Blanca Como La Nieve

Samara

—Dichosos los ojos ,pequeña— reconocí la voz de Jason muy cerca de mi oído.

— Jason, que sorpresa— dije separando mi cuerpo del suyo.

—Así que aquí es donde estabas, en la gran ciudad Amatista. Me tienes muy abandonado pequeña, hace mucho que no lo pasamos bien tú y yo. Tal vez podríamos ir a mi hotel y pasar un buen rato— Jason intentó rodearme la cintura otra vez pero conseguí esquivarlo.

Él era un chico de un pueblo cercano a Greenforest con el que quedaba de vez en cuando para enrollarnos.Viéndolo ahora no sabía porqué me había estado acostando con él .No era feo pero realmente nuestra relación se resumía a que él me llamara pequeña, yo le riera las gracias y luego nos acostáramos. Después de estar con Kai podía asegurar que Jason ni siquiera era bueno en el sexo. Quería dar por zanjada esta absurda conversación lo antes posible.

—Jason eso nunca va a volver a pasar. Ahora estoy con —

—Hola soy Kai— el rubio apareció de la nada y se presentó extendiéndole la mano.

—Jason— dijo el moreno estrechando su mano con el rostro serio.

El rubio rodeó con su brazo mi cintura acercando mi cuerpo al suyo cosa que al moreno no le pasó desapercibida.

—Veo que tienes a alguien nuevo para pasarlo bien— dijo Jason molesto.

—Soy su novio—

—Vaya, si que te ha engañado bien, pero te diré una cosa tío, cuando encuentre a otro te dará la patada—

—No vayas por ahí Jason— me estaban enfadando sus comentarios pero el moreno ni siquiera me escuchó y siguió hablando.

—Te daré un consejo, follátela y dale la patada— en un segundo el puño de Kai estaba estampado en la boca de Jason.

—Eso es para que no vuelvas a nombrar a mi novia con tu sucia boca y ni se te ocurra volver a acercarte a ella— se volvió hacia dos personas de seguridad que habían venido —Lleváoslo y aseguraos de que no vuelva a pisar ciudad Amatista.—

—Sí Alfa— los dos hombres agarraron a Jason por los brazos y se lo llevaron.

—¿Estás bien? — me preguntó.

—Sí. Es un tío de Greenforest con el que salí algunas veces. Es un gilipollas, no sé como pude tener tener algo con él. ¿Y tu mano? —

—Está bien, no es el primer puñetazo que le doy a un imbécil—

Lo besé y lo abracé queriendo que su aroma inundara mi nariz y fuera lo único que oliera.

—¡Chicos tenéis que venir! — Crystal llegó angustiada.

—¿Qué pasa Crystal? —

—Es Lina, ha encontrado a su pareja y él se la quiere llevar—

—¿Qué? —

Crystal nos dirigió hacia el lado opuesto de la barra, donde había un hombre que posiblemente me doblaba la edad, poniendo a Lina en su hombro como si fuera un saco de patatas.

—¿Puedes bajarme?, por favor. Puedo ir caminando— pedía mi amiga.

—Cachorra ,no voy a correr el riesgo de que intentes escaparte — el hombre tenía el pelo negro, una abundante barba y rasgos rudos.

—No me escaparé señor y mi nombre es Lina, no cachorra— la gran mano del barbudo le dio un azote a mi amiga en el trasero —¡Auch! —

—Eso es para que aprendas modales ,cachorra. No hables si yo no te digo que hables, ¿entendido? —

—Sí, señor— Otra fuerte nalgada recayó en el culo de la morena.

—Tienes que contestar sí, mi Alfa. Ahora soy tu Alfa y me debes tratar como tal—

—Sí, mi Alfa—

—Eso está mejor cachorra. Esta noche me darás placer. —

Iban a irse pero me interpuse en su camino.

—¿Y esta otra cachorrita qué quiere?, ¿unirse a la fiesta? — el barbudo iba a agarrarme pero antes de que pudiera hacerlo Kai ya le había inmovilizado el brazo.

—Ni se te ocurra tocar a mi pareja— susurró dándole una mirada mortal.

—Alfa Kai, no sabía que esta preciosidad era su Luna, si lo hubiera sabido jamás hubiera intentado tocarla. Es un honor para mí conocerlo por fin. Soy Alfa Brad, de la manada Cielo azul, una pequeña manada al Este del país —

—Y ¿Qué le trae por aquí?. Está muy lejos de su manada — el rubio habló con un tono neutro mientras me apretaba contra su cuerpo.

—En mi manada apenas hay mujeres y mucho menos niños, así que hemos salido de ella con la intención de conseguir mujeres para procrear y que la manada se llene de pequeños. Sin niños no hay futuro,Alfa Kai. Sin embargo he tenido la suerte de toparme con mi destinada. ¿A qué es guapa la cachorra?— estaba a punto de volver a darle un azote a Lina cuando exploté.

—¡La cachorra, como tú la llamas, tiene nombre y es mi amiga. Te exijo que la bajes ahora mismo! — el neandertal este no me daba miedo.

—Vaya, mi pareja amiga de la Luna de Alfa Kai, esto si que es suerte. Eso quiere decir que nuestras manadas estarán muy unidas —

El barbudo me estaba poniendo de los nervios.

—Kai dile que suelte a Lina, dile que la deje ir—

—No puedo hacer eso. No, si Lina quiere irse con él —

—¡Pero está claro que no quiere! Díselo Lina. Dile que no quieres ir con él — le hablé a la morena.

Para mí total sorpresa, mi amiga se quedó callada.

—¿Lina? —

—Está bien Samy. Es mi pareja, debo ir con él — la voz de mi amiga era triste y apagada.

—Alfa— el susodicho le hizo una reverencia a mi pareja y se fue en dirección a la salida con mi amiga en su hombro.

Me quedé petrificada ante sus palabras. ¿Dónde estaba mi loca amiga, la impulsiva, la que siempre decía lo que pensaba, a la que no la callaba nadie?. Miré con impotencia a Kai.

—¡Detenlo! ¿Por qué dejas que se la lleve?— le grité. Iba a correr en la dirección en la que se habían ido pero Kai me agarró contra su pecho.

—No puedo hacer nada. No puedo impedir que un lobo se vaya con su pareja a menos que ella no quiera—

—¡Y ella no quiere! —

—No es lo que ha dicho—

—Estará asustada. Conozco a Lina, ella nunca podría estar con un... bruto como ese. ¡Por favor, haz algo!. No dejes que se la lleve a su manada. Seguro que le hace daño. ¿Lo has visto?¡Es un bestia! . La llevaba como si fuera un saco de harina. ¡Por favor Kai, por favor!— me horrorizaba pensar en lo que podía hacerle ese salvaje a mi amiga.

—Muñeca, es su pareja. Por naturaleza, un lobo nunca le hará daño a su destinada. Puede que no tenga los modales adecuados pero ellos son mates, la Diosa Luna los ha unido—

—¡Pues tu querida Diosa Luna se ha equivocado! — le grité y me solté bruscamente de su abrazo. Corrí hacia la salida a ver si los veía pero en la calle no había nadie,solo los porteros de la entrada.

Kai y Crystal aparecieron a los pocos minutos. Ignoré al rubio y me dirigí a Crystal.

—¿Cómo fue?, ¿Cómo pasó? —

—Estábamos bailando y Lina se puso muy nerviosa. Empezó a gritar mate, mate y entonces apareció Alfa Brad. Lina se quedó literalmente muda. Él se presentó como Alfa Brad y le dijo a Lina que era suya y se la llevó. Lina le pidió que la dejara despedirse y es cuando fuí a buscaros. El resto ya lo sabes—

—Hay que rescatarla—

—Samara las cosas no son tan fáciles. Tenemos leyes para proteger a los mates y no podemos quebrantarlas—

—Pero ella no quería ir con él ¿has visto su cara? .No era ella, estaba en shock —

—Mientras ella no lo pida no podemos hacer nada ,muñeca— habló ahora el rubio.

—Eres un Alfa puro, eso ¿no te da más poder?—

—Por muy Alfa puro que sea no puedo romper las normas ,Samara—

—Quiero irme a casa— dije frunciendo el ceño y cruzando mis brazos.

—Muy bien, nos iremos entonces. Despídenos de los demás, Crystal—

—Sí, claro. Hablamos Samara—

—Sí, adiós—

Esto no se iba a quedar así.