Rehén De Un Mafioso

Después de que mis ojos se acostumbraron a la oscuridad, miré hacia todos lados, tratando de ocultar mi desesperación, comencé a dar pasos ligeros por el lugar, palpé las paredes y encontré algo extraño, ni siquiera podía emitir un sonido, incluso mi respiración fallaba. . , por lo que pude ver era una guillotina, parece que tiene una hoja muy afilada, ya que terminé cortándome por accidente.

__Lo bueno es que parece que mi muerte será rápida, cuando esa cosa golpee mi cuello moriré en un segundo, que maravilloso – bromeo para mis adentros mientras me siento en el frío suelo.

Me abracé las rodillas y lloré mucho, hoy realmente no es mi día de suerte, de repente siento un calor increíble, me siento como si estuviera dentro de un horno, las paredes estaban muy calientes y el piso a pesar de que era de cemento. Todavía hacía mucho calor, me levanté y me alejé de las paredes, según mis cálculos creo que estoy en el centro de la habitación.

__No podrían prender fuego conmigo aquí, ¿verdad?

Hablé entre lágrimas, porque acabo de recordar que vi madera debajo de esa cosa, fuego+hierro\= infierno, lloro desesperada sabiendo que voy a morir quemado, miro la guillotina y tengo ganas de tomar la mía. vida, pero al segundo siguiente dejé de pensar en ello y me concentré en sobrevivir.

__Este tipo, Richard Monroe, se ha ganado un enemigo, me dije mientras intentaba sacudirme con las manos.

Hilos de sudor corren sin parar por todo mi cuerpo, en este punto ya siento mi cuerpo arder, “Mamá y papá, nos vemos pronto”, pensé al ver las paredes de hierro ponerse rojas, puro fuego, me Me niego a aceptar que moriré así de una manera tan miserable, más aún sin merecerlo.

Pensando en eso caminé con dificultad hacia la guillotina, pues mis sandalias al ser de plástico con algunos detalles de acero me quemaban los pies, con mucho esfuerzo me quité el vestido y usando la hoja de aquella cosa, primero me corté los pies. vestido hacia un lado, la mitad y luego hice un gran corte vertical en la parte inferior del vestido.

Aún con mi cuerpo ardiendo aún más porque solo vestía lencería, regresé al centro del “horno” e inmediatamente comencé a organizar mi cuerda de salvamento, tomé la parte superior del vestido, junto con el velo, y lo doblé en cuatro partes., lo coloqué en el suelo y me paré encima de la tela, luego tomé la parte de abajo y me la tiré encima, como una capa.

__Puede que incluso muera, pero moriré luchando- me dije mientras analizaba mis propias acciones.

“Que Dios me perdone”, pensé mientras caminaba hacia la guillotina, me voy a suicidar.

Antes de llegar a mi objetivo, escucho un gran ruido, suena como si alguien estuviera apagando el fuego, así que rápidamente vuelvo a donde estaba antes y me quedo mirando la puerta.

Estando en esta situación lloré recordando a mis padres, ellos murieron en un accidente automovilístico, el auto se incendió y solo quedaron cenizas de ellos, Dios como sufrieron, lo que estoy pasando aquí no se lo deseo a nadie, Ni siquiera el desgraciado que me trajo a este infierno.

Unos minutos más tarde el lugar finalmente se enfrió un poco, suspiré aliviado mientras mentalmente me agradecía por seguir vivo.

De repente la puerta se abre bruscamente, por ella entraron varios hombres, cinco en total, el del medio parece ser el jefe, está vestido con un traje bien hecho, no pude ver su cara exactamente, hasta que escogió Encendió una linterna y Él iluminó su propio rostro y luego dijo:

__Hola Eliene, me extrañaste o vas a decir que no me conoces- Dijo y me sonrió hermosamente.

Dios mío, este hombre es muy guapo, su figura alta y majestuosa, combinada con su rostro prácticamente perfecto, parece como si me estuvieran llamando, meneé la cabeza instintivamente tratando de deshacerme de esos pensamientos demenciales, di unos pasos hacia atrás y Luego dijo con firmeza:

__Incluso si te conociera, nunca extrañaría a un cabrón como tú. Ya lo dije, pero parece que estás sordo, NO SOY MALDITA ELIENE.

Las últimas palabras salieron de mi garganta, ardiendo como un carbón, mi voz fue fuerte y resonó por todo el almacén, el infortunado se rió de mí, vino hacia mí, entrelazó sus dedos en su cabello y tirando con fuerza habló en voz alta. enojo:

__ Veo que aprendiste malos hábitos por donde ibas, me parece bueno que me respetes, antes eras sumisa conmigo, ¿qué cambió? ¿Por qué ya no me amas?

Sintiendo mucho dolor, me tragué las lágrimas, puse mi mejor sonrisa y luego dije:

__Estos no son malos hábitos, acabo de ser criado por una mujer que me enseñó a nunca bajar la cabeza ante un macho cabrón, nunca seré sumisa contigo, no soy Eliene y en la primera oportunidad que tenga te mataré.

Hablé enojado y luego traté de liberarme de ese desafortunado, pero él es mucho más fuerte que yo y lo único que logré fue hacerlo enojar, me golpeó fuerte mientras aún sujetaba mi cabello y dijo:

__Déjame probar el sabor de tu sangre- dijo pasando su lengua por la comisura derecha de mi boca. En ese momento las lágrimas corrían sin parar, me sentí asqueado conmigo mismo, porque me gustaba su tacto y quería más, carajo, mi El cuerpo me hizo traicionar.

Usando lo último de mis fuerzas, giré mi rostro para evitar eso, y con lágrimas en los ojos hablé en voz baja:

__Váyase al infierno, Sr. Richard Monroe- dije para luego escupirle en la cara, ya estoy muerto, ya no tengo nada que temer.