Arumi Larasati, de 24 años, una mujer hermosa nacida en una familia sencilla, se ve obligada a casarse con Dion Erlangga, de 26 años, un joven empresario muy exitoso.
Se casan por un acuerdo de sus abuelos; ni Arumi ni Dion pueden rechazarlo.
La actitud fría e indiferente de Dion no representa un problema para Arumi; ella sigue atendiendo a su esposo con todo su corazón, aunque él la ignore con indiferencia.
Hasta que un día Arumi descubre la verdad: esa frialdad de Dion solo es hacia ella, no hacia sus amigos.
Ahora Arumi comprende que su esposo aún no puede aceptar su matrimonio. En lugar de seguir soportando más dolor, Arumi decide rendirse en su matrimonio.
¿Y podrá Dion aceptar eso…?
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Capítulo 21
Wulan ya había llegado frente a la empresa de Dion, con el rostro maravillado al ver el imponente edificio.
"Huu... Finalmente puedo entrar en esta empresa." Murmuró Wulan feliz.
Wulan caminó con pasos firmes y sin olvidar de llevar en la mano una fiambrera con la comida que ella a propósito cocinó para Dion.
"Buenos días, señora, ¿puedo ayudar en algo?" preguntó Riri gentilmente.
"Oh... Sí, quiero hablar con el señor Dion." respondió Wulan con su sonrisa amigable.
"¿Ya tiene cita?" preguntó Riri de nuevo, porque ella nunca había visto a esa mujer antes, y la mujer no estaba cargando un maletín, sino una fiambrera.
"Ah... Aún no, pero ya tengo permiso de la señora Lia para hablar con el señor Dion." confesó Wulan.
"Oh... Entiendo." Riri asintió un poco hesitante en dar permiso para que Wulan subiera a la oficina del jefe, a su jefe no le gusta que personas que no tengan nada que ver con el trabajo lo visiten, especialmente desde que su esposa salió de casa, sus amigas nunca más fueron autorizadas a pisar la empresa, Dion hasta canceló cruelmente la cooperación con ellas.
"¿Puedo hablar con el señor Dion?" preguntó Wulan de nuevo.
"Espere un momento, señora, voy a confirmar primero." dijo Riri gentilmente, y cogió el teléfono para llamar a la secretaria de Dion.
"Lo siento, señora. Resulta que el señor Dion está en una reunión." dijo Riri.
"Ahhh... ¿Va a tardar?" respondió Wulan con un sentimiento de decepción.
"El señor acaba de entrar en la sala de reuniones, puede tardar una o dos horas, o incluso más." respondió Riri de nuevo.
"Oh... Entiendo." Wulan estaba desilusionada.
"Sí, señora." Riri asintió.
"En ese caso, voy a dejar esto aquí, por favor, entrégueselo al señor Dion." dijo Wulan entregando su fiambrera.
"Está bien, señora, yo lo entregaré." respondió Riri y cogió la fiambrera que Wulan entregó.
"Bien, me voy entonces." dijo Wulan desanimada, se cansó de cocinar y maquilló un poco su rostro, pero todo fue en vano, porque no consiguió encontrar a Dion.
Wulan salió con pasos lentos, en dirección al aparcamiento del coche, mientras que desde su oficina Dion vio a la mujer salir con una sonrisa de lado.
"Tsk, ¿qué es esto, madre, todavía tengo esposa, cómo puede simplemente arreglarme un matrimonio, si ella quiere arreglarme un matrimonio, por qué no a Doni?" refunfuñó Dion irritado.
Toc...
Toc...
El sonido de la puerta de la oficina de Dion siendo golpeada desde fuera.
"Adelante." dijo Dion desde dentro.
"Con permiso, señor. Vine a entregar el regalo de la señora de ahora hace un momento." dijo Riri educadamente.
"Puedes llevártelo, come con tus amigos." respondió Dion agitando la mano como si estuviera mandando a Riri salir.
"Ah... Está bien, señor, gracias." respondió Riri inclinándose un poco como señal de respeto.
Dion solo asintió y volvió a continuar su trabajo.
Kring....
Kring....
El celular de Dion sonó de repente, perturbando la seriedad de Dion que estaba enfocado en el trabajo.
"Aló... Querida" respondió Dion con el rostro radiante, porque quien estaba llamando era los gemelos.
"Papá..." exclamó Alexa con el rostro feliz.
"¿Qué pasa, hija, necesitáis algo?" respondió Dion con el corazón calentado al oír a su hija llamarlo Papá, no esperaba que él ya tuviera hijos tan grandes.
"No, es que nuestros trabajos de la escuela ya terminaron, estamos aburridos en el apartamento, mientras que mamá está inspeccionando el campo con el abuelo." desahogó Alexa desanimada.
"¿Queréis venir a jugar a nuestra empresa?" preguntó Dion que sabía que sus hijos ya estaban aburridos en el apartamento, aún más porque los gemelos estaban solos allí, mientras que él tampoco podía dejar el trabajo por mucho tiempo, porque tenía mucho trabajo para terminar lo más rápido posible.
"¿Podemos?" hesitó Alexa, mientras Axel solo se quedó en silencio, aunque él también esperaba poder ir a la empresa del Papá porque él también estaba curioso, en qué tipo de empresa su Papá trabajaba.
"Claro que podéis, Papá va a buscaros ahora, preparaos." respondió Dion levantándose inmediatamente y cogiendo su americana que estaba colgada en la silla.
"Ok, Papá, hasta luego, muacchhh.... TE AMO PAPÁ." exclamó Alexa antes de colgar el celular.
Dion se quedó inmediatamente paralizado después de oír las palabras de su hija, él no esperaba oír una expresión de amor de sus hijos tan rápido.
"No estoy soñando, yo tampoco oí mal, ¿cierto? Mi hija dijo que me ama." murmuró Dion mirando a la pantalla del celular que ya estaba apagada con una mirada emocionada.
"Papá también os ama, hijos." murmuró Dion finalmente abrazando su celular con fuerza.
En otro lugar, los gemelos ya se estaban moviendo rápidamente para cambiarse de ropa, se turnaron para cambiarse de ropa en el baño, porque todavía dormían en la misma habitación, mientras que Alexa o Axel no podían cambiarse de ropa siendo vistos por su hermano gemelo, Arumi ya había educado bien a sus hijos.
"Ven aquí, hermano va a hacerte una coleta en el pelo." dijo Axel que ya estaba preparado con un peine y una goma en la mano, el niño ya estaba acostumbrado a ayudar a su hermana gemela a hacerse una coleta.
Alexa asintió y se sentó en el tocador en su habitación, y de frente al espejo, Axel trenzó hábilmente el pelo de Alexa con muchas gomas en la cabeza de su hermana gemela.
"Hermano es muy bueno trenzando mi pelo." elogió Alexa mirando orgullosamente a su hermano a través del espejo del tocador.
"Claro, casi todos los días hermano hace eso, cómo hermano no va a hacer eso bien." rió Axel.
"Hermano es el mejor." elogió Alexa de nuevo.
"Claro que sí." respondió Axel que todavía estaba enfocado en trenzar el pelo de su hermana gemela.
"Listo." dijo Axel feliz, satisfecho al ver el resultado de su trabajo, él estaba muy feliz de ver el pelo largo negro y brillante de su hermana, él se enfadaría si Alexa quisiera cortarse el pelo, Axel no quería ver ese pelo bonito cortado corto.
"Ahhh... Lexa se ve aún más bonita así." dijo Alexa feliz girando su cuerpo delante de su hermano gemelo.
"No hace falta ser tan presumida, vamos... Vamos a esperar a Papá ahí fuera." invitó Axel.
Alexa solo obedeció y siguió los pasos de su hermano de atrás.
"¿Dónde está el bolso de hermana?" preguntó Axel viendo que su hermana no estaba cargando su bolso.
"Oh... Sí, olvidé." dijo Alexa golpeándose la frente.
Axel solo rodó los ojos, el hábito de su hermana de siempre olvidar sus cosas.
Alexa inmediatamente se giró y corrió de vuelta a su habitación, Axel solo sacudió la cabeza al ver el comportamiento de su hermana.
"Qué descuidada." refunfuñó Axel.
Mientras que detrás de la puerta, Dion se sentía orgulloso de su hijo que podía guiar a su hermana gemela, él estaba muy agradecido de que Arumi era muy inteligente en educar a sus hijos.
"Querida, eres la mejor mujer y madre del mundo, estoy agradecido de que el abuelo nos arregló un matrimonio." murmuró Dion en su corazón.
"¿Estáis listos?" dijo Dion después de conseguir controlar su corazón.
"Papá" exclamaron los gemelos y corrieron en dirección a Dion.
Dion se agachó rápidamente y extendió los brazos para recibir a sus dos hijos gemelos.
Hap...
"Os atrapé" rió Dion feliz abrazando a sus dos hijos gemelos.
Cup...
Cup...
"Papá os ama." dijo Dion besando las mejillas de los gemelos con cariño.
"Nosotros también amamos a Papá." respondieron los gemelos apretando aún más el abrazo en el cuello de Dion.
Continúa....
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