Mario Martínez, un estudiante de secundaria, fan de la historia de la antigua Roma, que adquiere la habilidad de invocar legionarios romanos cuando reencarna en otro mundo.
Ahora como Marius Martinus, junto con su emperatriz yandere convocada, junto con sus legiones, conquistará este mundo de fantasía.
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Capítulo 23 - La batalla de Zama
El general elfo, que comandaba un ejército de 5.000 soldados en defensa de la ciudad, estaba mirando fijamente al ejército imperial estacionado en la colina a poca distancia de la ciudad.
-¿La fuerza total del enemigo?
-Según el informe de los exploradores: 37.000 infantes, 5.000 jinetes y 80 elefantes.
-... espero que no vengan demasiado pronto.
-El enemigo no solo pretende tomar esta ciudad, sino que también la usarán como base para un asalto a la capital.
El general estaba preocupado, ya que esta ciudad es el último bastión entre el ejército imperial y la capital.
-¡Hay movimiento en el campamento enemigo! ¡Han comenzado a marchar!
Varias docenas de miles de enemigos iniciaron su marcha hacia la ciudad.
Al escuchar el informe de sus subordinados, el general comenzó a hablar con expresión de disgusto.
-¡Concentremos nuestras fuerzas en el este de la ciudad! Envíen una unidad para informar... ¡¿Qué?!
Las palabras del general fueron interrumpidas por un mensajero que corría hacia él.
-¡Refuerzos! ¡¡Han llegado refuerzos!!
-¡¿Qué?! ¿Qué unidad es?
El general había estado pidiendo más tropas desde hacía tiempo, por lo que comenzó a animarse un poco ante las palabras del mensajero.
-¡No!... ¡Los refuerzos no son de nuestro ejército! ¡Son del ejército romano! ¡Han declarado su apoyo hacia nosotros!
-... ¡¿Qué?! ¡¡Está es una batalla por nuestro país!! ¡¿Se supone que debemos dejar este asunto en manos de los humanos?!
La expresión aligerada de antes cambió rápidamente a una de enojo.
* * *
El ejército imperial situó a su caballería en los flancos con 2.500 jinetes cada uno. En el centro situó los 37.000 infantes, divididos en dos líneas, con 80 elefantes al frente.
Scipio situó a su caballería en los flancos con 4.000 jinetes a cada lado. En el centro situó 4 legiones, con tropas auxiliares, dando un total de 30.000 infantes.
Los elefantes apoyados por la primera línea de infantería, cargaron contra los romanos. Pero los romanos, aprovechando su formación de manípulo, abrieron pasillos en sus formaciones para que los elefantes siguieran de largo entre las filas romanas para que sus jinetes fueran eliminados por las jabalinas de los legionarios en la retaguardia. Sin sus jinetes, los elefantes atravesaron las líneas romanas casi sin causar bajas.
Los jinetes romanos, aprovechando la ausencia de los elefantes, aprovecharon para cargar contra la caballería imperial.
La primera línea de infantería imperial que apoyaba a los elefantes, se lanzó contra los romanos, primero recibieron una salva de jabalinas romanas y luego el forcejeo cuerpo a cuerpo.
Tal fue la embestida que el campo de batalla se hallaba cubierto de cadáveres y heridos. Esto obligó al ejército imperial a enviar la segunda línea de infantes a cargar contra los romanos.
La caballería romana, ya reorganizada tras la persecución de los jinetes imperiales, regresaron en aquel momento al campo de batalla. Atacaron la formación compacta de los imperiales desde la retaguardia, de manera que se produjo el colapso del ejército imperial.
Esto hizo que el Héroe y parte de la segunda línea se retiraran antes de que se completase el cerco romano. Scipio pensó en perseguirlos, pero decidió no hacerlo por miedo a posibles emboscadas en el camino. Dedicándose a saquear el campamento imperial y regresar al castrum con el botín.
Las bajas imperiales se elevaron a 20.000 muertos, 10.000 prisioneros y 11 elefantes capturados. Los romanos tuvieron 5.000 muertos y 4.000 heridos.
por lo menos dos diarios 😃😃😃😃😃😃/Pray//Pray//Pray//Pray//Pray//Pray//Pray//Pray/