ESE DEMONIO ES MI AMO (Editando Capítulos)

Los días pasaban y ella sentía ese aroma que Reynaldo dejaba en los pasillos cada noche y en su habitación.

—ese aroma lo siento en mi habitación y no entiendo cómo es que entra si el jefe no está aquí!!!. Siento que mi cuerpo se derrite por dentro.

Adriana entra a bañarse esa noche después de terminar una jornada de trabajo y luego de cenar, pero esta vez debe ser frío porque su cuerpo está inquieto y por ese aroma de su jefe, siente que desea verlo o ese ella cree.

— espero que ahora me pueda dormir sin tener que pensar en ese hombre que además da mucho miedo, Esos tatuajes lo hacen una persona intimidante, pero no sé por qué es que mi cuerpo y allá abajo se me pone así de sentir su aroma y recordar su aliento en mi cuello.

— ¡Adriana! Cálmate y duérmete— se dice ella misma.

Las luces están apagadas y ella está en la cama, en una bata y con pantis azules que es su color favorito.

La puerta se abre silenciosamente y Adriana no se percata de eso.

La sábana de Adriana se está moviendo, se aleja de ella, esa mano tatuada está posando sus dedos sobre las piernas de ella y su cuerpo la estremece.

— pequeña Adriana *susurra Reynaldo*

— mmm *Adriana se estremece al sentir el toque de sus manos*

—sabes quién soy, *le susurra al oído mientras pasó su mano por encima de su ombligo hacia sus pechos*.

—eres mi amo~ mmm~ mi señor

— eres muy obediente— dice un malicioso y sorprendido Reynaldo

Reynaldo se retira de la habitación con la satisfacción de ver el Cuerpo de Adriana todo estremecido y su respiración agitada al tocarlo y más aún, al escuchar la respuesta que dio.

— ah *despierta Adriana y empieza a ver a todos lados* - Dios mío ese sueño se sintió demasiado real

La respiración de Adriana está agitada y al mismo tiempo sorprendida y confundida porque su cuerpo está estremecido y su zona muy humedecida allá abajo y al darse cuenta se sonroja y se va al baño para sentirse mejor y tratar de dormir nuevamente, ya que para ella fue solo un extraño sueño.

— no puedo imaginar que ahora estoy soñando con mi jefe…— si él supiera que siempre está en mente y que hasta ahora mismo lo siento como si hubiera estado aquí.

— no será lo que estará pensando el jefe y sobre todo después de revisar mi cuerpo la otra noche.

Rey, al entrar en su habitación, no perdió tiempo en escuchar y ver a la pequeña, todo lo que él escuchó lo llenaron de satisfacción.

Cómo macho Alfa que es, está acostumbrado a tener lo que quiere y tener a su alrededor a todos y por miedo o lo que sea que sientan las personas están y hacen lo que él diga u ordene.

Pero, en cambio, Adriana, ella es diferente y Rey lo nota con cada cosa que hace para estremecer a la pequeña…

— la verdad nunca había notado a una mujer saboreando cada toque, intimidación y dominación que aplicó a la pequeña Adriana ja, ja, ja es sumamente excitante escucharla decir que soy su amo y su señor *sonríe*

Rey a la mañana siguiente bajó a desayunar y se encontró con Jody en el comedor.

¿— Reynaldo, cariño, no despertaste conmigo, donde dormiste? Reclamaba Jody.

— me quede en el sofá del despacho

— no entiendo cuál es el afán de trabajar tanto en casa, para eso está la empresa y en la casa tú debes descansar.

— He estado con muchos compromisos al mismo tiempo y me hacen sentir agotado.

— bueno, espero verte esta noche en nuestra cama, porque te extraño y ya son varios días sin que me toques.

— de que estos hablas, de cuando a donde tú te aguantas las ganas, conmigo o sin mí, te las quitas.

— déjate de tonterías, no quiero volver a escuchar esas tontas excusas.

— no me interesa, ya me iré a la empresa… Adiós

Jody estaba muy enojada. Ya que al parecer Reynaldo sabe que ella tiene a alguien.

— cualquiera que lo escucha piensa que sabe que tengo a Ray * se preocupa*, pero de todas formas estoy con una gran necesidad de tener un rico … Con mi Ray *sonríe*

Mientras tanto, Reynaldo llega a la empresa y se reúne con Roger para empezar a revisar los trabajos correspondientes a esa semana.

— te noto un poco relajado *lo mira sospechoso*

— estoy igual que siempre * sonríe de lado*

— no me digas que estuviste con la asquerosa de Jody * hace gesto de náuseas *

¡— ja, ja, ja si vieras tu cara!!!

— por favor que asco, cómo pudiste hacerlo con esa mujer *con cara de asco*

— jamás, ja, ja, ja incluso me estuvo reclamando en el desayuno que no estoy durmiendo en la habitación en estos días.

— pero tienes cara de hombre relajado por tener una amorosa noche…

— te lo juro que no es eso, ja, ja, ja, pero luego te diré, solo que he estado meditando y la verdad ayuda

¡— en serio!! Incrédulo, pero le dio el beneficio de la duda*

— voy a pedir un café para continuar con el trabajo

— okay