**"EL Eco Del Pasado"** es una novela de romance contemporáneo que sigue la historia de Dante y Emilia, dos almas marcadas por un oscuro pasado y un matrimonio forzado. A medida que enfrentan peligros, traiciones y fantasmas de su historia, descubren que el verdadero amor puede florecer incluso en los momentos más difíciles. Juntos, emprenden un viaje hacia la redención y la paz, buscando dejar atrás las sombras y construir una vida llena de esperanza y nuevos comienzos. Es una historia sobre la fuerza del amor para sanar, perdonar y renacer.
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Capítulo 19: Planificando la Defensa
La noche había caído sobre la mansión Moretti, envolviéndola en una oscuridad silenciosa que solo era interrumpida por el tenue resplandor de las lámparas a lo largo de los pasillos. Emilia y Dante se encontraban en la biblioteca, la misma donde tantas revelaciones les habían sido ofrecidas. Sin embargo, esta vez su propósito era distinto: trazar un plan para enfrentar la traición que amenazaba con destruir todo lo que habían construido.
"Dante, necesitamos recopilar pruebas sólidas de la conspiración de Isabella y Lorenzo," dijo Emilia, su voz firme pero cargada de preocupación. "No podemos enfrentarlos sin algo que respalde nuestras acusaciones."
Dante asintió, sus ojos reflejando la gravedad de la situación. "Tienes razón. Pero debemos ser discretos. No sabemos hasta qué punto están vigilando la casa, ni quién más podría estar involucrado."
Emilia tomó asiento en una de las sillas cercanas a la mesa central, donde varios documentos y libros antiguos estaban esparcidos. "¿Por dónde empezamos?"
Dante se acercó a una estantería y comenzó a revisar algunos archivos. "Podríamos empezar revisando las correspondencias recientes. Si han estado conspirando, es probable que hayan dejado alguna pista en sus cartas o en los registros de la casa."
Ambos comenzaron a revisar meticulosamente los documentos, buscando cualquier indicio de actividad sospechosa. Pasaron horas escudriñando cartas, facturas y diarios personales, hasta que Emilia encontró algo que hizo latir su corazón con fuerza.
"Dante, mira esto," exclamó, señalando una carta parcialmente escondida entre unos libros. "Es una correspondencia entre Isabella y Lorenzo. Hablan sobre una reunión secreta que tendrán mañana por la noche en el viejo ala de la mansión."
Dante tomó la carta, leyendo rápidamente el contenido. "Esto es lo que necesitábamos. Debemos interrumpir esa reunión y obtener más pruebas de sus intenciones."
Emilia asintió, pero una sombra de duda cruzó su rostro. "¿Y si nos descubren? No podemos arriesgarnos a que piensen que estamos vigilando sus movimientos."
Dante la miró con determinación. "No tenemos otra opción. Si no actuamos, ellos seguirán avanzando con sus planes, y podríamos perder todo. Confío en que podemos manejar esto juntos."
Decidieron que la mejor manera de proceder era reunir a aquellos en la mansión que habían mostrado lealtad a Dante y Emilia. Pensaron en Marcos, el mayordomo, y en Lucia, la cocinera, quienes siempre habían sido discretos y confiables.
Emilia llamó a Marcos primero. "Marcos, ¿puedes venir un momento? Necesitamos hablar contigo en privado."
Marcos, un hombre de edad avanzada con una presencia imponente pero amable, asintió y se dirigió a la biblioteca. "¿Qué sucede, señorita Emilia?"
Emilia le explicó brevemente la situación, omitiendo algunos detalles delicados pero asegurándose de que entendiera la gravedad de la conspiración. Marcos escuchó atentamente, su rostro endureciéndose con cada palabra.
"Haré lo que sea necesario para proteger a la familia," afirmó Marcos con solemnidad. "¿Cómo puedo ayudar?"
"Necesitamos que nos ayudes a vigilar los movimientos de Isabella y Lorenzo," indicó Dante. "Cualquier cosa que escuches o veas debe ser reportada de inmediato."
Marcos asintió, su lealtad inquebrantable. "Considerenme a su disposición."
Luego, buscaron a Lucía, quien estaba en la cocina preparando la cena. Emilia la llamó y le pidió que se uniera a ellas. Al enterarse de la situación, Lucía mostró una expresión de preocupación, pero también de determinación.
"No dejaré que nada les suceda," dijo Lucía, con voz firme. "Haré lo que esté en mis manos para ayudarlos."
Con Marcos y Lucía a su lado, Emilia y Dante se sintieron un poco más seguros. Sabían que no estaban solos en esta lucha.
Esa noche, mientras las sombras se alargaban en los corredores de la mansión, Isabella y Lorenzo llegaron al viejo ala, siguiendo el plan que habían trazado juntos. Sin embargo, no esperaban encontrar resistencia.
Emilia, Dante, Marcos y Lucía estaban escondidos en una sala adyacente, observando en silencio mientras Isabella y Lorenzo discutían sus planes. Emilia tomó nota mental de cada palabra, cada gesto, mientras Dante grababa discretamente una conversación clave en su dispositivo móvil.
De repente, Isabella mencionó algo que hizo que Emilia se estremeciera. "Si todo sale según lo planeado, mañana por la noche tendremos el control total de la mansión. Dante no tendrá escapatoria."
Dante apretó los dientes, su determinación renovada. "No permitiré que suceda," murmuró para sí mismo.
En ese momento, Lorenzo propuso una idea aún más perturbadora. "Es hora de eliminar cualquier amenaza potencial. Emilia es una pieza clave en sus planes, y su lealtad podría vacilar si nos descubrimos."
Emilia sintió el mundo girar a su alrededor. "¿Hablan de mí?" preguntó en voz baja, pero su voz fue captada por los demás presentes.
Isabella y Lorenzo se volvieron abruptamente hacia la sala, sorprendidos por la presencia inesperada de Emilia, Dante, Marcos y Lucía. El ambiente se volvió tenso en un instante.
"¿Qué está pasando aquí?" exigió Lorenzo, su rostro encapuchado por la ira.
Dante dio un paso adelante, sosteniendo el dispositivo móvil que había grabado la conversación. "Esto es lo que planean, Lorenzo. Sus conversaciones, sus planes... todo está grabado aquí. Tienen que rendirse ahora."
Isabella intentó interrumpir, pero Marcos intervino con una voz autoritaria. "¡Basta! Sabemos todo lo que han estado tramando. No permitiré que destruyan lo que hemos construido."
Lorenzo frunció el ceño, su mirada calculadora. "¿Creen que pueden detenernos? La familia Moretti siempre ha prevalecido, y no será diferente esta vez."
Lucía dio un paso adelante, su voz temblorosa pero decidida. "No, no así. Hemos descubierto sus planes y los expondremos. Nadie se saldrá con la suya."
La confrontación se intensificó rápidamente. Lorenzo, enfurecido, intentó avanzar hacia Dante, pero Marcos lo detuvo con una firmeza inquebrantable. "No pasarás, Lorenzo. No mientras estemos aquí para detenerte."
Isabella, viendo que su plan se desmoronaba, trató de apelar a la razón. "Esto no tiene que terminar así. Podemos encontrar una solución que beneficie a todos."
Pero Dante, sosteniendo la evidencia en su mano, respondió con firmeza. "La traición no tiene lugar en esta familia. Es hora de que enfrenten las consecuencias de sus actos."
Finalmente, con la presión de la evidencia y la presencia de todos los aliados, Lorenzo e Isabella se vieron obligados a retroceder. Sabían que no podían ganar esta batalla sin arriesgarlo todo.
"Esto no ha terminado," murmuró Lorenzo, mientras él e Isabella abandonaban el viejo ala, dejando atrás una estela de resentimiento y furia contenida.
Emilia y Dante respiraron aliviados, pero sabían que aún quedaba mucho por hacer. Habían ganado una batalla importante, pero la guerra por mantener la integridad de la familia Moretti apenas comenzaba.
Esa noche, mientras la mansión volvía a su aparente calma, Emilia y Dante se sentaron juntos, reflexionando sobre lo que habían logrado y lo que aún les esperaba.
"Lo hicimos," dijo Emilia, tomando la mano de Dante. "Pero debemos estar preparados para lo que venga. Lorenzo e Isabella no se detendrán fácilmente."
Dante asintió, abrazándola con fuerza. "Sí, pero ahora tenemos aliados y pruebas que podemos usar. Juntos, podemos proteger a nuestra familia y romper este ciclo de traición que ha oscurecido nuestras vidas durante tanto tiempo."
Emilia sonrió, sintiendo una renovada esperanza. "Estoy contigo, Dante. Juntos, podemos enfrentar cualquier sombra que se cruce en nuestro camino."
Y así, con la determinación renovada y el apoyo de sus leales aliados, Emilia y Dante se prepararon para enfrentar los desafíos que aún les aguardaban, sabiendo que, unidos, podían superar cualquier obstáculo que el destino les presentara.