UN AMOR MAS ALLA DEL DESTINO SAGA 1

Por fin Johanna encontró un tiempo para poder charlar con Amaranta. Se encontró tan ocupada por la filmación que no había prestado la debida atención a su ahijada y le preocupaba que estuviera sobrecargada de trabajo o preocupada por no recibir la invitación de la universidad todavía.

Además, la había visto algo decaída y no sabía por qué era. La notaba algo retraída y pensativa hacía ya algunos días, aun cuando no estaba afectando su trabajo en la grabación de la película, pues estaba trabajando de manera muy profesional, a la altura de una actriz de larga data…

—Amaranta, ¿cómo te has sentido estos días?

—Bien, no he encontrado ningún problema. El guion me parece muy bueno y fácil de interpretar con la ayuda de la profesora Rocio.

—¿Está segura de qué universidad quieres?

—Sí, ya he hablado con Izan sobre eso y estoy segura de que será la universidad capital.

—¿Amaranta te gusta Izan verdad?—Amaranta se sorprendió por la pregunta tan directa de Johanna; aún de esta manera no negó ni afirmó nada.

—Amaranta, solo te puedo decir que tengas cuidado; te apoyaré en lo que decidas, pero no quiero verte sufrir en el futuro, por el amor que nunca lograste tener.

Después de decir esto, alguien vino a donde se encontraban y llamó a Johanna, quien se mantuvo muy ocupada. Únicamente había conversado con Amaranta por un tiempo cuando alguien más vino a preguntarle algo. Johanna no tuvo tiempo de hablar mucho, por lo que le pidió Amaranta que leyera el guion sola.

Como Sandra estaba allí y únicamente haría una aparición especial y su agenda estaba muy apretada, el horario de filmación se cambió en el último minuto.

Amaranta no tenía ninguna escena hoy, por lo que siguió al equipo de filmación hasta donde Martin y el personaje de Sandra, Emma, iban a filmar su escena. Alguien del departamento de utilería ya había preparado los materiales para la escena. La maquilladora de Sandra, a quien había traído con ella, hizo su look. El artista hizo maravillas, ya que Sandra se veía exquisita. Literalmente se veía fuera de este mundo.

Todos en el set estaban ocupados.

El clima era bueno. Era un día soleado y ventoso. Los cielos sobre ellos estaban despejados, y había nubes blancas esponjosas que parecían algodón de azúcar.

—Amaranta, ¿quieres charlar conmigo? Rocío Andrade le preguntó a Amaranta. No tenía intenciones de ver esta parte de la película, y se sentía un poco fuera de lugar. Es como si le trajera recuerdos que no deseaba en este preciso momento tener en su cabeza.

—Claro."  Respondió sin titubear Amaranta, pues también tenía algo que preguntarle a Rocío.

Se encaminaron hacia un café cerca del lugar de la filmación, donde pidieron un café para Rocío y un helado de fresa para Amaranta. Ahí comenzó Rocío a decir: —Amaranta, en comparación con el rendimiento tuyo y de Héctor ayer, has mejorado mucho hoy".

Amaranta respondió calmadamente. —Héctor y yo leímos el guion juntos ayer.

—Eres bastante trabajador, Amaranta—Rocío dijo suavemente. —¿Escuché de Johanna que la has tomado como tu madrina?

 —Sí. Cuando la abuela y yo llegamos por primera vez a la capital, la madrina Johanna nos acogió. Cuando estaba preocupada por las facturas médicas de mi abuela, ella también fue quien me dio esta oportunidad. La madrina Johanna es mi benefactora". —Con toda sinceridad respondió Amaranta. Rocío se sorprendió por lo que Amaranta había dicho. Nunca imaginé que se habían conocido de esta manera Amaranta y Johanna.

Rocío se sintió un poco celosa de Johanna, al pensar en la forma en que se comporta Amaranta; es una chica muy trabajadora, adorable y sensata para su edad. Es verdad que los hilos de la vida están predestinados a unir a las personas. ¿Ella no estaba destinada a ser feliz alguna vez? Estaba enamorada del mismo hombre por casi 20 años y él aún no la aceptaba. ¿Él jamás olvidaría a esa mujer? ¿Continuaría siendo solo la sombra del hombre al que amaba? Rocío decidió probar el encontrar a alguien más mientras aún podía dar a luz.

Rocío, después de reflexionar en sus cosas, continuó charlando con Amaranta: —Por lo que puedo observar tu actuación es intuitiva, pero creo que todavía necesitas mejorarla", comentó Rocío Andrade.  Le dio Amaranta una valiosa lección de actuación mientras disfrutan de un café y un helado.

Amaranta. Ganó mucho durante su conversación. Aprendió sobre la actuación y sobre sus puntos débiles en los cuales tenía que mejorar. Justo en el momento en que se encontraban charlando tan amenamente, sonó el teléfono de Rocío Andrade, que estaba sobre la mesa.

Parpadeando en la pantalla había un nombre, 'RAF'.

Amaranta reacción al ver el nombre de contacto que se mostró en el teléfono sobre la mesa; quizás únicamente era una coincidencia macabra, pero no sabía qué pensar. Cuando respondió Rocío, —Hola, RAF, sí estoy en una grabación—, se levantó de donde se encontraba con Amaranta y le hizo señas de que saldría a responder la llamada. No. No, esto era solo una absurda coincidencia; estaba suponiendo demasiado, si seguramente era eso.

Quizás la película sobre Dulce Akotegi y Martin Yaregui había plantado tales pensamientos en su mente. Amaranta, de forma inconsciente, escribió la palabra 'RAF' en la superficie de madera de la mesa.

¿Quién era el RAF en el diario de su madre?

¿Cuál era el nombre completo de Raf? ¿Eran sus iniciales, un apodo o su apellido? ¿Cómo saberlo?

Rocío regresó y encontró que Amaranta se encontraba pensativa. "Rocío Andrade, ¿estás bien"? ¿Fui demasiado severo antes? Rocío preguntó, preocupado. Cuando se sentó junto a Amaranta, le tocó la frente suponiendo que quizás tendría un poco de fiebre debido al arduo trabajo de la filmación.

Amaranta. Se sorprendió un poco cuando sintió la fría mano que tocaba su frente y reaccionó de inmediato, abandonando sus pensamientos. Sintió que había muchas cosas que no se podían explicar. Pero, ¿qué eran exactamente? Ella no podía decirlo. Sintió que ninguna palabra podía describirlos perfectamente.

—Señorita Andrade, estoy bien. No se preocupe por mí. Solo pensé en el diario de mi madre".

Rocío asintió. —¿Qué hay con el diario de tu madre?

—Me preguntaba si mi mamá y mi papá ya están reunidos en el otro mundo— Respondió Amaranta.

La expresión de Rocío se puso rígida. No sabía cómo consolar amaranta. Únicamente pudo hacer compañía a Amaranta mientras se sentaban en el café en silencio.

—Después de unos minutos, Rocío Andrade levantó la vista cuando los cielos se oscurecieron gradualmente. Por lo cual le dijo a Amaranta "Regresemos". Levándose ambas y marchándose de aquel lugar. Donde no únicamente. Una no aprendió sobre actuación, sino que ambas reflexionaron sobre su vida actual.

**El rodaje ya había terminado cuando regresaron al set.

Sandra no tuvo muchas escenas en la película. Había venido y se había ido a toda prisa. Cuando el director Daniel Exxo vio que Amaranta había regresado, la revisó,—Amaranta, ¿cómo te sientes? Si estás bien, filmemos la escena de las luciérnagas ahora".

—Amaranta, entró al camerino de inmediato y se cambió. No había horarios fijos a la hora de rodar. Podrían cambiar en cualquier momento. La ropa y los accesorios que los personajes llevaban para las diferentes escenas eran muy importantes.

Por eso había diseñadores de vestuario en el set cuyas tareas específicas eran administrar la ropa usada. Estas personas ya habían planeado qué tipo de ropa debía utilizar la protagonista femenina para cada una de las escenas.

Si el diseñador de vestuario era poco profesional o mediocre, era probable que surgieran problemas. Estos problemas incluyen que la protagonista femenina emplee un par de aretes para una escena, pero no para la siguiente escena. También puede haber algunos pequeños defectos. Cosas simples para los mortales, pero no para un director tan estricto como lo era Daniel Exxo.

El progreso de la filmación fue bastante apresurado.

—Teniendo en cuenta la disponibilidad de Héctor del campo, el director Exxo filmó escenas con Héctor y Amaranta. No, antes de organizar el orden de las escenas.

Héctor, para cuando lo llamaron para esta escena ya había filmado varias escenas previamente. Las emociones para esta escena también fueron drásticamente diferentes; en este punto Héctor estaba tan cansado que ni siquiera tenía la fuerza para hablar. —Dulce, estoy tan cansado. Rápido, dame un poco de cariño—dijo Héctor sin vergüenza mientras entraba en el vestuario de Amaranta.

—¿No te quedan muchas escenas?—preguntó Amaranta. Héctor asintió. Solo le quedaron escenas con Dulce.

—Todavía hay bastantes. Todavía tenemos que filmar la noche de bodas— Héctor de repente estaba un poco nervioso. Iban a filmar la escena de la noche de bodas. Era una joven inocente. ¿Cómo deben filmar la escena para que se vea bien?

Amaranta estaba nerviosa cuando escuchó a Héctor mencionar la noche de bodas.

Se había olvidado por completo de la escena de la noche de bodas en el guion…

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