Isabella Quintana, una mujer de veintiséis años, que esconde algunos secretos, que quedan al descubierto, cuando su guardaespaldas y, su pareja con la que a vivido durante más de ocho años, en secreto sin que nadie lo sepa.
Tras la muerte de su guardaespaldas, se desencadenan varios conflictos donde,
sé ve implicada, en un accidente.
Donde la culpan a ella de ser la principal sospechosa y, es secuestrada por Alek Petrov, un mafioso, de procedencia Rusa.
Quien está dispuesto a quitarle la vida, con tal de que pague, por lo que ha hecho, pero queda impactado con su belleza, cuando la ve por primera vez en unas fotos.
Acompañame en está nueva historia, a descubrir donde la traición, y la ambición y los conflictos de amor, jugando su papel principal.
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A Alek le molesta la presencia de Tania
Estás aquí por decisión de mi hermana y, porque eres su única amiga y te lo agradezco, pero en lo que se refiere a mí no eres de mi agrado.
Si lo que buscas es tener un acercamiento conmigo, es mejor que no lo intentes estamos claros. Sí lo que tienes es calor, te aconsejó que te duches con agua fría
Dichas estas palabras Alex, se da la media vuelta saliendo de la casa dejando a Tania sin saber qué responderle, ella nunca se imaginó que Alek la fuera a rechazar de esa manera que solo se dejó para sí misma. Esto lo hace más interesante lo difícil es más excitante eso me gusta.
Entro a la casa molesto subo las escaleras y, voy directo a mi habitación, esa mujer me pone de mal humor sus coqueteos son cada vez más descarados, si sigue así tendré que hablar con mi hermana, para que se vaya esa mujer de aquí.
Ya bastante tengo contener a Isabella dentro de mi casa, y luego con sus locuras de estarme torturando por las cámaras, me estoy volviendo loco, pero al pasar junto a la habitación de Isabella me detengo estoy a punto de abrir la puerta, pero me arrepiento decido mejor irme a mi habitación.
Me levanto, porque los primeros rayos del sol me levantan, pues dejé la ventana sin cerrar las cortinas, hoy hacia la ventana, es un hermoso amanecer.
Llevo aquí casi un mes sin salir de este cuarto en todo este tiempo ya intenté escaparme, la primera vez fue cuando Irina la empleada dejó la puerta abierta cuando trajo la comida, por más que traté de encontrar cómo salir no pude, todo está muy bien vigilado por la gente de Alek, la segunda vez me hice pasar por enferma fingí un dolor inmenso en el abdomen, pero cometí el error de querer escapar, cuando estaba en la ambulancia y no me percaté que Alek, venía detrás de la ambulancia con varios de sus hombres.
Estoy cansada de estar en este lugar y, todavía no sé cuál fue el motivo de lo que yo le hice a la hermana de Alex, y el por qué él quiere seguirme teniendo aquí encerrada.
Creo que sí quiero saber qué es lo que este hombre quiere de mí, voy a tener que cambiar de estrategia voy a aplicar ese dicho si quieres saber cómo piensa el enemigo. * únete a el * Y eso es lo que voy a hacer, había olvidado por completo, que * K * Me dijo que fuera a su departamento que ahí habían cosas que me iban a servir.
¡¡Pero a qué se refería con eso!!
Buenos días, señorita Isabella. Entra Irina llevando la bandeja del desayuno para Isabella.
Veo que entra Irina enseguida le respondo. "Buenos, días Irina, dígale al señor que quiero hablar con él"
Está bien señorita Isabella yo le digo. Después veo que sale Irina de mi habitación, me metí a darme una ducha cuando salí de ducharme solo salí envuelta en una pequeña toalla que dejaba mucho que a simple vista, casi se me salen los ojos al ver a al parado frente a mí a Alek. Que no sabes tocar la puerta de una habitación para entrar.
El muy cínico riéndose me responde. Usted pidió hablar conmigo y qué puedo ver que no haya visto ya.
No me quedó más que no responderle nada, pues en eso tiene razón, pues yo lo he estado provocando quitándome la ropa frente a las cámaras, pues con eso acabo de comprobar que me tiene vigilada a cada movimiento que yo hago, dentro de la habitación él lo está viendo.
Y dígame señorita Isabella qué es lo que quiere que hablemos.
Me doy la vuelta en busca de mi ropa, mientras me visto le digo. Quiero que me diga, cuánto tiempo me piensa tener aquí, ya han pasado más de un mes que llegué y, todavía no me ha dicho cuál es el motivo creo que tengo derecho a saber.
Mientras que Isabella trata de hablar con Alek en la mansión de los Quintana Henry y lían, han hecho todo lo posible por encontrar a Isabella, pero no han podido dar con su paradero, así que no les quedó más que decirle a sus padres, lo que está pasando con Isabella al saber Andrew de la desaparición de su pequeña enseguida viajan a las Vegas junto con Alondra, a ellos también se unen y Itzel, Luis, Will con su esposa todos se reúnen en la mansión Quintana, la cual no le gustó Alondra que estuviera ocupada por Henry es su esposa, cuando la orden había sido que Isabella fuera quien se quedara con la casa.
Pero, como es de esperarse con la llegada de Itzel, a la mansión lo primero que está hace es comenzar a reclamar, pues no se queda callada le dijo sus verdades a Cristina, terminando en pleito las dos mujeres se desafiaron que tuvieron que intervenir los hombres, pues se ha vuelto una mujer demasiado fría calculadora y de armas tomar y no perdona.
Basta dejen sus pleitos, para después tenemos trabajo por hacer es encontrar a Isabella, a cómo de lugar les dice Andrew casi gritándoles.
A lo que Cristina le responde, en un mar de lágrimas yo no he hecho nada, para que ella me quiera acusar de la desaparición de Isabella.
Itzel enseguida le dice. ¡¡Cállate!! No sé por qué presiento que tú tienes que ver con la desaparición de mi sobrina que no sea verdad mi sospecha, porque juro que te voy a hacer pedacito la vida.
Le dice Itzel viéndola con una mirada siniestra que hizo que Cristina retrocediera, a Henry no le gustó la amenaza de Itzel que hice en contra de su esposa enseguida le respondió a su tía. No tienes por qué amenazar a mi esposa de esa manera, tía ella no tiene nada que ver con todo lo que está pasando.
Itzel solo levanta una ceja viendo a su sobrino Henry, le da una media sonrisa y le dice. Espero sobrino estar equivocada, pero yo jamás me equivoco en mis sospechas si no pregúntale a tu madre qué pasó aquí hace años en esta casa.
Alondra se acerca a su hermana tranquila. Itzel, Cristina no tiene nada que ver con lo que estás pensando.
Andrew se apartó de todos ellos se fue a su antiguo despacho mientras él hacía varias llamadas.
En la mansión de Alex, él decide hacer un trato con esa vela.
Está bien haré un trato contigo, quiero que esta noche me acompañes a una cena y todo depende de cómo deportes te diré el porqué estás aquí.
*Isabella sonríe para sí misma, sabe qué fue la mejor idea que pudo tener. * Está bien qué es lo que tengo que hacer* *