Anastasia: Torbellino Entre Tantas Sombras

Han pasado 3 años desde los sucesos en el reino y por fin se respira paz después de la derrota del Ser Oscuro, ya estaba construido en su totalidad el palacio imperial, es más imponente y más majestuoso que nunca, Anastasia aún estaba con los preparativos de su boda con Alistair, aunque a medida que va pasando el tiempo, va conociendo a su destinado Liam, compartiendo no solo con él sino con Alistair, Liam sabía muy bien sobre el primer destinado así que no le importo, así estaban conociéndose poco a poco.

Ya restaurado el palacio, Anastasia por fin siente paz y ha decidido como le dijeron sus padres, darle una oportunidad y seguir conociendo a Liam, así que se dirige hacia donde está su tío Raziel con todos sus soldados, que ya habían regresado de la frontera y le pregunta por Liam. 

- Hola tío, disculpa que venga hasta acá, pero he decidido que es tiempo de hablar con Liam, ¿será que me puedes decir dónde está?- con una voz decidida.

- hola Anastasia- su mirada cambia a una siniestra y descabellada, la mira de una manera penetrante y fría - Liam está en una misión, para que lo buscas, no será que es para lo de tu conexión de destinado- camina con fuerza y profundidad haciendo un estruendo de su poder con intimidación, sigue mirándola de una manera sombría, Anastasia tartamudea intentando de contener su temor por la reacción de su tío raziel.

- tío, yo solo quería- tiemblan sus manos, tratando de buscar las palabras precisas para convencer que se calme.

- para que lo buscas, no me hagas repetir otra vez- taconea sus botas de guerrero, haciendo resonar el piso, - te advierto que si hay un truco en eso, sabes lo que pasará, cuando llegue le aviso y más te vale que no haya una cosa extraña por allí- dice Raziel con una mirada fría y despectiva, se voltea a otro lado para ir, del otro lado de la tienda de campaña.

Anastasia suspira un poco decepcionada, la hizo temer ante su ira, sabía bien que su tío no era un ser de sentimientos abiertos, a excepción de su esposa, por lo que se despide del tío, con un poco de incertidumbre.

- Gracias tío, me retiro- se voltea a otro lado de la tienda de campaña, baja su cabeza, sabe bien que su tío no iba a dejar que esté a solas con su segundo destinado, a pesar que ellos se había encontrados otras veces, solo como ayudante a la construcción del.palacio igual, había una cierta simpatía por lo poco que se habían relacionado, mientras iba caminando empieza a sentir un fuerte viento y al levantar la mirada se lo encuentra a él, un imponente dragón rojo, Liam vuelve a su forma humana y le hace una reverencia a modo de saludo. 

- Princesa, que la trae por acá?, faltó otra columna en el palacio para ser movida?- se acerca más a Anastasia, sintiendo una extraña energía cálida entre ellos, le sonríe, haciendo poner nerviosa a Anastasia.

- Hola joven Liam, ese es tu nombre? Es que pocas veces interactuamos y no nos presentamos formalmente, moviendo sus dedos con nerviosismo.

- Así es princesa ese es mi nombre- le sonríe Liam con tanta ternura 

- Quisiera hablar con usted si es posible, hemos hablado pero no de algo tan cercano, ¿se puede ?- dice Anastasia mirándolo con determinación y tranquilidad, se calma.

- Claro princesa, pero si me permite antes debo ir a entregar un informe a su tío- sonríe Liam, se acerca más y se miran fijamente como buscando entre su mirada penetrante y misteriosa, se repone y voltea hacia otro lado en señal de vergüenza. 

- Claro adelante, lo esperaré acá- le da paso para que entre a la tienda de campaña, y baja un poco la mirada, Anastasia se siente inquieta