Lía Smith fue huérfana desde muy pequeña, pero eso no le impidió que siguiera adelante. Día a día lucha por terminar su carrera y ser alguien profesional. Ella jamás imaginó que, por la mala jugada de una supuesta amiga, ella quedaría atrapada en manos de un peligro hombre llamado Matteo, quien exige su dinero de vuelta o Lía no podrá ser libre.
¿Podrá Lía escapar de las manos de Matteo?
Descúbrelo en esta emocionante historia llena de pasiones e intrigas.
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Empezando un Romance
▪︎ Lía: No sé en qué estoy pensando cuando le pido a Matteo que me penetre. Estas sensaciones son tan nuevas para mí que no sé cómo reaccionar. Él hace caso y comienza a embestirme. ¡Así se siente el cielo! Creo que ya no podré escapar de las garras de este hombre. No sé cómo me he podido involucrar de esta manera con él, solo sé que me encanta todo lo que me hace y cada vez quiero más de él. Siento cómo mi cuerpo hormiguea cuando me embiste. Le pido más y él me mira y sonríe. Yo no puedo seguir aguantando Y de mí salen muchos gemidos: 'Sí, dame más, ummm, así, ¡AAAh!'. No sé cuántas veces lo hicimos, pero terminé tan cansada que me dormí en sus brazos.
▪︎ Matteo: Lía tiene ese algo que le faltaba a mi vida. No sé cómo explicar todo lo que me hace sentir. Después de un largo tiempo, terminamos. Ella se queda dormida en mis brazos, yo la abrazo y le doy un beso en la frente. Me levanto para darme una ducha. Estoy muy feliz; parezco un niño de 15 años, y ni yo mismo logro reconocerme por comportarme así. Salgo y me recuesto al lado de Lía. Sin darme cuenta, caigo dormido en cuestión de minutos.
▪︎Lía: Me despierto y veo a Matteo a mi lado. Me sonrojo al verlo, no puedo creer que esté haciendo estas cosas con él. Para ser sincera, me atrae no solo su belleza, sino también su forma de hablarme. ¡Me gusta en serio! Empiezo a acariciarle el rostro, pero siento que se va a despertar, así que quito mi mano rápidamente. Él me la toma y me dice.
▪︎ Matteo: ¿por qué no sigues tocándome? A mí me gusta. Entonces ya tienes una respuesta para mí. La verdad, ya no sé en qué idioma hablarte para que me creas que entre Dana y yo solo hubo sexo. Sé que es muy rápido para decirte esto, pero desde el primer día que te vi, me atrajiste y no lo niego. Soy un hombre que, si quiero algo, lo consigo cueste lo que cueste. Pero, mientras más te veía y conocía, quería que tú desearas estar conmigo. Entonces, ¿qué me dices?
▪︎Lía: La verdad, no sé qué hacer. Tú también me atraes y, como dije antes, eres el primer hombre en mi vida. Aunque quiera negarlo, ya no puedo; me gustas. Sin embargo, me da miedo que todo cambie cuando veas a Dana. No tengo tanta experiencia como ella y también siento que la estoy traicionando al quedarme contigo. Así que, por favor, dame algo de tiempo.
▪︎ Matteo: Está bien, por mi no hay problema. Te daré todo el tiempo que necesites, así que no te preocupes y no pienses en cosas innecesarias. Está bien. Bueno, ya se ha hecho tarde, voy a mi habitación para que no te sientas incómoda, ¿te parece?
▪︎Lía: Tomé a Matteo inconscientemente de la mano cuando dijo que se marcharía a su habitación. Le dije: 'Hoy puedes quedarte aquí conmigo. Tengo otra cosa de qué hablar contigo. Sé que puede ser mucho pedir, pero quiero que lo consideres. Está bien, yo quiero regresar a la universidad, y si tú no das tu permiso, nadie me dejará salir de aquí. Así que, por favor, piénsalo, ¿sí?'
▪︎Matteo: No me gusta la idea de que Lía quiera regresar a la universidad. ¿Qué tal si es una trampa para alejarse de mí? No lo sé. Le digo: 'Lo siento, pero no quiero que salgas de casa en estos momentos. Si quieres, puedo contratar profesores particulares para que te den clases aquí.'
▪︎ Lía: No, eso no es lo mismo. Yo quiero asistir a la universidad. No sabes todos los sacrificios que tuve que hacer para entrar allí, así que, por favor, déjame. Te prometo que no haré nada malo y vendré tan pronto como terminen las clases. ¿Qué dices?
▪︎ Matteo: Lía pone una expresión extraña en su cara que me da pena, así que, sin dudarlo, le digo: está bien, pero tendrás que irte y volver con el chófer que te pondré. Si no tienes ningún inconveniente con eso, puedes regresar mañana mismo a la universidad. Quiero que tengas claro que no quiero a chicos revoloteando alrededor de ti, porque no volverás más. ¿Está claro?
▪︎ Lía: gracias, en serio, muchas gracias por aceptar. No sabes lo importante que es para mí hacer esto y no te preocupes, no tendrás quejas de mi parte, puedes estar tranquilo. Me le acerco y le doy un beso tan inocente que él se queda mirándome y me dice.
▪︎Matteo: si me vas a dar un premio, deberías aprender a darme un beso más apasionado. La tomo del rostro y empiezo a besarla con tanta pasión que siento cómo nuestras lenguas juguetean entre sí. Terminamos de besarnos y alguien toca la puerta. Lía me mira y me dice...
▪︎Lía: ¿Qué hacemos ahora, Matteo? Y si te ven aquí conmigo, ¿qué van a pensar? Él se ríe de mí y me dice que pregunte quién es. Yo hago caso y digo: '¿Quién es?' Escucho la voz de Eva, me da vergüenza que nos vea aquí juntos y le digo que espere.
▪︎Matteo: ¿Qué necesitas, Nana? Pasa, no hay problema. Miro a Lía y ella me abre los ojos como diciéndome '¿qué haces?'. Yo me río y Eva pasa.
▪︎ Eva: Qué pena, joven amo y señorita. Es que le traje la cena a la señorita Lía, ya que no ha salido del cuarto a cenar, pero si quieren, regreso más tarde.
▪︎Matteo: No te preocupes, Nana, trae la comida que también tengo mucha hambre. Ven, Lía, tomemos asiento mientras comemos, ¿o no quieres?
▪︎ Lía: Muchas gracias, Eva. Ya te puedes retirar; si te necesitamos, te llamamos, ¿ok? Eva sale y cierra la puerta. Miro a Matteo y le digo: '¿Qué te pasa? ¿Por qué hiciste eso? No sabes la pena que tengo con ella. ¿No viste cómo estaba? Ahora no sé con qué cara mirarla mañana.'
▪︎ Matteo: ¿De qué te preocupas? De ahora en adelante siempre nos verá así, ya que tú eres mi mujer. Así que ven a comer antes de que se enfríe la comida. Tomo su mano, la siento en mis piernas y empezamos a comer.