El Rey Muerto

Mientras caminaba de vuelta a la cocina, pensanba en el rey, en lugar de darme miedo siento pena por el, es como un cachorrito asustado.

Verónica: ¡Niña! Estás viva.

Lucia: Claro que si, ¿acaso pensabas que moriría?

Verónica: La verdad es que si.

“Que poca fe me tiene esta señora”

Lucia: Pues aquí estoy.

Verónica: Cuéntame todo lo qué pasó, ¿me contarás por qué aún estás viva. ?

Lucia: La verdad no fue nada del otro mundo, le lleve la comida, me hizo algunas preguntas.

Verónica: Pues muy raro.

Lucia: ¿Tan malo es el rey como para pensar que me mataría?

Verónica: Bueno es que ya sabes todo lo que dicen de él.

Lucia: Pues no sé mucho créeme, así que dígame ¿Cuando llego el rey aquí?

Verónica: Bueno eso fue hace 10 primaveras, una noche donde hubo una gran tormenta, el cielo estaba más negro que nunca. Se dice que el rey muerto entró al castillo y acabó con toda la familia real. Los soldados entraron para combatirlo pero uno a uno iban muriendo.

Él se adueñó del reino, por mucho tiempo estuvo encerrado, un día había un anuncio que necesitaba personal, como sabrán nadie quería aceptar, pero poco a poco él hambre comenzó a crecer en este reino. Así que muchos decidimos venir y pedir empleo. Quiero decirle que el rey nos paga 3 veces más de lo que merecemos.

Lucia: No es un tirano.

Verónica: Al menos no con nosotros.

Lucia: Algo bueno en medio de todo. ¿sabes si tienes familia o si ha tenido pareja?

Verónica: Bueno no sabemos si pareja como tal, en el ala norte del castillo vive una mujer, tiene un temperamento del demonio, ella afirma ser la esposa del rey muerto, pero jamás ha sido confirmado.

Lucia: Asi que tiene esposa… que interesante.

Verónica: Bueno gracias a los dioses estás viva, ya no tendrás que volver allá.

Lucia: La verdad me pidió que volviera mañana en la noche, de nuevo quiere que le lleve su comida.

Verónica: Que extraño.

Lucia: Dígamelo a mi.

Me dirigí a la cama, la verdad tenía mucho sueño fue un día cargado de emociones.

A la mañana siguiente hice mis deberes, después fui a la biblioteca. Ya hace unos día que comencé a ordenar los libros. Sacudía todo ese polvo aunque me hiciera estornudar. Me gustaba pasear por todo el lugar, se que mi edad real eran 30 años pero juro que me sentía de 18 explorando el castillo.

Me encontré con Camila así que tenía una misión para ella.

Lucia: Camila ¿tú sabes si en ala norte vive una mujer?

Camila: Pocas veces la he visto, tiene guardias en su puerta.

Lucia: Pues la señora Verónica dijo que ella era la esposa del rey.

Camila: ¿La reina?

Lucia: Al parecer eso dice la mujer, aunque el rey no le ha dado su puesto.

Camila: Averiguaré todo lo que pueda.

Nos despedimos, tuve que volver a la cocina, la cena ya estaba casi lista.

Verónica: Niña vete a cambiar.

Lucia: Está bien, ya vuelvo por la charola.

Al llegar a la habitación quede sorprendida había un vestido realmente hermoso. Volví corriendo a la cocina.

Lucia: Señora Verónica ¿de quien es el vestido qué hay en nuestra habitación?

Verónica: Es suyo mi niña, Bernart lo trajo en la tarde y dijo que era para ti, órdenes del rey.

Volví a la habitación, tuve que darme un buen baño. Observé el vestido por unos minutos.

“Es realmente hermoso ”

Me vestí, pase por la cocina donde la señora Verónica me entregó la comida.

De nuevo iba por el pasillo, ¿será que quiere hablar? O ¿que me pedirá hoy?

La puerta estaba abierta pero seguía estando oscuro adentro.

Lucia: ¿Hola?

Rey Muerto: Pasa

Entré a la habitación, dejé la charola en la mesa igual que la noche anterior.

Lucia: ¿Desea que me quede o me marcho?

Rey Muerto: Quédate

Volví y me hice en la ventana, quería aprovechar el rayo de luz, comencé a mirar al exterior había un campo inmenso al final había una cascada.

Lucia: Gracias por el vestido, en verdad es muy hermoso.

Rey Muerto: ¿Que hiciste hoy?

“Al parecer evadió mi agradecimiento”

Lucia: Lo mismo de todos los días, cocinar, limpiar y arreglar libros.

Rey Muerto: Un día aburrido por lo visto.

Lucia: La verdad así es, me puede decir cómo estuvo el suyo ¿algo interesante?

Rey Muerto: No

Lucia: Creo que es una situación incómoda, no hay mucho de que hablar entre los dos. ¿No cree?

Rey Muerto: No soy bueno para hablar.

Lucia: ¿Enserio? Si no me lo dices le juro que no lo noto.

Rey Muerto: ¿Te burlas de mi?

Lucia: ¿Yo? ¿Jamás?

Rey Muerto: Sabes que puedo matarte en este momento.

Lucia: Lo se, pero se que no lo harás.

Rey Muerto: ¿Porque estás tan segura?

Lucia: Por que yo le agrado, de alguna extraña manera quiero decir.

Rey Muerto: Me pareces rara.

Lucia: Bueno eso también es una opción.

Rey Muerto: Háblame de ti, ¿quien eres?

“¿Que puedo decirle? Soy Lucia, Soy Alice, lo mejor era no pronunciar un nombre”

Lucia: Bueno soy una mujer curiosa, deseosa de conocimiento, me gusta las cosas simples, como el olor del césped recién cortado, adoro el aroma del café, amo los libros, odio el brócoli y a los traidores.

Como sabrás soy muy habladora y antes que se me olvide, adoro su castillo, esa manera de tallar las piedras es magnífico. Por favor llévele mí admiración al escultor.

Rey Muerto: ¿Tu familia?

“En ese momento pensé en mi madre, mi padre y mis hermanos, ¿los veré de nuevo?”

Lucia: Creo que el día que entré aquí ellos me abandonaron.

Rey Muerto: ¿Lord Varon?

Lucia: ¿Que hay con el?

Rey Muerto: Es tu esposo debes extrañarlo.

Lucia: En absoluto señor, creo que ese hombre es un abusador, ¿como es que se casa con una niña de 14 años?. Debo decir que él era un hombre de 24 años.

Rey Muerto: Muchas mujeres lo hacen, existen muchas tradiciones.

Lucia: Aquí y en cualquier mundo es pedofilia señor.

Rey Muerto: ¿Qué harás al respecto?

Lucia: Bueno el día que lo vea le romperé la cara, eso lo juro.

Rey Muerto: Eres valiente. ¿sabes que te pueden castigar? Es posible que te lleven a la horca por faltarle el respeto a tu esposo.

Lucia: Señor tengo un dicho, dice que el que tenga miedo de morir es mejor que no nazca.

Rey Muerto: Así que no temes morir.

Lucia: No señor, no puedo temerle a lo único seguro que tenemos en la vida. Por cierto ¿Cuantos años tienes?

Rey Muerto: Perdí la cuenta cuando cumplí 200.

Lucia: Vaya pues debería darme la fórmula , me gustaría vivir muchos años.

Rey Muerto: Te la dire.

Lucia: ¿Enserio? Pues dime.

Rey Muerto: Date la vuelta me acercaré.

“Volví a llevar mi vista al hermoso jardín”

Sus pasos me indicaba que ya se estaba acercando. Sentí que movió mi cabello a un lado, lentamente se acercó a mi oído.

Rey Muerto: En las noches entró a la habitación de mis empleadas y les succionó un poco de su sangre.

Lucia: ¿Es verdad eso?

Rey Muerto: Así es.

Sentí su mano por mi espalda, mi piel se erizo por completo.

Lucia: Bueno es lógico lo que dices, todos los días amanezco muy cansada, pensé que era por la cama de piedras donde duermo, pero su teoría es creíble. Me siento aliviada que no tendré mi espalda como una U próximamente.

Escuché que soltó la risa, trato de cubrír su boca para que yo no lo escuchara.

Rey Muerto: Ya te puedes ir, mañana a la misma hora.

Lucia: Está bien.

Salí de la habitación, cerré la puerta con mucho cuidado. Comencé a caminar hacia mi habitación.

“Creo que me estoy ganando su confianza, espero pronto sacarle información sobre la pequeña Ailyn”