UN PADRE PARA MISAEL (6)

__ Entonces ¿te confiesas perdidamente enamorado de la bruja altanera del parque?

__ Te gusta joder, ¿verdad?

__ El que calla otorga

__ Eres un maldito grano en el trasero, está bien, Si, si estoy enamorado de la bruja altanera

__ ¿Entonces que haces aquí hablando perdiendo el tiempo? Mira que cuando salí de la Dulcería iba un hombre con un arreglo de claveles en dirección a allá

__ ¿Y hasta hora me lo dices?

Cerem salió de prisa de la oficina, sabía que enviar ese otro ramo bajo el seudónimo de ADMIRADOR SECRETO, terminaría de darle a su jefe el impulso para conquistar a Fedra.

Cerem llegó agitado y al entrar al local lo primero que vio fue el arreglo de claveles, que estaba en la barra, él disimuladamente leyó la tarjeta y lo empujó hacia el piso, la mesera, recogió rápidamente al pensar que había sido un accidente,

Cerem caminó hasta adentro y a lo lejos a Fedra, sentada con un hombre hablando muy sonriente.

Él conocía muy bien a esa escoria y sabía de qué se trataba su visita.

Su enojo comenzó a crecer cuando vio al hombre tratar de tomar la mano de Fedra y ver como disimuladamente ella rechazó este roce, así que sin dudarlo caminó hasta ella con paso firme y al llegar la abrazó por la espalda

__ Perdón por la demora amor, _ dijo sentándose a su lado y dándole un casto beso en sus labios

Fedra estaba paralizada, pero lo dejaría pasar solo porque le serviría para alejar a este latoso pretendiente, que ella no podía despreciar abiertamente porque era un importante inspector del Ministerio de Sanidad y aunque ella cumplía con todos sus requerimientos, tenerlo de enemigo no era algo a lo que ella quería enfrentarse menos en un país desconocido para ella.

__ Se-señor ASAF, un placer verlo _ dijo el hombre temeroso ante la imponente presencia del Magnate.

__ ¿Qué lo trae por aquí inspector?, ¿algún problema con el negocio de mi mujer?

__No, no, no, todo en orden como siempre, la señora Fedra es muy responsable

__ Si, créame que lo sé mejor que nadie y ¿ese estuche de joyería?, ¿es para mi mujer?

__ No, no, ¿cómo cree?, es para mi esposa, solo quería la opinión de una dama acerca de lo apropiado del regalo

__ Ah, ya veo, bueno inspector no le quitamos más su tiempo, por favor salude al Ministro de mi parte, dígale que aún espero la revancha en el tenis, ah y otra cosa cualquier asunto referente a este negocio, comuníquese con mi asistente Fred él se hará cargo de ahora en delante de todos los asuntos legales de mi mujer, como comprenderá ella necesita tranquilidad por nuestro hijo. ¿Entendido? _ terminó de decir Cerem tocando el vientre de Fedra

__ Si, si, claro entiendo señor ASAF, con su permiso me retiro

El hombre salió despavorido del lugar y Fedra tenía su ego por las nubes, cada vez que el gruñón pronunciaba palabras como “mi mujer” y “mi hijo”, si corazón latía frenéticamente, la manera tan firme en que este hombre la reclamó como suya delante de ese baboso pretendiente la hizo sentirse amada, querida y protegida por primera vez, pero se golpeó con la dura realidad cuando Cerem tomó su mano y ella sintió el anillo en su dedo.

__ Gracias, señor ASAF, pero no debió molestarse, esto pues traerle problemas con su esposa

__¿celosa?, ahora el ofendido soy yo, nunca he sido un hombre infiel y si estoy casado peto en espera de mi sentencia de divorcio

__ Bueno, señor ASAF, cuando tenga ese documento lo recibiré con los brazos abiertos, mientras tanto solo limítese a venir a comprar y a comer dulces, ah y por supuesto traiga consigo a mi pequeña amiga, que me encanta compartir con ella.

Cerem, levantó la cejas en señal de sorpresa, ¿acaso está bruja altanera, pensaba que podía provocarlo y después alejarlo como si él fuese un juguete?, Cerem dibujó una sonrisa perversa en su rostro

__ Ah, sí que bueno, ¿tú crees que después de haber dicho delante del inspector y todos los presentes que tú eres mi mujer y que esperas a mi hijo, te vas a alejar de mí?, pues no señora usted está muy equivocada, tú aceptaste ser mi mujer, así que ahora te haces responsable de mí _ dijo Cerem jalándola por el brazo y abrazándola fuerte contra su pecho,

Ella también lo abrazó y disfrutó de su calor y de su aroma, desprendía un olor a whisky y menta, aunque en el fondo se distinguía un leve olor a tabaco, lo que ocasionó náuseas en Fedra, pero Cerem estaba aferrado a ella embriagado con su olor a fresas que no se dio cuenta de lo pálida que estaba, hasta que ella se desplomó en sus brazos.

Él sin perder tiempo, la levantó y la llevó en su vehículo a la Clínica, al llegar fue atendida rápidamente

__¿cómo están mi mujer y mi hijo, doctor?

__ Ya reaccionó, están bien solo se le bajó un poco la presión, pero ella debe guardar reposo por lo menos dos semanas y hacer una dieta baja en sal, tiene los pies hinchados y ella apenas tiene cuatro meses, esto es más común después de los siete,

__Yo me encargaré de que ella cumpla al pie de la letra todas sus instrucciones. ¿Puedo verla?

__ Si en este momento, vamos a hacer el ultrasonido, ¿quiere ver a su bebé?

__ Oh, claro por supuesto _ una emoción embargo a Cerem y entró a la habitación ignorando la cara de Fedra, ella obviamente no deseaba compartir ese momento tan íntimo con él, pero ella había aceptado ser su mujer delante del inspector y Cerem se aprovecharía de eso para mantenerse cerca de ella y de ese bebé que él ya sentía como suyo.

Cerem podía sentir la mirada penetrante de Fedra pero él decidió ignorarla y ver directo hacia la pantalla, estaba embelesado con la imagen del bebé, pero al escuchar sus latidos no pudo evitar acercarse a Fedra y darle un beso en la boca,

Fedra bajó la guardia y sonrió, ella estaba feliz de su presencia, aunque sentía que no era correcto, pero ella ignoraría a su consciencia y solo por hoy seguirá a su corazón

__Bueno mami y papi, su campeón está muy bien, debe seguir las indicaciones que le di a su esposo y nos vemos en un mes.

Ambos salieron tomados de la mano y subieron al auto, Cerem le ordenó al chofer llevarlo a la casa de Fedra, ella no muy convencida le dio la dirección y a los pocos minutos se estaban estacionados en la entrada

Fedra bajó del vehículo, dispuesta a despedirse del gruñón y descansar en la tranquilidad de su hogar, cuando Cerem bajo primero y la ayudó a bajar tomándola de la mano, ella le dio un beso en la mejilla y le hizo señal de adiós con la mano,

Cerem la observó muy divertido y la siguió muy cerca, Fedra se sorprendió cuando lo sintió abrazarla por detrás,

__ Recoge algunas de tus pertenecías, te quedarás dos semanas en mi casa, allá estarás muy bien atendida

__ How, How, ¿acaso has enloquecido?, Yo no voy a ningún lado, en esta casa yo tengo todo lo que necesito, y eso es paz

__¿aquí sola?

__ la soledad es muy buena compañía

__ Pues eso era antes, ahora eres mi mujer y tengo que velar por la salud de ustedes, así que tú decides ¿o te vienes conmigo o yo me mudo aquí con Adalet, su nana y mis escoltas?

__¿qué piensas?, ¿Invadir mi casa?

__ No amor, pienso protegerte a ti y a mi hijo

__ Demente _ susurró Fedra, subió a su habitación y tomó una pequeña valija, metió dos mudas de ropa y algunos artículos de aseo personal

mientras tanto Cerem, recorría la casa y le encantó la calidez que se sentía en ese lugar, ese ambiente es perfecto para criar a sus dos hijos y ¿por qué no tener, un par de niños más?,

Cerem estaba tan perdido, en su vida perfecta imaginaria que no se había percatado de que Fedra tenía muchos minutos escaneándolo con la mirada.

__ Listo, pero pienso que esto es un secuestro,

__ ¿conoces el síndrome de Estocolmo?

__ Idiota _ respondió Fedra arrojandolo un cojín del sofá