EL HIJO DEL CEO:
Los caminos de la vida no son como uno quiere y desea.
Conocí a Étienne en un crucero por las Bahamas, nos hicimos novios desde la distancia. Lo que no sabía que él era un hombre comprometido.
Mis padres me obligaron a casarme con Sebastián Montenegro, el hijo del CEO más importante de Los Ángeles. Me casé sin amor pero con su dedicación me terminé enamorando de él. Sebastián tenía una doble vida.
Me divorcié de Sebastian estando embarazada de él.
Mis padres me envía a Roma donde vivo con Cecilia y su hijo Joan. Joan queda enamorado de Ariana al verla la primera vez.
Sebastián tuvo un accidente donde lo declaran con muerte cerebral.
¿Cómo crees que terminara esta historia llena de muchas lágrimas?
¿Será que Joan logré conquistar el corazón adolorido de Ariana?
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CONFUNDIDO
SEBASTIÁN
Cité a Ariana en el café. Estuvimos platicando un poco. Yo sé que todo esto la ha impactado y le ha dolido. Me dijo que me odia. De un momento a otro empezó a hiperventilar, la llevé a mi auto y le encendí el aire y le di una bolsa de papel que me había dado la señora del café.
Salí un instante a pagar la cuenta y recoger los documentos del divorcio que había dejado en la mesa.
Entré al auto. Tomé sus manos que estaban a tal punto de congelarse y las empecé a frotar.
— En serio Ari, perdoname. Estás asi por mi culpa. Tú eres una buena mujer y muy hermosa— le dije con un rostro entristecido.
Acaricié con mis manos su rostro.
— Mírame. Tranquilízate.
Llevé mis labios a sus labios y la besé. Ella me besó con tanta fuerza que hizo sangrar mis labios. Podía sentir su dolor y hacía que mi corazón doliera. He sido un completo idiota en todo.
— Tranquila— Le dije y la abracé.
— Este es nuestro adiós— ella me susurró al oído.
— Yo se. Haré lo que tú quieras que haga, si esto es para que te sientas tranquila, está bien. No creas que no me duele alejarme de ti más ahora sabiendo que estás embarazada.
Ariana tapó su cara con sus manos.
— Sebastián solo una cosa más y me voy. Yo era feliz a tu lado. Te amo, yo te amo pero no puedo seguir con una persona que me engañó y tiene embarazada a otra.
Cada una de sus palabras eran como una daga para mí corazón. Ella, la mujer de la cual me había enamorado desde hace unos años atrás, la mujer que se casó conmigo sin amor, ella me ama. La mujer que estoy dejando libre por mi error.
Mi padre después de aquella llamada no me ha vuelto a llamar pero creo que debo verlo y hablar con él. No he sido lo suficientemente valiente para afrontar mis problemas. Llegué a su oficina.
— Papá, podemos hablar. Esta vez no como padre e hijo sino como dos amigos.
— Te escucho— Frunció el entrecejo.
— Acabo de firmar los papeles del divorcio. No tengo moral para retener a Ariana.
— ¿Qué estupidez acabas de hacer? Y esa mujer realmente está embarazada y te aseguraste que el hijo que espera es tuyo. Ya el escándalo de la prensa no le pongas mente, muy pronto eso pasará al olvido.
— No. La llevaré a una clínica para verificar su embarazo. De algo si estoy seguro. Ariana está embarazada.
— Santo Dios hijo. Estaba pensando este año retirarme de la empresa y ya buscar como descansar junto con tu mamá y dejarte la empresa a tus hombros pero estas demostrando que no sos capaz ni de lidiar con tu vida menos con una empresa.
— Padre, todavía estás joven para retirarte y la verdad es que en estos momentos me siento incapaz de todo. Me avergüenza esto que voy a decir pero me siento sin sentido sin orientación, jamás en vida me había sentido así. Hoy Ariana me dijo que me odia.
— Mi consejo como hombre, es que si la amas luches por ella. Tienes el pretexto perfecto para retenerla a tu lado y es el embarazo de ella.
Estuve un rato más con mi papá en la oficina. Salí más confundido, no quiero obligarla a estar conmigo, con que moral lo haré.
Al llegar la noche me fui a tomar a un bar. Quería vaciar mi corazón y mi mente. Tomé hasta emborracharme. Llamé a Ariana pero ella no me contestó. Asi que me subí a mi auto y conduje hasta su casa.