Julia jamás se imaginó lo caprichosa de la vida aquella noche. Un grupo de borrachos la persiguen, se esconde en el auto de un extraño provocando su ira. Como cereza del pastel, presa del miedo se lanza a los brazos de aquel hombre que sin saberlo convertirá su vida en un carrusel de descontrol. ¿Quieres saber en que termina? Entonces sumérgete en este intrigante relato, en donde los caprichos del destino están a la orden del día.
NovelToon tiene autorización de Francy Julieth para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 20
Sueños y deseos
Hoy era el primer día del rodaje, y todo el mundo estaba exhorto en sus labores asignadas. Tenía asignado un papel pequeño y poco recurrente en escena, no me disgustaba porque me daba la seguridad de tener un empleo, pero pasaba tan desapercibida que me hacía sentir atada, sentía que podía hacer mucho más, solo necesitaba una oportunidad para mostrar el talento que sabía que tenía. Mientras arreglaba la utilería y demás trajes de los actores, encontré un guion hecho rollo, lo tomé con curiosidad fijándome que alrededor nadie me viera, me senté en el bordillo de una escalinata mientras en la lejanía veía al director dirigir a todos. Concentrada empecé a leer las líneas, me metí tanto en las palabras que no me di cuenta cuando el subdirector nervioso empezó a gritar.
—¡Quien tomo el guion del director! Buscáis un despido exprés.
—P-pero… Si nadie lo ha visto, seño subdirector…
—¡Cómo es posible que nadie lo haya visto, tomo vida y escapo! —el guion tenía muchas anotaciones, después de un rato de leído me di cuenta que tenía que ser del director. Satisfecha de leerlo, decidí levantarme para darle el guion al director o podría molestarse. Cuando levanté mis ojos de las hojas, oí el percal del subdirector gritándole a algunos actores, preguntaba histérico el paradero del guion del director, estaba a punto de arrancarse los pelos del cabello de la ira. Ay, no que hice… me miro y con apremio pregunto viendo las hojas en mis manos.
—¡¿Se puede saber que estás haciendo con el guion del director?! —Todo el mundo se quedó en silencio mirándome con desaprobación, sin palabras vi que el director llego escuchando lo que estaba pasando, miro mis manos con su guion y con esa sería mirada intente excusarme con rapidez.
—Y-yo no lo tome con intenciones maliciosas, solo lo encontré por casualidad, lo juro —dije intentando aplacar mis nervios, estire el guion hacia el señor Mario. Había molestado al director, que tan mala suerte tenía que tener para disgustar al director el primer día del rodaje.
—¿Qué hacía leyendo el guion una pequeña actriz sin diálogos? —increpo el director con dureza. Todos empezaron a reírse haciéndome sentir estúpida. Avergonzada de todas las miradas y comentarios desdeñosos de los demás, temí que el director me echara, así que me apresure y dije a mi defensa al director que parecía alejarse del lugar.
—¡Aunque no tuviera diálogos, no quiero ponerme detrás de la actriz principal como una estatua! ¿esto no haría que la actuación fuera deplorable? Solamente estaba leyendo el guion para intentar hacer una buena actuación —El hombre se dirigió de nuevo hacia mí con una intensa expresión de interés por las palabras que había acabado de soltar mi boca.
—Parece que tiene mucho que decir ¿No? Pues habla, te escucho —lo mire con decisión comiéndome mis miedos.
—Usted dijo que exigía excelencia a la hora de trabajar a su lado, así que… Quiero dar lo mejor de mí misma sin importar que sea un papel pequeño.
Todos los presentes estaban impactados ante ese atrevido comentario que le había soltado al director con tanta ligereza. Ellos fueron incapaces de creer que tenía las agallas de exigir algo con un papel tan pequeño. Me atrevía porque aspiraba a más, las oportunidades se daban por algo y yo quería aprovechar esta oportunidad, quería por fin cumplir un sueño que se había troncado hace mucho tiempo.