Ana tuvo que empezar de nuevo después de que su esposo desapareció y su hijo falleciera, su única hija Samara contrajo matrimonio y para no truncar la felicidad de ella, tuvo que perder todo lo que tenía, así es como ella termina viviendo en Panamá 6 años después, con ganas de iniciar una nueva vida, su ex compañera de colegio fue la encargada de ayudarla.
Comienza a trabajar en una casa de familia como niñera, allí conoce a su jefe, que es nada más y nada menos que su esposo desaparecido, pero el tiene amnesia y no recuerda nada, así que ella decide que con pequeños detalles lo ayudara a que traiga a su presente su memoria borrada.
(Temática de Noveltoon: Amor en la madurez)
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Capitulo 20
- Fui a buscar ayuda con un doctor que la atendió durante el embarazo, le tuve que dar dinero para que me dijera la verdad, le pregunté porque en un principio se recomendó el aborto, el me dijo que si había anomalías en las ecografías, que no fue mentira lo que vio y que si evidenció la malformación, también me reveló que ella pidió el aborto porque le iban a pagar por un bebé sano, y que la bebé que estaba en su vientre venía defectuosa--
- ¿Cómo pudo referirse a su hija como si fuera mercancía?-- comenté.
- así es, pero por mi demanda tuvo que tener a Ana, favorablemente mi niña nació bien, solo que como te comenté ella no lloró ni se movia cuando nació, y eso fue muy extraño, pero aproveche eso para buscar a alguien que me diera un dictamen, revisara a mi hija y me dijera que tenía, un Neurólogo muy conocido y que se hizo amigo mío, me dijo que ella estaba muy bien, que quizás durante el embarazo Corina hizo cosas que afectaron las emociones de Ana--
- por eso los doctores recomiendan cuidarnos en el embarazo, nada de emociones fuertes -- hice el comentario.
- así es, pero ella no lo hizo, lo importante fue que Ana nació muy bien, pero entonces yo le pedí el favor de que me diera un dictamen falso, ya conocía los planes de ella, era obvio que si se enteraba de que nuestra hija estaba bien, buscaría la forma de quitarmela y desaparecer con ella-- contó Gonzalo y entendí todo.
- por eso actuo de esta forma, de bebé solo mi papá me cuidaba, el me lo contó-- hablo Ana.
- si, aunque los primeros dos meses compartíamos custodia, pero ahí era cuando llegaba con los moretones que te conté, me partía el alma imaginarme lo que le hacía esa despiadada a mi hija, así que la denuncie y de nuevo le gané, logré juntar pruebas, ella pagó unos meses en prisión por maltrato infantil, pero salió al pagar una fianza, después de eso, ella solo se aparece esporádicamente en casa para perturbar la paz, entonces cuando Ana creció, hablé con ella y decidimos continuar con esta actuación --
- Pero por cuánto tiempo lo piensan hacer, ¿Por qué simplemente no la enfrentan?-- indague.
- Ella tiene mucho dinero, puede aprovechar que tengo que ir a trabajar y hacerle daño a mi hija, se que siempre la están cuidando, pero aún así no confío en nadie-- respondió Gonzalo.
- yo confío en ti-- me dijo Ana tomándome de la mano, yo le sonreí.
- Gracias por decírmelo, te prometo que ayudaré a tu padre a protegerte-- le aseguré.
- Eres bastante astuta, lo descubriste muy rápido--
- Ana me dió muchas pistas.... Además, en una ocasión los escuché sin querer, ustedes estaban en el cuarto, ví como ella se levantó de la silla y caminó hacia ti, además hablaba, me sorprendió, pero era algo que venía sospechando, pero preferí guardar silencio, no era el momento oportuno para revelar lo que sabía -- les dije.
- Siempre hemos tenido mucho cuidado, pero me alegra que hayas sido tu quien nos descubrió -- dijo Gonzalo.
- Gracias por confiar en mi, prometo no defraudarlos-- una duda se posó en mi mente-- Pero me queda una duda, ¿Ella por qué quería vender a su propia hija? ¿Si tiene tanto dinero, que necesidad habría de hacerlo?-- Indague.
- tenía la misma duda, pero hace unos meses me enteré que ella quería ser parte de una organización donde trafican con niños, ella tenía que dar "algo", o sea a su propio hijo para poder pertenecer a esta organización, como yo trunque sus planes no la recibieron --
- es increíble la maldad de esa mujer, ¿Y tú denunciaste esa organización?-- pregunté asustada.
- Lo hice, pero esto es más turbio de lo que uno cree, la corrupción que existe está esparcida por todo el mundo, los mismos gobiernos se encargan de encubrir todo esto, ya que reciben dineros de estás organizaciones, le di toda la información que tenía a un amigo que esta investigando todo esto, pero no es más lo que yo pueda hacer--
- El mundo está cada vez peor -- comenté.
- por eso tomamos esta medida, se que te puede parecer cruel el hecho de que Ana esté todo el día encerrada, y de verdad tenga que actuar el 100% su personaje, pero por el momento no tengo otra opción --
- ¿y los medicamentos que le suministran para que son?-- pregunté.
- son solo vitaminas, hay Días que las enfermeras solo van pero no le suministran nada, lo hacen para no levantar sospechas, ellos tienen conocimiento de mi plan-- me respondió.
- Fuiste muy meticuloso --
- tenía que serlo, se trata de mi hija-- puntualizó.
Terminamos de dar el paseo y regresamos a casa, realmente todo esto era demasiado, solo podía pensar en todo lo que se ha tenido que reprimir solo para que su propia madre no le haga daño.
El resto de la tarde seguimos con el itinerario y finalmente lleve a Ana a su habitación para dormir, me cerciore de cerrar muy bien la puerta de su habitación, ella fue al baño y tomó una ducha rápida, luego se puso su pijama, yo le leí un cuento y ella se durmió enseguida.
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A la mañana siguiente cambie de turno con la enfermera que la acompañaba cada tres días, yo me fui a casa, está vez Pamela no pudo pasar por mi, así que me fui caminando hasta la salida del área residencial, pasé por una cafeteria y compré unos croissant y dos cafés, luego tomé un taxi y me dirigí a mi hogar, cuando me bajé Pamela iba saliendo.
- Hola Pam, ¿Ya vas para el trabajo?-- pregunté.
- Hola Ana, si, me levanté muy tarde y no alcancé a prepararme el desayuno-- me respondió.
- ten toma esto, come de camino -- le dije mientras le pasaba la bolsa con un pan y el café que traía para ella, me agradeció, nos despedimos y se fué.
