Muñecas De Porcelana

MÁS TARDE

Estaba en casa pensando que obviamente iría, pero no tenía que ponerme para ir a un restaurante de tal lujo. Iba a tener que endeudarme para comprar un vestido apropiado ya que mi ropa no era de una marca lujosa y era demaciado común.

Antes de perder mi cordura alguien toco mi puerta, observé por el ojo mágico de la puerta y era un hombre en traje con un paquete en los brazos. Abri la puerta y el hombre me lo dió.

- Es para usted señorita Kendall- dijo aquel hombre.

-Pero yo no encargue nada oiga- Dije despistada.

El hombre sonrió al ver mi expresión, ahí fue cuando entendí que Lucas quizas lo habia enviado, y asi era ya que al leer la tarjeta sobre aquella caja venia una dedicatoria.

"Este vestido es único, solo hay uno en el mundo así como tú lo eres para mí"

Me sonroje y abrí la caja, y no podía creer el hermoso vestido que estaba viendo.

...

...

Nunca había visto algo tan hermoso y justo cuando estaba a punto de cerrar la puerta llegaron más de 10 personas y me hicieron ir con ellos.

Me llevaron a un spa, me maquillaron y arreglaron mi pelo. Me trataron como una persona adinerada cuando solo tenía en mi cuenta del banco menos de 1000 dólares.

Me puse el vestido y no podía creer lo hermosa que me veía.

Pero antes de dejarme ir me colocaron el famoso collar "El corazón del mar".

Sabías lo caro que era ese collar así que al principio me resistí.

- Realmente no merezco esto- Dije a todo el equipo de estilismo, pero sabía que solo hacían su trabajo.

Agradecí a cada uno de ellos, y Lucas al ver lo que hacía me interrumpió.

- Ya se les pago, no debe agradecerles - Dijo fríamente mientras me abrazó por detrás.

Fingi que sus palabras no me importaron ya que podían hablar mal de el sí yo le llevaba la contraría. Era casi la hora de ir al restaurante cuando nos fuimos en el Ferrari blanco de Lucas, ahí fue cuando me di cuenta con el tipo de hombre con él que estaba saliendo. Condujo hasta aquel lujoso y gigante restaurante, bajo el primero y me abrio la puerta. Extendió su mano y me ayudó a bajar.

- No dejes que ningún hombre se te acerqué, por qué lo mataré- Dijo Lucas besando mi mano cuando bajé de su ferrari.

- Solo tengo ojos para tí, cariño- Dije sonriendo y sintiendo que sus palabras no eran un broma.

Al llegar al restaurante noté lo extravagantes que eran los ricos, y en cierto sentido me sentí inferior aún que mi belleza natural superaba a la mayoría de mujeres de mi edad. Lucas noto mi nerviosismo y me besó.

- Cariño, no sientas nervios-

- Al besarme me dan más - Dije sonriendo.

El me tomó de la cintura y caminamos hasta donde era la mesa donde nos sentaríamos. Saludé a su padre Christopher Winslow y a la esposa de su padre Aylen quien era una mujer casi de mi edad, pero con cirugías plásticas en los pechos y glúteos. En su rostro maquillado se notaba una cicatriz en su pómulo izquierdo.

- Padre, ella es mi novia- Dijo Lucas antipático ante su padre y madrastra.

- Por lo menos tendré nietos bonitos- Dijo su padre mirándome las piernas.

Lucas miró molesto a su padre y le volteo los ojos. Mire a Lucas y noté lo furioso que estaba así que lo tomé de la mano.

En ese momento su padre se paró y alguien le dió un micrófono:

- Los he reunido a todos para darles un anuncio importante, es un honor decirles que Lucas Winslow ha sido ascendido a Presidente de Skyblue-

Mire sorprendida a Lucas, así que por eso me había traído, era un día importante para él.

Se levantó Lucas y tomó el micrófono.

- Le dedicaré a esta empresa mi lealtad y trabajare para que seamos la empresa más importante del mundo-

Al verlo hablar con tanta seguridad me comenzó a latir el corazón aún más fuerte que antes.

-Quiero aprovechar que están todos aquí para hacer esto- Dijo Lucas mientras se arrodillaba y ponía delante de mi un anillo con un diamante en forma de corazón-¿Te casarías conmigo Kendall?.

Me quedé atónita y me levanté.

- Claro que si- Dije emocionada mientras el ponía el anillo en mi dedo.

En cuanto tenía el anillo en mi dedo, lo abraze y llore de la alegría.

- Te amó- Dijimos al mismo tiempo.

Justo cuando dijimos eso alguien entro al restaurante y gritó.

- No te dejare tan fácil el camino-

Al voltear a ver quién era, cubrí mi boca y me paralice.

- Kendall, te ayudaré a no cometer ese error-

Saco una pistola y apunto a Lucas. Y justo cuando disparó intercepte la bala.

Continuará...

En el siguiente capítulo sabrán quién fue el sujeto que entró al restaurante lujoso.

Si les está gustando apoyenme con su voto y comentario, los estaré leyendo.

Está novela está inspirada en un sueño.