - me levanto y siento en sus piernas - Estos días me has demostrado que solo yo te importo - el acaricia mi mejilla

Diego: eres mi esposa, como no serás importante para mí

Irene: entonces me dejas que yo me encargue de esas personas? - él sonríe y deja un beso en mis labios

Diego: Siempre apoyaré a mi esposa en todo lo que haga - yo lo beso mientras sonrio. Ahora que tengo luz verde esas personas no duraran ni un mes en este lugar, mi primer plan es hacer que ellos salgan por su propio pie, pero si eso no sirve de nada tendré que sacarlos por las malas y es una pena enorme porque ella están joven y está apenas empezando su vida

Los primeros días fueron tratados como los señores de la casa, cuando el conde al fin se fue empezó el infierno de la señorita Mondragón, Diego veía a otro lado y yo solo disfrutaba sus gritos al escuchar como encontraba serpientes, cucarachas, alacranes o cualquier tipo de bichos cuando iba a dormir

Sofia: Marquesa ya se está pasando con esta situación - yo me la quedo mirando - En verdad pensé que podíamos llevar la fiesta en paz, Pero ahora yo también luchare contra usted - Yo estaba al pie de las escaleras subo dos escalones y le hago frente

Irene: ¿A qué te refieres? - digo dulcemente

Sofia: Sobre las cosas que coloca en mi cama cuando voy a dormir

Irene: no se de que hablas - digo empujando la mano con la cual me señalaba ella la mueve rápidamente y me tiró hacia atrás cayendo por esos dos escalones, pero haciendo tanto ruido como si me hubiera caído por todas las escaleras (hoy te vas de esta casa) digo al ver cómo todos llegan a dónde estoy al igual que Diego y Julián