Aisha es una mujer joven que, debido a ciertos acontecimientos, se fue de su ciudad natal con su hijo pequeño. ¿Logrará Aisha mantenerse a ella y a su hijo? ¿Y podrá encontrar el amor? ⭐️NOVEDAD⭐️ Al final de 2023 publiqué un libro de fantasía con un toque de romance en Amazon, el ebook está disponible en Kindle Unlimited y se llama "El Rey de Starian". Esta novela fue escrita hace años, era bastante más joven y mi escritura ha mejorado mucho, por favor, eviten comentar cosas maliciosas y no necesarias. ¡Solo acepto críticas constructivas! ¡EL PLAGIO ES UN DELITO! ¡NO AUTORIZO EL USO DE NINGUNA PARTE DE MI HISTORIA! Insta: layzanc **NOVELA CONCLUIDA** L - Apto para todas las edades. (Puede contener lenguaje inapropiado, pero censurado) Todas las imágenes son tomadas de internet.
NovelToon tiene autorización de Lala-chan para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Não mudaria nada - Aisha/Casamento arranjado - Bryan
Me siento y contemplo a Allan por un rato, me levanto y me voy a bañar, me pongo ropa y decido dejarlo durmiendo, hoy Alice y Helena van a quedarse con él aquí mismo. Voy a la cocina y las veo tomando café.
*Yo* - ¡Buenos días!
Me siento.
*Helena* - Buenos días\, querida.
*Alice* - Buenos días.
*Yo* - Gracias por quedarse con Allan.
*Helena* - Ya te dije que está bien\, solo hay una condición\, quiero que me llame abuela.
En ese momento mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas, me siento muy feliz al saber que hay personas que aman a mi hijo, que me aman y se preocupan por nosotros.
*Yo* - ¡Por supuesto!
*Alice* - Entonces quiero que me llame... ¿Lice?
Me echo a reír.
*Yo* - ¿Acaso tía Alice no es suficiente?
*Alice* - Los niños llaman a todo el mundo tía.
Hace una mueca de enfado y Helena y yo nos reímos.
Después de desayunar, cogí un autobús y fui a trabajar, me puse el uniforme y hice todo lo que necesitaba, hoy el jefecito no vendría para el almuerzo, así que hice lo suficiente para mí.
Por la tarde llegan Amélia, un hombre y el jefe.
*Amélia* - Buenos días.
*Yo* - Buenos días.
*Hombre* - Soy Caleb\, el padre de Bryan.
*Yo* - Buenos días\, señor.
Y el jefe sigue con cara de paisaje, esa cara suya me irrita.
*Bryan* - Prepara nuestro café\, vamos a tomarlo aquí.
*Yo* - Está bien\, con su permiso.
Voy a la cocina y preparo el café, lo pongo en la mesa y los llamo a la sala.
Toman el café y yo voy a limpiar la mesa, recojo los platos y empiezo a escuchar gritos en la cocina, como soy curiosa, me acerco y me pongo a espiar, ya que la casa tiene un concepto abierto, me apoyo en la pared de la cocina y asomo un poco la cabeza.
*Bryan* - ¡Qué idea más absurda! Como si fuera a casarme con alguien a quien vi una vez.
*Señor Caleb* - ¡Sí que te vas a casar! Sus padres son importantes y queremos unir las empresas.
*Bryan* - ¡No me voy a casar con ella!
*Amélia* - Hijo\, trata de entender\, esto será genial para la empresa\, y Eduarda es una chica estupenda\, te gustará con el tiempo.
*Bryan* - No\, no lo haré\, como si pudiera gustarme esa...
Sin querer, dejo caer un plato y todos me miran, me agacho a recoger.
*Bryan* - Coge una escoba\, te cortarás así.
Voy al trastero y cojo la escoba, cuando vuelvo solo está el jefe en la sala.
*Yo* - Disculpe.
*Bryan* - ¿Por espiar o por el plato?
Sonrío tímidamente y acabo diciendo lo que no debo.
*Yo* - Creo que no debería discutir así con sus padres.
Él me mira, no sé reconocer su expresión.
*Bryan* - ¿Qué?
*Yo* - Es que... Bueno\, simplemente no me gusta ver peleas con los padres...
Río tímidamente y él se acerca a mí.
*Bryan* - ¿Y tú qué sabes de la vida? Aún eres una niña con menos de veinte años.
Habla con un aire de superioridad que me hace sentir muy incómoda.
*Yo* - Lo siento\, voy a barrer los fragmentos.
(No sé nada de la vida, qué bien.)
Sonrío, pero se me llenan los ojos de lágrimas.
(Cómo me gustaría no saber nada de la vida y simplemente ser una mujer normal de diecinueve años, sin problemas.)
Después de hacer todo mi trabajo, me voy a casa, ceno con Helena, Alice y Allan, y luego vamos a nuestra habitación.
Lo pongo en el tapete y busco unos pijamas para nosotros.
*Allan* - Mamá.
Me giro.
*Yo* - ¿Qué pasa?
Extiende los brazos y me doy cuenta de que quiere que lo coja, lo cojo y empiezo a cantar y caminar, querría tener una vida más normal, pero si eso significara no tener a Allan, haría todo exactamente igual, no cambiaría nada.
Se duerme en mis brazos y lo pongo en la cama, después de mi rutina nocturna me acuesto, le doy un beso en la frente y me duermo.
(No cambiaría nada.)
*Yo* - ¿Por qué querían hablar conmigo?
*Padre* - Te vas a casar.
*Yo* - ¿Qué?!
*Madre* - ¿Recuerdas a Eduarda?
Yo asiento con la cabeza, aún sin entender nada.
*Madre* - Con los padres de ella acordamos tu matrimonio.
*Yo* - ¡Yo no me voy a casar!
*Padre* - Sí que te vas a casar.
A partir de ahí comenzamos una discusión que se detuvo cuando Aisha tiró un plato.
(La chica estaba espiando.)
*Yo* - Mejor que se vayan.
*Padre* - Volveremos a hablar.
*Yo* - Claro\, claro.
*Madre* - Buenas noches hijo.
*Yo* - Buenas noches.
Abrazo y beso a mi madre, solo doy la mano a mi padre.
Cuando Aisha regresa, me dice que no debería discutir con ellos y termino diciéndole algunas cosas, me arrepiento un poco, después de todo no sé nada de su vida.
Regreso a la empresa y continúo con mi trabajo, a la hora de la cena regreso, ceno y me voy a mi habitación, me doy un baño, me pongo mi pijama y me acuesto a dormir.
(¡No me voy a casar con ella!)
Dormí con ese pensamiento.