Para Alana el día de su matrimonio iba a ser el día más feliz de su vida, allí con su vestido de novio se fue a encontrar con su prometido antes de la ceremonia, pero lo que no espera era encontrarlo con su hermana, algo que hirió profundamente su corazón.
Ella huyó de su boda y se fue a un bar, donde conoció a Ricardo, quien escucho atentamente la desgracia por la que ella había pasado. Él le propone una manera curiosa de vengarse de su exprometido, Ricardo también necesita una esposa, para eso él le pide que se casen, así que Alana acepta.
¿Podrá ambos llevarse bien en un matrimonio que fue concertado por intereses propios?
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capítulo 5
Señorita le recomiendo que haga su trabajo y no se dedique a buscar favores de su jefe.
Ricardo: señorita Santos, le pido disculpas por esta propuesta realmente no la revise, se la encargue al vicepresidente, yo mismo volveré hacer la propuesta podrá reagendar una cita.
Alana: por supuesto, cuando tenga la propuesta lo espero en A.N Y D,puede llamar a mi secretario para la cita.
Ricardo: gracias
Horacio: señorita Santos la puedo invitar a almorzar como una disculpa.
Alana: no, y soy señora no señorita
Horacio: oh como en las noticias salio el escándalo de su boda fallida, pense…
Alana suspira: debería ver menos noticias y dedicar más tiempo a su trabajo, permiso.
Al salir de la sala de juntas se puede sentir un fuerte golpe en la mesa y unos gritos de Ricardo.
David: hermosa estuviste genial
Al regresar a la empresa Alana termina unos pendientes y va al supermercado hacer compras ya que Ricardo no tiene nada en su alacena y refrigerador.
Llega al edificio estaciona y sube con las bolsas de compras.
Va al baño después de esa ducha recoge su cabello, se pone una camisa de seda que le cubre sus nalgadas y empieza a cocinar, filete con verduras y de postre un flan casero.
Ricardo entra al penthouse y un delicioso aroma le llama su atención, va a la cocina y de espalda ve a Alana terminando de cocinar, esa camisa de seda invita a la imaginación, se acerca y pone su cara en su cuello, pasando sus manos por debajo de la camisa.
Alana: te gusta?
Ricardo: mmmm me encanta realmente mi esposa es grandiosa…. Besa su cuello.
Alana se gira: la cena está pronta
Ricardo: la tengo en mis brazos
La sube a la mesada y de un momento a otro la penetra ahí mismo…
Ricardo: eres realmente hermosa
Alana: y tú mi sexi y lindo desconocido
Los jadeos no se hacen esperar haciendo que ambos se pierdan completamente.
Después de ese rapidito, ambos cenan.
Ricardo: eres una caja de sorpresas, hermosa, inteligente y talentosa
Alana ríe: y tú un casanova
Ricardo: lo dices por Hana?
Alana: que debo esperar de ella?
Ricardo: siempre se insinúa, pero no es mi tipo, ahora soy un hombre casado.
Alana le gusto escuchar eso…
Mientras todo va bien con ellos en Aruba las cosas no son color rosa….
Arturo: que pretendes Dorothy
Dorothy: que más ser tuya
Arturo: a mí se me fueron las ganas, voy a caminar.
Arturo estaba caminando por la playa perdido en sus pensamientos se sienta mirando el atardecer, como fue tan idiota de dejar a Alana por Dorothy, él conoce muy bien a esa mujer sabe que no tiene escrúpulos y odia a su hermana, desde que la conoce sabe que es una mujer fácil, en cambio Alana es dulce, hermosa e inteligente. En sus pensamientos esperará a que Dorothy tenga el bebé y después irá por Alana, ella tiene que perdonarlo.
Pero por el momento eso es imposible, justo cuando va de regreso una hermosa morena se le cruza por el camino, y como es costumbre de Arturo le coquetea y tienen sexo en un lugar oculto en la playa.
Al llegar a la habitación del hotel Dorothy está en el baño vomitando, los síntomas del embarazo son fuertes y no la dejan en paz.
Arturo: te encuentras bien?
Dorothy: no
Arturo: mejor regresemos, tu no puedes salir del baño debido a los vómitos y me estoy cansando.
Dorothy lo mira feo: está bien que regresemos.
Al otro día toman el Jet de regreso, al llegar van a la casa donde vivirían Arturo y Alana.
