Amor Traicionero

Por otra parte en la ciudad de Tokio en las izakayas, un bar muy frecuentado, uno de los trabajadores había un joven guapo alto de estatura, su piel es blanca, ojos grandes de color verde claro y labios finos, una sonrisa encantadora con una dentadura alineada su cuerpo escultural bien tonificado a simple vista un extranjero trabajando en un bar japonés, él trabaja como camarero del bar donde frecuenta Hanae, había observado en particular a tal hombre que era insípido, nada de gracia ante muchos.

En particular le llamó la atención algunos cambios repentinos.

Esos cambios se debían cuando bebía más de la cuenta, algunos tienen estos, en particular lo que llamó su atención fue que sonreía, de una manera increíblemente sincera sin malicia y era atrevido que cuando está sobrio, sentiría vergüenza si supiera como se veía, pero este no lo sabía además es como una flor escondida a quien solo pocos pueden verlo.

Esas ropas anticuadas que cubren su cuerpo le dieron ganas de despojar cada capa así como a una cebolla.

Al momento esperaría a que su relación se cultive de a poco.

-

A sus colegas les encantaba molestarlo, aprovechándose pues parecía que no era muy agradable estando sobrio.

Asimismo dejó de ver el espectáculo, de manera que, comenzó a interesarse en Hanae, haciéndose cercano a él al principio como amigos, en pocas palabras había intención de conquistar.

Moretti Shota Herald estudiante de la universidad T en derecho quien trabaja a tiempo parcial en un bar, pese a ser un chico de muchos privilegios dado por sus padres, prefiere ganar algo de dinero extra por diversión, es un joven guapo, sus ojos verdes cautivantes hipnotizan a cualquiera que los viera, aunque se pone lentes de contacto negros que le hace lucir aún más pintoresco por su piel blanca.

Además de tener el peló rubio cenizo, todo un cazador, es un jugador de chicas y chicos si hay oportunidad, sin dejar escapar a sus presas, aunque nunca pudo llegar más allá de la conquista por ciertos problemas.

Se disfraza para trabajar ya que no le gusta llamar la atención a la hora de trabajar porque muchas están pidiendo su número y es una molestia aún así nunca pasa desapercibido.

Sus genes se deben a que su padre Italiano y su madre japonesa y los abuelos de quienes heredo toda belleza, su madre había vivido una temporada en Italia alli fue que se conocieron con su padre, dado que el color de sus ojos no es nada similar al de sus padres; es parte de su abuela paterna.

Shota que había estado viendo a Hanae siempre que tiene la oportunidad para entablar una conversación lo hace de igual manera con sus compañeros de trabajo, esta vez se encontraba solo, un momento perfecto para iniciar una conversación.

Hanae, lo vio acercarse lo había visto en el baño cuándo se ponía los lentes de contacto, deslumbrado por sus hermosos ojos, en ese momento pensó que era genial al ser afortunado de verlo.

Esa vez solo se vieron y no hablaron, ahora mismo al estar en la barra ya era una oportunidad para verlo de cerca, desafortunadamente no pudo contemplar esos ojos esmeralda.

Las primeras impresiones fueron diferentes para ambos.

Hanae no es un tipo muy hablador, pero fue fácil disponer una conversación con Shota, por primera vez sintió algo como un gusto a algo, como una comodidad.

Hablaban de lo superficial que hizo en sus trabajo, porqué le gustaba esto y aquello, haciendo una conversación cómoda, aunque no fuera del típico que da respuestas las conversaciones fluían sin esfuerzo.

En las muchas pláticas se enteró que Hanae estaba casado, lo supuso ya que vio su anillo, pero a decir verdad no fue un problema eran amigos, que podría pasarle ambos no hacían nada malo es un gusto pasajero.

Siempre platicaban unas horas después del trabajo, salvo cuando estaba con sus colegas o cuándo no aparecía en el bar.

Pensar que llegaría el día en que fueran conscientes de que algo estaba sucediendo entre ellos.

Hanae nunca fue de los que contaba sus cosas, a menos que fueran cercanos, Shota era diferente se interesaba en su vida no refutaba o se molestaba mas bien parecía sorprendido era alguien a quien podría sentir un apoyo en verdad en medio de tanto dilema encontrar un buen amigo ya es increíble.

-

Shizuka no es muy apegada a su relación de esposa, ella siempre fue alguien que pareciera libre, se preocupaba la respuesta es si, pero no era que se interesase por él, tal vez fue por eso que el sentimiento fue diferente, lo de casados no era mas que una decoración con certificado incluso para ellos mismos.

Lo cierto es que Shota causo un cambio en su vida rutinaria haciendo un mundo diferente; cuando salían a almorzar juntos Shota es más bien alguien muy diferente hablaba con un tono grave su voz increíblemente atractiva, embelesado por el timbre que a veces se perdía al escucharlo y más cuando iban al karaoke, ¡increíble!, debería de debutar como cantante.

Todos fueron encuentros casuales.

A medida fueron siendo por costumbre, comer salir a lugares poco frecuentes.

Y pensar que sucedió en aquella noche.