Luca pierde la cordura en un viaje de trabajo por California, al cruzarse en su vida con una joven mujer.
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Capitulo 23
Luca
No pude evitar besar a Zhavia, aún delante de Fabrizio, cuando él me vió su cara pareció transformarse, sus ojos, Dios! Sus ojos se abrieron como algo fuera de lo natural y su boca quedó casi sin reacción, su cara toda quedó sin reacción, aquello realmente lo había sorprendido. Zhavia se despidió y se marchó del lugar, nos quedamos con Fabrizio en silencio un largo rato hasta que él solo saco el tema.
- Yo.. No puedo...
- Qué pasa? Dilo.
- Si pudiera encontrar las palabras, créeme que lo haría, pero nada sale de mi boca.- Dijo él aún sorprendido y sin tocar su comida, pero con los cubiertos pegados a las manos, inmóviles.
- No es para tanto, Zhavia es una joven muy bella
- Si, una joven muy bella... una joven muy bella y muy menor.
- De qué hablas?.
- Debo recordarte cómo tu amigo, no perdón, cómo tu abogado!! Que ella tiene 16 años?!!! Es menor Luca Di Fazio! Qué demonios pensabas?!.- Me dijo él algo escandalizado.
- Sé que es menor, no es una noticia nueva y nada...solo paso, no lo pudimos evitar, ni ella ni yo.
- No pudiste evitar qué? Qué ella caiga sobre tu poll*? Llevarla a tu cama? Cómo no pudiste evitarlo?.
- No es necesario que seas tan grosero.
- Qué hay se enteren sus padres?.
- Qué padres?!! Él qué está preso o la que la abandonó?.- Dije algo molesto ya por toda su protesta.
- Oh y eso hace todo más fácil? Cómo es una joven en total estado de vulnerabilidad y desprotección es propicio qué la metas en tu cama?.- Me dijo Fabrizio y y me estaba cabreando.
- Qué mierdas dices Fabrizio? Hace cuánto somos amigos? Realmente no me conoces? Crees qué podría aprovecharme de ella?.- Lo dije realmente indignado, porque no podía creer que él, que es mi amigo, que es como un hermano para mi, pensará eso de mi persona.
- No se trata de que lo crea o no Luca, pero seamos realistas, la diferencia entre ustedes es abismal, hay una clara diferencia de poder entre ambos, la madurez que tú tienes y ella no y sin contar que si, el hecho de la situación en la que se encuentra no hace que las cosas sean mejores, por el contrario solo lo empeora.
- Mira Fabrizio, no se que estás queriendo dar a entender, pero si es lo que creo ya te lo respondo, no, no me aprovecho de la diferencia que existe entre nosotros, ni hago uso de eso como una especie de poder, no la he forzado a nada, ni le he prometido nada. Y en cuanto a la madurez, puedo decirte que la misma situación de mierda en la que se encuentra en cuanto a su familia y demás, la ha hecho madurar de golpe, ella no es como todas las chicas de 16 años.
- A otro con ése cuento! Es típica frase de tipo que se quiere comer una chiquilla.
- Yo no me quiero comer nada!.
- No porque ya te has servido hasta el postre, o no?.
- Fabrizio, voy a dejar esto aquí, no quiero pelear contigo, ya está.- Me levanté de la mesa y me fui a mi habitación, qué demonios le pasaba ahora? Era un santurron? Justo él? Desde cuándo? Que me hablara así y que pensará así, me enojo y me dolió, él mejor que nadie me conoce, sabe que no soy una persona que abusa de su poder, ya sea económico o social o en este caso mi edad.
Salí por la tarde a llevar los contratos, fui solo, pero en el lugar me encontré con Fabrizio y Bruno para mi sorpresa, no sabía que ellos vendrían, ya que de todas formas no íbamos a firmar el contrato hoy, solo lo dejaríamos para que ellos lo vean con su abogado. Salí del lugar y estaba fumando afuera cuando Bruno se acercó.
- Hey hermano, salimos hoy?.
- No, no puedo, ya quedé en algo.- Fabrizio al escucharme me dió una mirada de desaprobación.
- Hey cómo eso? Con quién? Si hace dos días no te vas del antro con nadie? De hecho te tengo medio perdido.- A todo esto mi hermano recién caía, estos días que estuvimos aquí se la paso de fiesta, mi idea era que vea el funcionamiento de esto, quizás que él quedé a cargo de este proyecto para que pueda encargarse él mismo de los viajes que se harían en un futuro si se llegaba a concretar el negocio. Pero veo que aún está un poco verde, se la pasaría de fiesta y eso no sería malo si luego se pusiera a trabajar pero en fin. Por una parte, su lado fiestero me sirve para que no esté al tanto de lo mío con Zhavia.
- Nadie que te importe.
- Hey que humor, bien me voy, quedé de verme con una rubia preciosa, nos vemos a la noche.- Sin más se marchó y quedamos Fabrizio y yo, yo estaba fumando y él se acomodo a mi lado, apoyándose en mi auto y prendió su cigarro.
- Sabes que no pienso mal de ti no? Es solo que ésto podría ser un problema, es un delito Luca y tú tienes mucho en juego que perder.
- Sé porque lo dices, pero si tu miedo es que ella me denuncie, no lo hará.
- Qué hay si se enamora?.
- Zhavia? No, ella mejor que nadie entiende esto, es más...- Suspiré por las palabras que estaba por soltar, pero quizás era una forma de que él entienda y se quede tranquilo.- soy yo quien está pensando esto, más que ella.
- Qué quieres decir?.
- Soy yo quien tiene más pena de firmar ese contrato y marcharme y quizás no verla nunca más , ella lo entiende muy bien y hasta no ve más que lo que tenemos, sexo.- Largué el humo de mi cigarrillo y me quedé pensativo, con la mirada en el piso. Fabrizio suspiro.
- Estás enamorado? Eso me quieres decir?.
- No, no lo sé, no. Pero, no se.. supongo que me había acostumbrado a su compañía.
- Ja
- Por qué "ja"?!.
- Pensar como empezó todo.- No pude evitar largar una risa recordando como nos conocimos. Pero no podía evitar recordar la simpleza con la que ella pensaba todo anoche, me iría y quizás no nos volveríamos a ver y para ella era como si nada. Ella se dió cuenta que era solo sexo y lo acepto y yo, yo por primera vez era quien se quedaba esperando algo más.