Prohibido Amarte "El Desenlace"

2 años después…

Narra Alex

Despierto adolorido en el cuarto de un hospital, no sé cuánto tiempo ha pasado, solo sé que mi amigo está a mi lado.

- Marcus, Marcus amigo – le hablo con voz ronca y casi inaudible, pero él no responde

- Marcus ¿Cómo estás? ¿Estás bien? Amigo háblame – le suplico, pero él sigue inerte, no hay emoción en sus ojos y su cuerpo parece tan solo un reflejo

- ¡Marcus, háblame maldita sea! – grito furioso y mi respiración comienza acelerarse haciendo que personal médico ingrese de inmediato

- Señor Marcus cálmese – me dice un doctor dirigiéndose a mí

- ¿Yo? – pregunto sin entender un carajo

- Señor, es un milagro – me dice y quedo igual de sorprendido

- No entiendo, donde está Sam, Marcus dime donde está ella – le exijo a mi amigo

- Señor Marcus cálmese por favor – me dice una enfermera

- Yo no soy Marcus, él está ahí, Marcus diles – le grito, pero él no se mueve

- Traigan un sedante – grita el doctor

- Suéltenme maldita sea, déjenme, Marcus ayúdame por favor – suplico pero no recibo respuesta y en ese instante entre Elena

- Elena ayúdame por favor – le suplico

- Debes calmarte – me dice ella

En ese instante ingresa una enfermera que inyecta algo en mi cuerpo y rápidamente pierdo el conocimiento

- ¿Dónde estoy? – pregunto al abrir mis ojos y esperando alguna respuesta

- Alex… – me saluda Elena

- ¿Dónde estoy? – reitero mi pregunta

- Estás en el hospital – me responde

- ¿Y Marcus? – le pregunto y ella me observa con sus ojos vidriosos

- Alex él… , él murió – responde con llanto

- Pero si él estaba aquí cuando desperté – le respondo incrédulo de sus palabras

- No se lo viste o creíste ver, pero Marcus murió el día del accidente – responde sollozando

- No eso no puede ser – hablo escéptico

- Qué más quisiera yo que todo esto fuera mentira, pero él no está – responde ella

- ¿Qué paso, no entiendo? – indago lo sucedido

- ¿Recuerdas que ese día yo estaba hablando con Marcus mientras llenaba de combustible mi auto? Pues luego de escuchar esos extraños ruidos me subí de inmediato al auto y conduje rápido a donde ustedes estaban, solo Dios sabe por qué estaba tan cerca y me permitió ayudarte a ti, pero Marcus ya estab… – llora – él ya estaba muerto

- ¿Y por qué estoy Aquí? –Le pregunto

- Alex, hice lo mejor que pude, a lo lejos vi un auto alejándose con gran velocidad, como si estuviera huyendo, así que llegue y te ayude, no considero que fuera un accidente Alex y necesito que me ayudes, los responsables deben pagar – me dice furiosa y llorando

- Ahora recuerdo, Marcus se ofreció a conducir debido a mi estado, luego un auto nos embistió en varias ocasiones lo que hizo que Marcus perdiera el control del volante, yo trat.. Yo trate de ayudarlo – hablo con llanto al recordar los últimos momentos de mi amigo – juro que intente sacarlo, pero no pude – me desato en llanto

- Lo sé, sé que lo intentaste Alex – me consuelo Elena

- Si hubiese sabido que esto pasaría no lo dejaría tomar el volante, esto es mi culpa - hablo

- No, no es así, debes saber que aún queda algo de él con nosotros – me dice con entusiasmo

- ¿de qué hablas? – le pregunto sin entender

- Tengo una hermosa bebe, se llama Aby, bueno en realidad se llama Abigaíl, pero le llamo Aby, tiene 15 meses, debes conocerla, te amara – me habla con alegría

- ¿Tanto ha pasado? – respondo

- Así es, han sido casi dos años – me dice Elena.

Los días pasan y me voy recuperando lentamente, no es algo fácil, pero no es imposible, he tenido dificultad para caminar debido a una fractura en la rodilla, las terapias han sido dolorosas y tortuosas, pero cada día lucho con todas mis fuerzas para recuperarme, necesito resolver mi vida, desde que desperté no he tenido el valor de preguntar por Samanta, he entendido que enamorarme de ella fue el peor error de mi vida, pero que puedo hacer, es un daño ya hecho, solo me queda corregir mis errores, en cuanto a Elena ha estado conmigo todos los días, no solo me ayudo el día del accidente, sino que también me ha ayudado dándome una nueva identidad mientras me recupero y así evitar más problemas, o al menos por el momento mientras doy mi golpe, lo que ha sucedido en mi vida no se quedara así, la muerte de Marcus no será una injusticia, estoy seguro de que el maldito de Robert ha tenido algo que ver en todo este asunto.

Regreso a la habitación, o mejor dicho, me traen de vuelta a la habitación en silla de ruedas después de mi terapia, con fuerza me levanto y me sostengo de la persona que me ayuda para tomar asiento en la cama, esto es indigno, andar con una bata de enfermo me desanima, espero pronto salir de aquí

- ¡hola! – saluda Elena al entrar

- ¡Hola! – la saludo con entusiasmo al ver que trae su bebe en brazos

- Saluda Aby, él es Alex, el mejor amigo de papa – le habla a Aby

- ¡Hola preciosa! – le saludo estirando mis brazos para que Elena me la deje cargar – eres hermosa – le digo después de tomarla en brazos

- Sam tiene un hijo – comenta Elena y me quedo estupefacto

- ¿Qué? – pregunto con duda

- Así es, es unos cuantos meses menor que Aby – me responde

- Podría ser mi hijo – hablo esperando no ser escuchado

- No lo creo, ella se casó con Max y el niño tiene su apellido – me dice ella

- Siempre se casó la muy infeliz – respondo al aire

- Fue lo mejor Alex, lo de ustedes no tenía futuro – dice Elena

- Lo sé – respondo sin un atisbo de emociones

- No quiero volver hablar de samanta – le aclaro

- Me parece bien – responde ella