La familia Collins .
Cristina Castillo siguio cuidadosamente a Raúl por el pasillo.
Sus ropas nuevas y suaves, su hermosa piel blanca y sus rasgos elegantes parecian desentonar con esta villa sombria.
—Eres estudiante de medicina y deberias saber cémo atender a los pacientes... . — Pero, soy Dermatologa..
argumento llamando la atencion de los ojos de Raul. Su voz se debilitdé y continuó siguiéndole.
Cristina levantó la vista. Delante de ella habia una gran habitación,la puerta estaba abierta de par en par y el interior estaba completamente oscuro en una mujer muy miedosa Así que lo pensó demasiado para poder ingresar.
Al hombre que iba a cuidar era a Edwin Collins el prometido de su hermana, Edwin era un hombre muy guapo inigualable frente a todos los demás Con solo 25 años tenía su propia aerolínea y era el número 1 piloteando.
Sonó la fría voz de Raul
—Hoy es la noche de bodas de usted y el joven amo. Espero que lo cuides bien.
—¿Qué noche de bodas? —pregunte conmocionada.
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Déjame quedar.
Cristina apretó los dedos y entró en la habitación con rostro solemne y conmovido. Edwin fue nombrado el soltero más deseado de Fort. Era alto, musculoso y tenía un aspecto sublime. En ese momento, estaba sentado en la cama con la cabezaligeramente baja, la frente tapando sus profundos ojos y todo su cuerpo lleno de enajenación e indiferencia.
—¿Querías... querías verme?
Edwin la miró y le dijo
— ¡Recoge tus cosas de una vez y vuelve con tu familia!
¡Como era de esperar!
Critinaa sabía que la obligaría a marcharse, pero no esperaba que fuera tan despiadado.
Sonrió irónicamente
—¿Qué estás diciendo? Ahora somos marido y mujer. ¿Cómo puedes enviar a la novia de vuelta con su familia en nuestra noche de bodas?
— ¿Marido y mujer? ¿Novia? ¿Crees que te lo mereces? La hija mayor no quería casarse, así que le pidió a una hija ilegítima que ocupara su lugar. Una manzana no cae lejos del árbol.
Los ojos de Edwin eran fríos y severos. La espalda de Cristina estalló inmediatamente en un sudor frío. Se quedó sin habla.
Se obligó a calmarse. Le miró con el rostro pálido y triste.
—Por favor, no me eches. Mi padre no me perdonará... Soy médico y tu cuerpo aún necesita recuperarse. Te prometo que cuidaré bien de ti.
Cristina tiene un aspecto exquisito y hermoso. Su par de ojos almendrados eran rojizos mientras lloraba. Su aspecto delicado y conmovedor hace que la gente quiera estrecharla entre sus brazos para aliviar su Pena.
Pero Edwin se quedó inexpresivo.
—Tengo muchos sirvientes, así que no hace falta que cuides de mí. Cristina, no soy una buena persona y no tengo compasión. Tus trucos no me sirven de nada.
Los ojos de Cristina eran oscuros. La miró con la cabeza gacha y de repente cambió el tono.
- Mira Cristina soy un hombre de negocios podemos hacer un intercambio te podría dejar quedar pero tú que tienes para darme.
Sus manos comenzaron a sudar pues no tenía dinero y menos la palanca de su familia para decir que por medio de ellos podría adquirir el poder se quedará, aún con sus manos temblando se quedó en silencio no esperaba que él fuera un hombre tan difícil de tratar.
- Dime Cristina, que tienes para darme.
Lo pensé muy bien y no le queda de otra que estar con él al fin de cuenta ya era su esposo frente al mundo y legalmente. Con sus manos temblorosas bajo el cierre de su vestido dejando al descubierto su desnudez.
- entregaré a ti mientras me permitas quedarme. Seré solo tuya. Podrás hacer todo lo que quieras que haga.
aún con su cuerpo temblando se acercó a él y pasó sus manos sobre sus hombros y lo miro fijamente a los ojos acorto la distancia que tenían.
Edwin no podía creer la reacción que había tenido la joven, Aunque estaba jugando con ella nunca se imaginó que ella tomara la iniciativa desvestirse Pues antes de comprometerse con Mariana mandó a investigar a toda su familia y entre esas cosas había información de Cristina una joven muy humilde y estudiada que hacía todo lo posible para poder obtener el título que tiene.
- Cristina, sabes que ahora soy discapacitado y no puedo hacer nada, ¿verdad?.
sintió que se le helaba el corazón Pues no había manera posible de poderse quedar.
Los malos comentarios se deben desechar
Los que no entiendan pues que se retiren y ya .
Y dejen de hacer malas vibras /Tongue/