Mi madre abusó de mí durante toda mi vida, mi hermana, me quito todo lo que tenía, incluso al único hombre que amó. Nunca tuve un minuto de paz en mi vida, solo soledad, y tristeza.
Mi hermana enferma después de su divorcio, pagué su cirugía como todo lo que pedía siempre, pero nunca imaginó que yo sería la donadora obligada, para el riñón que necesitaba. Así mi madre me lleva a la muerte para cobrar mi seguro de vida y conseguir mis dos riñones para mi hermana
Por fortuna regresé en el tiempo y ahora haré hasta lo imposible por cambiar ese miserable destino que sé que me espera si me quedo al lado de mi hermana y de mi madre. Ya no vivirá más en ese lugar lleno de miseria y pobreza en el que la tenía su madre. Luchará por ser alguien en la vida. Puede incluso llegar a conocer él al mor.
*Una novela de lucha por salir de la pobreza, ser alguien en la vida y conseguir lo que se quiere, sin dejar que nada se interponga en lo que se desea, probando que cuando se quiere algo se puede conseguir
NovelToon tiene autorización de Cristian Xoan para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
¿DONDE ESTA EL DINERO?
Mariana estaba sumamente preocupada por cómo conseguiría el dinero de la cuenta del Banco que ella misma había sustraído para poder pagar el soborno para que aceptaran a su hija mayor en el colegio privado adscrito a la Universidad. Donde la acababa de inscribir. No, solo eso, sino que también había ido a buscar a la. Del abuelo de su esposo para que él se encargara. De solicitar. Al director de la escuela. Una plaza para su hija
Cuando su esposo se enteró de que ella había ido a buscar al antiguo general. Casi la querría matar. Para él ese señor representaba como si fuera su padre. Su mentor. Un gran hombre al cual respetar. Él nunca se hubiese plantado para ir a pedirle un favor tan insignificante como ese, pero ella, por su hija, era capaz de cualquier cosa.
Y no conforme con haberse ha gastado los, 50000 dólares que estaban guardados en la cuenta del Banco desde hacía casi. Años. Fue a buscar a los antiguos amigos de su marido que aún estaban en el ejército y pedirles prestado dinero. Diciéndoles que estaban pasando unos momentos muy difíciles. Y todo para comprarle ropa, zapatos, bolsos y artículos diversos a Haydée.
Realmente había sobrepasado los límites de cualquier cosa razonable Mariana y sabía que Jordan no la iba a perdonar. Él tenía una alta moral sobre las cuestiones económicas. Y no era solamente un centavo; lo que tenía guardado era mucho dinero.
Además, ahora debía demasiado dinero a todos los amigos de Jordan. Tenía que hacer cuentas para saber exactamente a quién. ¿Y a cuál de todas esas personas tenía que pagarles?
Desde un principio había pensado en deshacerse de todo lo que tuviese que ver con la escuela para que Suri no tuviera oportunidad alguna de estudiar. De estudiar incluso cuando terminó la escuela. Su hija mayor. También se deshizo de sus libros para que no tuviera de donde estudiar. Pero nunca imaginó que ella misma estaría acabando su propia tumba al hacer estas cosas.
Estaba absorta en sus pensamientos cuando entró Haydée a la cocina a proponer algo
— Madre porque no vas y le llevas un buen te a mi padre y te disculpas por la pelea que tuviste con el ahora u así se reconcilian, antes de que ínsita en lo del dinero
—Eso es una buena idea, será mejor que lo prepare para dárselo antes de que se duerma
—Ahora se está duchando, así que tienes tiempo.
—Sí, lo haré rápido
Después de eso salió de la cocina Haydée, y fue a la pequeña habitación de Suri, para ver qué es lo que estaba haciendo. Si no tenía libros que estudiar, no entendía por qué se encerraba tan temprano
Llegó y notó que no se podía abrir la puerta como siempre, así que llamó a Suri, y no recibió respuesta, y gritó
— Abre la puerta, hermana, yo sé que también estás leyendo cosas que no debes releer, por eso no quieres que abra o empuje la puerta a la para verte, no quieres que nuestros padres se enteren de lo que estés haciendo, vamos. Vamos entrégame lo que tienes en las manos. Y yo no les diré nada…
Lo único que ella quería era que abriera la puerta a base de mentiras
Imagino que de inmediato se presentaría tanto Mariana como Jordan a ver qué era lo que estaba sucediendo. Cuando ellos llegaron, la puerta se abrió. Suri escondía algo detrás de ella y sí era un libro. De inmediato, Mariana le exigió que lo entregara. Te niego en rotundo a mostrárselo.
—No te lo mostraré a ti
— Hermana, vamos a entregármelo a mí y yo lo guardaré para que no tengas problemas, solamente les diré qué es.
—A Suri, si no es algo que sea malo, por favor, muéstramelo. Pero si no tenías ningún libro en casa, ¿qué es lo que tienes ahora en las manos?—preguntó Jordan
— A ti, si te voy a decir que es. —De inmediato le mostró que era un libro de la escuela.
— Niña malcriada, ¿cómo es que conseguiste esto si no tenías dinero? Y si tenías dinero, dame lo que te ha sobrado de haber comprado este libro. De inmediato, dame el dinero. —Protestaba Mariana.
— No tiene por qué entregarte nada, el dinero que se gastó fue mío —respondió Jordan
— Cuántos más tienes muestra. Muéstrame todos los libros que tienes y dime cuánto dinero te gastaste, debo de ser una gran fortuna, dime de dónde conseguiste tanto dinero para comprar.—Mariana seguía insistiendo en la cantidad de dinero gastado.
— Tú dime cuál libro quieres ver y yo te lo voy a traer para. Enseñártelo.
— Dime dónde los tienes—Mariana quería saber dónde estaban para ir y venderlos de nuevo.
— En un lugar seguro, así que no esperes que te diga dónde están o qué. Los muestra todos.—Dijo Suri
— Está bien, Suri, no te preocupes en donde los tengas, está bien mientras estudies, no hay problema donde estén. Dime si necesitas más dinero para comprar algún otro libro— le dijo su padre—, él sabía que seguramente los había comprado donde la chatarra y libros viejos, ya que olían a eso.
— Pero cómo puedes dejar que se gaste una fortuna en libros, así en libros que ya no le sirven para nada.—Mariana no paraba de dar la tabarra.
— No pudo haberse gastado mucho dinero que no te das cuenta de que es un libro de segunda mano que seguramente fue a comprarlos a donde venden la chatarra. ¿A dónde tú misma fuiste a vender? Sus otros libros.
Mariana, al escuchar estas últimas palabras ya. Quise seguir hablando porque sabía que si seguía insistiendo, volverían al mismo círculo vicioso donde Jordan le preguntaría por el dinero del Banco.
*****APOYAME CON LIKE\, COMENTARIOS Y ESTRELLAS PARA PODER SEGUIR ESCRIBIENDO****
