Mi nombre es Ángela D´Angelo soy la CEO de una de las empresas de distribución de Vinos más grande de Italia, tengo una hermana gemela llamada Susana Williams, tenemos diferentes apellidos por que nacimos separadas y ninguna sabia de la existencia de la otra, a la cual le pertenece el 50% de las acciones, pero ella me ha dejado a cargo de todo.
Mi vida no ha sido de cuento de hadas, he pasado por situaciones que me han marcado de forma negativa y definitiva, el hombre que consideraba mi padre el que era mi héroe, al que admiraba con orgullo, destruyo todos mis sueños, destrozando mi alma por completo cuando comenzó a abusar de mí, por miedo a que lastimara a mi abuelo y a todos los que me rodeaban me quede callada, así me mantuvo bajo sus garras, hasta que nos enteramos de que tenía una hermana gemela y este amenazó con llevársela y hacerle las mismas atrocidades que a mí me hizo, ese fue mi punto de quiebre. Esta es mi historia
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NO SIENTO NADA POR TI
POV. Ángela
No puedo negar que mis nervios estaban a mil sobre todo porque yo sería la encargada de hacer sus terapias y no sé cuál será su reacción al saber que estará a mi cargo durante el tiempo que estará aquí pero de lo que si estaba segura era que iba a dar todo de mi para que él se recuperara del todo y volviera a ser el mismo hombre de siempre.
Llego el gran día, me sentía realmente ansiosa, al llegar al centro me encontré con Michael quien al verme se percató de mi estado, este me dio un fuerte abrazo y me pidió tranquilizarme debido a que debía tratarlo como un paciente más lo cual me hizo sentir un poco triste porque lo que menos deseaba era tratarlo como a un extraño.
Al llegar a la sala de terapias de inmediato me encontré con Oscar quien no se despega ni a sol ni sombra, aunque
no puedo negar que es bastante gracioso y siempre me saca una que otra sonrisa, a lo lejos pude ver a la Sra. Maritza quien me recibió con una enorme sonrisa, él se encontraba de espaldas, a medida que me acercaba sentía mi corazón a todo galope al girarse y nuestras miradas se encontraron pude ver la sorpresa en su mirada y no sé por qué mi estupidez me hizo actuar como si no nos conociéramos y eso me llevó a notar decepción en sus ojos.
Trate de ignorar los latidos de mi corazón y su aroma varonil, pero para que si mis nervios estaban a mil, más sin embargo los supe controlar `para que el no los notara, al terminar su pregunta me sacó de lugar pero mis palabras salieron solas y no hice nada para evitarlas, salí de allí sin mirar atrás.
Al llegar a mi lugar comencé a regañarme a mí misma por mi estupidez, se supone que acepte era para volver a recuperar su amor y que viera que sin importar lo que sucediera yo estaría allí pero mis impulsos y enredos de emociones me hicieron actuar de una manera que jamás lo hacía.
Michael: se puede saber por qué estas así
Ángela: por Dios Michael, no vuelvas a hacer eso
Michael: lo siento, pero es que te escuche molesta y vine a ver que te sucedía
Ángela: lo siento, pero es que actué como una cría, jamás me había pasado algo así (hablo con frustración)
Michael: si hablas, puedo comprenderte
Ángela: lo siento… se trata de Alex, al estar frente a el actué como si no nos conociéramos y lo trate indiferente y
realmente no sé por qué lo hice
Michael: bueno, técnicamente debes tratarlo como cualquier paciente y así debes actuar
Ángela: si, pero se supone que quiero recuperarlo no alejarlo más y el entendió que no deseo tener ninguna cercanía con el (siento que me estoy ahogando y mi vista comienza a estar borrosa)
Michael: calma Angi, respira (mi amigo me ayuda a sentarme y a ventilarme un poco, estoy entrando en pánico) quédate conmigo
Ángela: yo… lo siento, esto no debería estar pasándome
Michael: ¿deseas que hable con él?
Ángela: ¡no!!
Michael: ¿segura? (niego con mi cabeza) bien, vamos y te llevo a casa
Después de ese día todo se fue en picada, entre Alex y yo había una distancia cada vez más grande, lo que me hacía replantear que no fue la mejor estrategia hacer de cuenta que no nos conocemos porque cada vez que estoy cerca de él siento unas ganas inmensas de lanzarme a sus brazos y pedirle que me ame como lo hacía antes pero veo cada vez más lejos esa posibilidad.
Ha pasado un mes y todo continua igual, hoy es un día de esos en los que siento que necesito sacar todo lo que tengo guardado y allí es cuando mis lágrimas se deslizan por mis mejillas lo cual es tonto porque estoy fuera de mi zona de confort y lo que menos necesito es que vean como me derrumbó lentamente pero al parecer a mis emociones no parece importarles por que están en su mejor momento.
Siento que alguien llega a la sala así que trato de limpiar mis lágrimas para que estas no se noten pero al instante
siento que alguien se sienta junto a mí.
Oscar: ¿te encuentras bien?
Angela: si, si, (quien menos deseaba que me encontrara en esta situación, esto no puede ser peor) es solo que me acorde de algo que me hizo sentir melancólica
Oscar: ¿estás segura?
Angela: si, no te preocupes (me levanto para salir del lugar pero este me detiene)
Oscar: Ángela, (me detengo mientras dejo salir un leve suspiro, pero no lo miro) sabes que puedes contar conmigo (se coloca frente a mí y levanta mi mentón con su dedo, ¿Qué cree que está haciendo?) eres una mujer maravillosa y no mereces sufrir por nada
Ángela: quien te dijo que… (no termino de hablar porque siento sus labios junto a los míos lo que me deja en estado de shock, lo mejor de todo es que no siento nada, ni el más mínimo sentimiento, al reaccionar lo alejó de mi) diré esto lo más amable posible, espero y sea la primera y última vez que osas hacer esto, porque para la próxima no seré tan pacífica
Oscar: lo siento, pensé que…
Ángela: pensaste mal, el hecho de que sea amable contigo no significa nada, no confundas amabilidad con amor, no siento nada por ti, espero te haya quedado claro
Salgo del lugar completamente desconcertada, no es que no sea un hombre interesante, en realidad lo es, es apuesto, carismático, atento, cariñoso, servicial pero para mí solo es un compañero más de trabajo, mi corazón solo le ha pertenecido a Alex y así seguirá siendo hasta el último de mis días.
Al llegar a las piscina para iniciar la sesión de Alex puedo ver a este muy cómodo platicando con una mujer preciosa, en realidad parece un ángel y tiene una sonrisa preciosa lo que hace que mis sangre comience a hervir, aprieto mis manos en puños y trato de calmar mis emociones para no hacer una escena, ¿por qué este imbécil parece tan cercano a ella?
Me acerco y le indico que es hora de sus terapias, procedo a realizarlas pero el parece ahora más distante que antes y justo al terminar trato de acercarme para hablar con él pero este se va de inmediato sin permitirme hacer ningún movimiento.
Voy a recoger mis cosas y justo a la salida lo puedo ver con la misma mujer y realmente parecen muy íntimos, trato de acercarme nuevamente pero al verlos tan felices me detengo y continuo mi camino con mi corazón adolorido, no voy de inmediato a mi casa, voy a un lugar donde pueda tener paz y pensar con claridad lo que debo hacer.
He pasado todo el fin de semana en la cabaña, mi madre ya sabe que me encuentro acá, pero ya es hora de volver a la realidad y he decidido que debo hablar con él para dejar las cosas claras y saber si hay una nueva oportunidad para nosotros.
Ya en el centro me encuentro con Michael quien me hace señas para que lo siga, ya dentro de su oficina este me mira con algo de duda lo que me hace incitarle a hablar de una buena vez.
Ángela: ¿quieres que te saque las palabras con cuchara?
Michael: se ha ido
Ángela: ¿Quién se ha ido?
Michael: Alex solicitó atención desde su casa
Ángela: bien, puedo ir hasta allá, no tengo problema con ello
Michael: también solicitó cambio de terapeuta
Ángela: ¿porque?, (empiezo a caminar de un lado al otro) las terapias han ido excelentes, ha tenido bastante avance
Michael: creo que es `por ti
Ángela: pero si todo estaba bien, estábamos llevando una relación terapeuta paciente
Michael: angi… la solicitud la hizo después de verte besando con Oscar
Ángela: de que hablas… (a mi mente llega ese momento, creo que me va a dar otro ataque de ansiedad, comienzo a respirar profundo) mierda, no, no eso no es lo que parece
Michael: a mi si me pareció
Maldición, él debe estar pensando lo que no es, claro por eso ese día estuvo más distante conmigo, debo ir a hablar con él, Dios esto no me puede estar pasando, todo esto es culpa de él y su maldito orgullo de macho herido, estuviéramos muy felices ahora si no me hubiese apartado de su vida, es un imbécil.