Una historia, en el que el amor se pone en juego de distintas maneras; desde la forma en que se puede encontrar de acuerdo a la actualidad en la que vivimos; poniendo un ejemplo de todo lo que puede pasar en una relación, cuando la sinceridad y la confianza son la base de la misma y como el pasado puede volver a nosotros, pero es decisión de cada uno si lo acepta además de las condiciones en que lo hacemos.
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LA HARE FELIZ
Mientras el encuentro de Mónica y Liz ocurría, Julián hacía lo propio comunicándose por
teléfono con Carlos, ya que no podía hacerlo en vivo, debido a que no sabía ni siquiera como lucia esté en persona, y obviamente no podía ir a casa de Liz cuando su acérrimo rival estaba con ella.
Al recibir una llamada de un número desconocido, contesta debido a que por su trabajo está acostumbrado a contestar este tipo de llamadas, sin dudarlo mucho, contesta, inmediatamente escucha una voz algo aguda, que inmediatamente empieza una confrontación.
Julián:
Buenas tardes, Carlos, me comunico contigo porque tú estás saliendo con la mujer que yo amo.
Carlos:
Así que eres Julián, ya me imagino como conseguiste mi número, mira, no tengo nada que hablar contigo y menos por este medio.
Julián:
No me huyas cobarde, si no quieres hablar mejor, dímelo directamente, y si tú excusa es el teléfono, veámonos en persona y arreglemos esto como hombres.
Carlos:
Olvídalo, estoy plenamente consciente de tu situación y en que consiste, no levantaré mis puños contra ti, no solo porque estás enfermo, sino porque mi amada Liz me lo pidió, ya que por tu situación no sería una pela justa; además que puedo ver claramente que estás intentado que te golpee para denunciarme, meterme en problemas legales y más importante con mi Liz, si te golpeo:
1.-Inmediatamente cometo un delito
2.-Sería tu excusa perfecta para ir a chillarle a Liz y ponerme en mal con ella
3.-Sería prácticamente dejarte a Liz en charola de plata
Julián:
Cobarde, lo único que me das son excusas, estoy seguro de que las pones solo para no enfrentarme como hombres, o ¿acaso Liz no vale la pena para que peles por ella?
Carlos:
Llámame cobarde todo lo que quieras, no me importa, si crees que son excusas, pero por mi amada levantaría mis puños contra quien sea y escúchame bien yo si te quería partir en mil pedazos desde que reapareciste en su vida, pero ella me pido que no lo hiciera, claramente me dijo que esa sería la prueba de mi amor por ella y muy a mi pesar lo acepté porque la amo.
Julián:
Excusas si crees que por tener una enfermedad degenerativa no puedo defenderme, te equivocas y si es tu orgullo de no golpear a un moribundo, estás muy equivocado, para tu información apenas empiezo con esto y aún puedo pelear contra un fanfarrón como tú.
Carlos:
Puedes insultarme tanto como quieras, no caeré en tus provocaciones infantiles, además, no solo es porque estés o no moribundo, tú lo has dicho, tengo orgullo y a si estuvieras sano, tampoco pelearía, ya que yo tengo entrenamiento artemarcialista, así que por donde lo veas tengo ventaja sobre ti y sería una pelea injusta y que mi Liz se enoje conmigo y se aleje de mí.
Julián:
Eres un desgraciado, pero yo amo a Liz más que tú y yo la are feliz
Carlos:
Yo la hago y la aré feliz; sé que es muy cruel amar por nada, pero ella tiene otro amor que la lleva a lo más alto, soy yo ese amor y soy dueño de su encanto.
Julián:
Para tu carro infeliz, conozco esa canción a la perfección, te niegas a pelear con los puños, por tu orgullo y según tú, por el amor que le tienes, pero aun así me golpeas con esa canción que no tienes idea de lo que puede lastimar a alguien la burla que haces, si en verdad eres un guerrero de artes marciales sabes que no hay peor golpe para alguien caído que su oponente no le muestre ni el más mínimo respeto y se burle de él.
Carlos:
Tú me provocaste y si ahora quieres hablarme de honor es demasiado tarde, no me importa si te hiero, pero te advierto que no te vuelvas a comunicar conmigo con esa exigencia tan ridícula yo amo a Liz y por ese inmenso amor que le tengo no te destrozo físicamente, pero nada me impide, hacerlo psicológicamente; así que
más vale que entiendas de una vez que ¡MI DESTINO Y EL DE ELLA ESTÁN ENLAZADOS!
Julián;
Dirás lo que quieras, pero no me rendiré tan fácilmente de una u otra forma te quitaré a Liz, yo la puedo mantener y darle una buena vida
Carlos:
Yo también lo puedo hacer y más te vale no seguirme molestando, que si me sacas de mis casillas puedo abrir de más la boca y decirte algo que no solo te lastimará, te destruirá como hombre
Julián:
No te temo en lo más mínimo y todo lo que tú le ofrezcas o le des a Liz, yo lo puedo igualar y superar, sin ningún esfuerzo.
Carlos:
Ja estás dando patadas de ahogado, yo jamás la obligaré a aceptar ni un solo desplante de mi familia, no la forzaré a soportar llamadas de “emergencia” a altas horas de la noche, no le pediré su crédito de la tienda amarilla para darle algo a alguien que ni siquiera la valora
Julián:
No te atrevas a juzgarme, como osas hacerlo, yo hice lo que debía y no tengo de que avergonzarme, es deber de todo hombre ayudar a su familia
Carlos:
Ja, ja, ja te justificas, pero en algo tienes razón, es deber de todo hombre ayudar a su familia y cuando uno está juntado o casado su familia es su mujer y si tus familiares no son capaces de apoyar a tu madre se les pone un ultimátum y se toman las acciones pertinentes
Julián;
Tú qué sabes, yo no le incumplí a Liz en ningún aspecto, siempre cumplí con mis obligaciones como su pareja y nunca tuve una sola queja de ella en ningún aspecto, y repito en ningún aspecto
Carlos:
Te lo advertí, pero tú lo pediste, yo si le cumplo a mi amada en todos los aspectos, no le fallo en ningún aspecto ni como pareja ni como hombre, ya te habrás dado cuenta, de que mi niña me dice tío a diferencia de ti jamás les hago un desplante y siempre trato de estar para ella y para mi Liz, si presumes tanto de tu hombría, créeme que nunca te podrás comparar conmigo y sin tan hombre te crees ve todo lo que te voy a mandar y si no lo haces me demostrarás que el fanfarrón eres tú.
Sin dejar responder a Julián, Carlos cuelga la llamada y bloquea el número para que ya no lo pueda contactar, no sin antes darle un último golpe por WhatsApp enviándole no uno sino varios links con la letra de la canción que tanto le molesto en diferentes versiones incluso cantándola el cómo karaoke.
La canción que a Julián tanto le molesto y que Carlos le envió es la siguiente
No te pertenece del autor Moder Talkin en su cover en español cantado por Klaz ykeroz
Si mi amor es como un fuego
Y tú puedes desvivarlo mucho más
Si abres tu corazón
Que fácil, fácil
Tu juego no perdurará
Con el jamás podrás llegar
Sé que me quieres solo a mí
Ella no es para ti
Brother Louie, Louie, Louie
Ella quiere un amor
Que la eleve a lo más alto
En sus ojos se ve
Draba love, love, love
Que soy yo ese amor
Y soy dueño de su encanto
Brother Louie, Louie, Louie
No te pertenece
Oh, se que es muy cruel amar por nada
Brother Louie, Louie, Louie
Oh, deja que se aleje
Oh, la haré feliz prometo amarla
Ves ella me mira solo a mí
Su corazón lo ordena así
Y así será su amor
Por siempre, siempre
Tú jamás podrás llegar así
Porque su amor fue para mí
Desde el momento que la vi
Ella no es para ti
Brother Louie, Louie, Louie
Ella quiere un amor
Que la eleve a lo más alto
En sus ojos se ve
Brother Louie, Louie, Louie
Que soy yo
Ese amor
Y soy dueño de su encanto
Brother Louie, Louie, Louie
Oh, no te pertenece o se que
Sé muy cruel amar por nada
Brother Louie, Louie, Louie
Oh, deja que se aleje
Oh, la haré feliz prometo amarla
