LA SICARIA

RENATA

creí que ya todo estaba resuelto, pero no fue así resulta que el cuerpo de Axel nunca fue encontrado, y además de eso a casa empezaron a llegar amenazas como ratas muertas con algunas notas y diciendo que yo era una asesina, pero eso ya todos lo sabíamos, las cosas con Jesús están fluyendo nos hemos besado un par de veces, pero aún no tenemos una relación, ni siquiera sé si tenemos algo, al hospital llego otra doctora que se la pasa todo el tiempo detrás del cirujano y resulta que además de eso me ha dicho que quiete ser mi amiga.

Incluso me ha invitado a que vaya con ella a una disco, cosa que no le agrado para nada al doctor y ahora es el quién siempre me dice que me aleje de ella, no sé, pero siento que intenta que seamos amigas y yo no confió en mujeres para nada, mi hermano quiere que me ponga a estudiar y en vez de ser una asesina a sueldo me convierta en una agente de la policía, y yo no sé si estoy hecha para eso porque yo no puedo tener piedad por aquellos que lastiman a personas inocentes.

De todas formas tengo un mes completo sin asesinar a nadie y eso que he recibido muchos encargos, hay algunos que me encantaría hacerlos, pero he prometido dejar de tomar la justicia por mi propia mano, ahora además de ser guardaespaldas de mi doctor también estudio lo básico, claro que en línea y aunque apenas estoy empezando sé que lograré salir hacia adelante y seré una mejor persona, esta noche he preparado una cena especial para celebrar que ah Jesús lo han promovido en el trabajo ahora es jefe de cirujanos, me tome el atrevimiento de invitar a algunos amigos.

Organice un rico bufé y compre cerveza y vino además prepare algunos juegos como billar y esas cosas para que todos pudieran disfrutar de la fiesta, a las 6 de la noche empezaron a llegar los invitados, pronto la fiesta se incendió y estaba a todo dar, Jesús estaba muy contento riendo y tomando y yo estaba jugando billar con unas chicas que habían venido cuando de pronto suene el timbre y yo voy a abrir allí estaba Marcela la nueva doctora, yo no la había invitado porque ni a mí ni a Jesús no nos agradaba y la verdad es que no sé cómo llego aquí.

Ya estaba aquí así que no la iba a dejar afuera aunque si me paso por la mente hacerlo, de pronto ella se acercó al cirujano y lo beso en la boca todos se quedaron sorprendidos y luego me miraron a mí, no negaré que eso no me gusto, pero Jesús no la alejo ni le dijo nada, yo no me iba a poner a hacer el ridículo por eso subí a mi cuarto y trate de calmarme, tenía muchas ganas de llorar, pero no voy a dejar que nadie me vea débil ni siquiera él.

Volví a la fiesta y baile y bebí, me divertí mucho y cuando llego la hora me despedí de todos, Marcela se quedó y Jesús la llevo a su cuarto, recogí el reguero que quedo y subí a mi cuarto que estaba justo al lado de él y escuche gemidos, me puse un abrigo y tome las llaves del coche junto a mi bolso y salí de la casa, conduje hasta un motel cercano y pague una noche hay, esa noche llore mucho no sabía que amar a una persona podía doler tanto, pero esa noche jure sacarlo de mi corazón.

A la mañana siguiente cuando llegue a la mansión él ya se había ido, decidí que lo trataré solamente como mi empleador que es, anoche me demostró que no es un hombre que valga la pena seguí estudiando e hice mi trabajo, en la noche lo fui a buscar como era mi deber, en todo momento lo llame por su apellido y lo trate con respeto, él en ningún momento se disculpó y no es que debía hacerlo, pero al menos quería que fuera sincero y me dijera que yo no le interesaba, pero eso nunca paso.

Con el paso del tiempo él y Marcela formaron una relación y no solo debía cuidar de el sí no de ella, también yo estaba muy agradecida con Jesús, pero estaba claro que no tenía por qué soportar esta situación, en cada oportunidad que tenían se besaban delante de mí y eso poco a poco fue creando un rencor hacia ambos, cabe destacar que él no me permitía tener día libre ni salir con nadie es por eso que he decidido que es hora de que haga mi vida lejos aun cuando aún tengo sentimientos por ese hombre que primero me ilusionó y luego me mostró la realidad.

Esta noche Marcela dormirá en la misma casa en la que duermo o mejor dicho dormía, ya tengo mis cosas empacadas esta misma noche me voy de esta casa, cuando los tres entramos ambos ven mis maletas y luego Jesús me mira con ceja alzada le comento que este es mi último día trabajando para él y este enloquece empieza a tirar los jarrones y me grita que no iré a ninguna parte, yo de verdad que desconozco a este hombre que tengo en frente, él sabe que no puede detenerme así que alega que yo debo esperar que él consiga a otra persona.

Le recuerdo que no existe ningún contrato que diga eso y él me lo pide de favor y de verdad que no entiendo por qué quiere retenerme a su lado si ya está haciendo su vida a todo esto Marcela se acerca a él y le dice que deje que yo me vaya, pero este la empuja y la manda a callar, ella parece sorprendida, pero finalmente asiente, y yo sé que hacer porque no puedo seguir soportando esta situación, le pongo condiciones, como que yo no dormiría en la mansión y además de eso tendría días libres.