Hector Lozano, el arquitecto detrás del deslumbrante diseño del hotel turístico, la noche de su inauguración, conoce a la alegre y singular Maria Isabella Flores, quien lo cautiva con su belleza exótica y su aura misteriosa, aparentando una gitana perdida en ese mundo de lujos. Fascinado Hernan se aproximó a ella para conocerla y sin predecirlo pasa la noche más apasionante como nunca tuvo en su vida. Al día siguiente, cuando el alcohol bajo, descubrió que esa gitana es la hija menor del dueño del hotel que el diseño. Ambos al saber quienes son, tratarán de llevar la situación como dos adultos, olvidar lo que pasó y culpar al alcohol por ello, pero la química que existe entre ambos los lleva a recaer mas de una vez en la tentación de estar juntos. Al enterarse el padre de María Isabella que estuvo con Hernán Lezcano, los obligará a casarse para salvar el honor de su hija. Ambos deberán enfrentar una situación que solo inicio como una aventura de una noche y afrontar las consecuencias
NovelToon tiene autorización de Lily Benitez para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
8- Discusiones y otros condimentos
Narra Isa
Llamo mi padre a la puerta, vi que Héctor se le salían los ojos del susto, se puso pálido. Le di un beso, para calmarlo, le indique el balcón.
-Tranquilo... Ten mi llave... Sal al balcón... Sacaré a mi padre y luego sales. Le susurro poniéndome una bata.
Él asintió tragando grueso, acomodo sus prendas, en mi lugar me puse una bata para disimular que me preparaba para dormir.
Me fijé que él salga al balcón.
-ISA. Insiste mi padre.
Suspiré hondo y abrí la puerta.
-Si padre ... Estaba por dormir. Le anuncie.
-Ya veo... Pero no quiero que te pierdas los juegos artificiales. Me dice.
-Hay juegos artificiales. Le digo.
-Asi es... Ven. Me dice.
Me ate más fijo mi bata.
-Vas a ir así. Me dice.
-Que tiene... Parece un vestido. Le digo.
-Te espero... Ponte algo. Me dice.
-Esta bien. Le digo y busco un vestido facil de ponerme.
Abro el Placard y me lo coloco atrás de la puerta para que mi padre no vea mi desnudes.
Salgo luciéndolo, él me sonríe ofreciendo su brazo.
-Sentí un fuerte aroma a perfume. Me dice.
-Se me cayó y rompió mi perfume. Le comenté, enseñando mi dedo cortado.
-Ya veo... ¿Por qué no pediste que te curen?. Me preguntó
-Solo fue un pequeño corte. Le comenté.
Salimos del cuarto dirigiéndonos para ver los juegos artificiales.
-Ya estás cambiada. Me dice Cris al verme sin el vestido elegante.
-Estaba por dormir. Le dije.
-Tan temprano. Me dice.
-Estaba cansada. Le respondí.
-Me encantan los juegos artificiales. Admira Cris.
Vemos que en el cielo nublado estallan en miles de estrellas de colores y forman un corazón.
-Eso da gusto ver. Admira Sergio.
-Te gusta también... A mí siempre desde pequeña. Le responde Cris.
-Es un espectáculo digno de ver... Quedé maravillado cuando fui a Orlando. Le contó Sergio.
-En serio... Yo fui al de París. Le comenta Cris.
Suspiré admirando los juegos artificiales y veo a Jhon que se me aproxima.
-¿Cómo estás?. Le pregunto.
-Discúlpame que no pude estar para la cena. Me dice.
-Lo que importa que estés bien... Si necesitas algo solo dilo. Le sugiero.
-Eres muy amable... Pero la inyección que me dió el doctor me mejoro. Me dice.
-Me alegro... Al menos estás bien. Le respondo.
-ISA... PUEDO HABLAR CONTIGO. Me llama Anto con educación pero su tono me dice otra cosa.
-Si Anto... ¿Qué sucede?. Le pregunto.
-Acompáñame. Me pidio apartandome a un salón.
-Si... Tu dirás. Le digo.
Veo que camina de un lado a otro malhumorada.
-Quiero que me expliques qué significan estos mensajes. Me dice enseñándome el celular de Daniel.
-Fue hace tiempo. Le dije tranquila.
-Como puedes llevarlo tan tranquila. Me dice.
-No tuve nada con él... Salvó esos mensajes. Le dije.
-Asi que... Nada más fueron mensajes. Me dice.
-Asi es. Le digo.
-ENTONCES... ME DICES... QUE MI PROMETIDO... TE ENVIA FOTOS... TAN... QUE NO PUEDO NI DECIR... Y NO SIGNIFICA NADA PARA TI. Eleva la voz.
-Que querés que diga... Él te eligió. Le respondí.
-DEJA DE ATOSIGAR A MI PROMETIDO... O CREES QUE NO ME ENTERE QUE LE ANDAS POR ATRAS. Grita.
-No es así. Le respondí.
-Me dijeron que le vieron salir de dónde te estabas cambiando... Cuando se lo reclame... Respondió que le llamaste al verlo pasar para que te ayude con el corset. Me dice.
-Ja. Me rio irónica
-ESCUCHAME BIEN ISA... ESE HOMBRE ES MIO... SOLO MIO... NO QUIERO A NADIE MAS... Y NO PERMITIRÉ QUE TE INTERPONGAS... SOLO LO QUIERO A ÉL Y NADIE MAS QUE A ÉL... POR FIN MI ESFUERZO DARA SUS FRUTOS... Y NADIE, NI NADA DEJARE QUE SE INTERPONGA. Dice eufórica sacada.
-Es lo correcto. Le respondo.
-DEJA DE ACTUAR CONDESCENDIENTE Y COMPLACIENTE... ME DESESPERA... ODIO TU BUENA ACTITUD Y PROCEDER... A MI NO ME ENGAÑAS... SOLO ACTUAS PARA SALIRTE CON LA TUYA... PERO TEN ALGO EN CLARO... CUANDO QUIERO ALGO LO CONSIGO SIN IMPORTARME A QUIEN DEBO PISAR PARA HACERLO. Grita histérica.
- Vas a tener pasta para los negocios. Le digo.
Estrella su mano contra mi cara tirandome al piso.
-ESE HOMBRE ES MIO, SOLO MIO, LO QUIERO SOLO A ÉL. Me grita.
Me incorporo suspirando pesado.
-Actuas como cuando éramos pequeñas... Papá te compraba una muñeca y la deshechabas porque no era la que querías... Cuando yo la tomaba... Ahí pataleabas reclamando que era tuya y la querías de regreso. Le digo.
-¿A QUÉ VIENE ESO?... NO TIENE NADA QUE VER CON EL TEMA QUE NOS COMPETE. Grita.
-Esta muy claro... Siempre envidias lo que tengo... Y haces pataletas para quitarmelo... Pero ahora no se trata de un juguete ... Si no de una persona... Y debes ser más razonable ... No jugar con las personas... No es solo jugar con ella hasta que te aburras y lo deseches... Cómo hacías con tus juguetes. Le digo sería.
-¿QUIÉN TE CREES PARA DECIRME CÓMO VIVIR MI VIDA?... TU QUE ERES UNA ADOPTADA... UNA HIJA BASTARDA DE UNA GITANA... DE UNA AVENTURA QUE TUVO NUESTRO PADRE... QUE TU MADRE NI TE QUISO... Y TE DEJO EN LA RECEPCIÓN DEL HOTEL DE PAPÁ... QUE TE CRIARON POR LÁSTIMA... SOLO ESO... O PORQUE CREES QUE NO NOS PARECEMOS. Me dice con desprecio.
-¡¡¡MARIA ANTONIETA!!!... ¡NO TIENES NINGUN DERECHO A HABLARLE ASI A MARIA ISABELLA!... ES MI HIJA... Y TIENE LOS MISMOS DERECHOS QUE TU Y MARIA CRISTINA... Y NO PERMITIRÉ QUE MANCHES LA MEMORIA DE VUESTRA MADRE DE ESE MODO... JAMAS LA HE ENGAÑADO... NO PUEDES INVENTAR SEMEJANTE MENTIRA CON LA INTENCIÓN DE HERIR A ISA. La reprendió mi padre enérgico, al aparecer por sorpresa, haciendo que temblará al sorprenderle que le hable así.
-TU JAMAS ME QUISISTE... NO IMPORTA CUANTO ME ESFUERCE... SIEMPRE ESTAS MAS ATENTO A ISA... SIEMPRE ES ELLA... Y A MI NUNCA ME FICHAS. Le grita Anto entre lágrimas.
-¿QUÉ RECLAMAS?... QUE TE VOY A CELEBRAR TU BODA CON DANIEL... QUE TODO LOS PREPARATIVOS FUERON SEGUN TUS PETICIONES... QUE GASTO UN DINERAL POR TI... QUE INVERTI EN TU EDUCACIÓN... QUE ME HE ROTO EL ALMA PARA QUE JAMAS NOTARAS LAS EPOCAS DE RACHA MALA. Le reprocha mi padre enojado, sin dejarse convencer por sus lágrimas.
-YO...
Gimotea nerviosa sin saber que decir.
-SERA MEJOR QUE TE RETIRES DE MI VISTA... ANTES QUE CANCELE TODO... PORQUE SABES QUE LO PUEDO HACER. Le dice mi padre molesto.
A mí me hizo gesto que me quedara.
Se sirvió un trago y lo bebió como haciendo pasar el mal trago.
-ISA (inicio y carraspeó antes de seguir)... AVERIGUE SOBRE LO QUE ME DIJISTE... Y EFECTIVAMENTE TERMINASTE LA CARRERA... ASI QUE LE PEDI A UN AMIGO QUE TE TOME PARA TUS PRACTICAS. Me anuncia.
-Me quiere alejar de aquí. Le digo.
-QUIERO QUE TE CAPACITES... QUE ADQUIERAS EXPERIENCIA... PUEDAS VER OTRAS RAMAS EN DONDE DESENVOLVERTE... Y NO SOLO TE QUEDES ENCAJONADA AQUI. Me dice.
-Quiero estar contigo. Le digo.
-Tus hermanas se van a ocupar de todo aquí. Me dice.
-Te llevarán a la quiebra. Le dije al no dejarme a mi.
-Isa... Puede que no lo entiendas... Pero es para tu beneficio... Debes saber desenvolverte en diferentes campos... No sabemos cómo será el mañana... Es mejor prevenir que lamentar. Me dice.
-Cuando te escucho hablar así ... Creo que lo que dijo Anto es verdad... Y me alejas al no querer recordar a mi madre porque me parezco a ella... Y todo lo que me dices que es por mi bien... Solo es escusa para tenerme lejos de ti... Y sabes... Me duele... Porque se que tengo la capacidad para demostrarte que puedo con todo esto... Pero si no me das la oportunidad jamás lo sabrás. Le digo molesta saliendo de su despacho sin dejarle decir nada.
Me encamino hacia el ascensor hasta llegar al piso de la habitación de Héctor pero antes de salir del ascensor, me detengo en seco al verlo besarse con una rubia fuera de su cuarto.
Era obvio que no era mi noche, para nada.
Él se soltó de esa rubia al verme, ví que su rostro cambió, puso cara de no saber donde meterse.
Solo volvi a apretar el botón del ascensor regresando a la planta baja.
-Isa... ¿Estás bien?. Me consulta Jhon al verme.
-Si... Voy a ir al bar. Le dije sería.
-Algo te pasa... No sé te ve bien. Me dice.
-ISA. Escucho a mi padre y no tengo ganas de escucharlo.
Suspiro deseado desaparecer.
-Jhon me invitó para que lo acompañe. Le dije para zafar de él.
-Dejanos. Le dijo mi padre y Jhon se retira.
"Cobarde", pensé
-Isa... Hablemos civilizados. Me dice.
-Ya lo hicimos... No eleve la voz... Al no ser digno de una señorita hacerlo... Cómo no es digno que pronuncie improperios o trate con desdén a nadie... Qué al parecer soy la única que lo aplica... Porque si hablamos de Anto deja mucho que desear... Sin contar la cachetada que me dio... Pero por educación no le respondí... Y al parecer tanto que me inculcaron esas reglas la monjas las tengo aprendidas y las llevo al pie de la letra. Le digo a mi padre.
-Y al estar nerviosa hablas más de la cuenta. Me dice.
-A sus ojos jamás hago nada bien ... Siempre encuentra un pero ... Cómo pelo en la sopa. Le respondo.
En eso se abren las puertas del ascensor y veo salir de el a Héctor junto a esa rubia mal teñida de mal gusto en ropa, al usar un traje de oficina, siendo que estamos en un hotel.
-Señorita Julieta veo que encontró a su prometido. Le dice mi padre.
-Si así es... Es usted muy amable. Le respondió esa mujer que no tiene nada de señorita, si parece del siglo pasado, una que se da de aires, cuyo rostro tiene como si chupara un limón.
Me aleje antes de que mi padre inicie con las presentaciones, no tenía ganas de actuar ante esa como una buena chica, sabía que se me saldría el hilo del carrete y le diría sus verdades.
Me senté en la barra del bar.
-¿Desea el jugo de siempre?. Me consulto el barman.
-Si le hechas licor... Mejor. Le dije.
-Señorita usted nunca bebé. Me dice
-Siempre hay una primera vez. Le digo.
-ISA NO PUEDES TOMAR ... ERES MUY SENSIBLE A LAS BEBIDAS... QUE SOLO LA HUELES Y TE EMPEDAS. Me dice mi padre.
-Soy mayor de edad... Puedo tomar mis decisiones. Le digo molesta.
-No... No permitiré que hagas algo que te perjudique. Me dice.
-En ese caso iré a mi cuarto... Me voy a encerrar y mañana partire a primera hora. Le digo molesta.
-NO PUEDES IRTE ANTES DE LA BODA DE TU HERMANA. Me dice.
-Por lo mucho que a ella le importa. Le respondo.
-Antes te quería preguntar sobre esto. Me dice enseñándome un pañuelo blanco manchado de sangre.
-Es un pañuelo. Le digo como si nada.
-Estaba en tu cuarto. Me dice.
-Lo abre usado al cortarme. Le digo restándole importancia.
-Al parecer no es tuyo... Tiene las iniciales LH. Me dice.
Lo mire como si nada, aunque en el fondo sabía que era de Hector.
-Y. Le pregunto.
-No me hagas sacarte como tirabuzón la verdad... Puedo enviar a hacer analizar y saber quién estuvo contigo. Me dice
-Has lo que quieras... Es solo un pañuelo... Qué me abrigo más de lo que tú a mí en años. Le digo.
-DE NUEVO CON ESE RECLAMO... SI YO NO TRABAJO ... SI NO HAGO TODO LO QUE HAGO PARA QUE NO LES FALTE NADA ... NADA VAN A TENER... NO ES FACIL SER PADRE SOLTERO. Me dice.
-Te agradezco por todo... Ahora me retiro. Le dije sarcástica, porque sabía de sus parejas casuales, que no eran fijas, pero las tenía, cambiaba de pareja como de boxer.
Me bebí el jugo que me puso el barman antes de irme.
Al llegar a mi habitación me encuentro con Héctor.
-Quiero descansar. Le dije sería indicando que salga.
-Isa... Deja que te explique. Me dice.
-No es necesario. Le respondí.
-Julieta solo se presentó... Me tomo por sorpresa... Pero con ella ya no tengo nada. Me dice.
-No es asunto mío. Le digo.
-Fue antes mi prometida, ya no lo es más. Insiste.
"Muy bien que se besaban", pienso.
-Adios. Le digo sacándolo.
Me recargue en la puerta sentandome en el piso, no tenía ánimos de nada, me sentía agobiada por todo.