La Diabla

Me desperté a las 13 horas, me duché y bajé a comer, luego fui al living, donde vi y agradecí que estuvieran todos.

— Hola, gracias a todos por desocuparse y venir conmigo. La información es rápida, me voy a Italia, pero antes de subir al avión quiero hablar con cada uno de ustedes, ¿me prestaria su despacho señor Ivanov?— le pregunté al padre de Nico.

—Claro que si niña— responde él.

—Bien, empezaré con ustedes señores.— los señalo.

Fuimos al despacho y me senté en el sillón, también les Di una carpeta con mucha información porque haber sido una secretaria importante me dio la garantía de que yo no tenía límite. Entraba a donde fuera, leía la información que quisiera y lo descubrí; el contador robaba plata, a cada empleado le robaba 100 dólares y sé que puede parecer poco, pero con más de 200 empleados se hacía muy buena plata cada mes y aumentaba considerablemente su salario. No hice mas que agradecer todo lo que hicieron por mi y demostrar el cariño que les tenía. Después fueron pasando mis amigos, a los cuales cada uno de ellos los aconsejé y por los próximos 15 minutos era su psicóloga, lo qu supieron aprovechar.

Llegado el turno de Nicolai hice lo mismo que con el resto, di consejos, agradecí, fui psicóloga y también lo agarré a golpes por cada mujer que se enamoró de él y terminó desilucionada.

Nos reímos tanto que se nos había pasado el tiempo. Ya eran las 15 hs y lo tuve que hechar porque en una hora me voy, pero necesitaba de verdad ver a Jasha y estaba ansiosa.

—Vete Nico, te di demasiado tiempo y necesito estar con Jasha— dije directamente.

Nicolai me miró asombrado porque utilicé palabras que no debía, pero no importaba, no le explicaré.

—¿Estar con Jasha? ¿quieres profanar el cuerpo de mi amigo? —sonrío pícaro —Dios eres traviesa, pero no quiero saber nada, eres mi hermana y no lo quiero ni pensar.— empezó a negar con su cabeza.

— No jodas Nico, él no es un santo y sé lo que quiere o siente, es mutuo y debo demostrarselo antes de irme— dije.

Saqué a empujones a Nicolai que estaba totalmente asombrado, más que antes, fue demasiada información para él, pero se despertó de su trance cuando Jasha entró y estaba por cerrar la puerta... por lo que gritó para dejarme en ridículo.

—NO LO VIOLES, RUBÍ.

Me quería morir de la vergüenza, estaba colorada y ahora no sabía cómo comenzar a hablar.

—Bueno aquí estoy— se señaló a sí mismo mientras se sentaba en un sillón— espero que Nicolai y yo tengamos un repertorio diferente, puedo pensar que con él fue así por el tiempo que estuvieron encerrados.

—Lo de ustedes es un poco diferente— asentí—los señores Ivanov fueron los primeros porque debía mostrarles algunas cosas, y como le dije a Nico, ellos no saben lo que ustedes sí. Traté de mantenerlos lejos de todos los problemas y conocen poco de mi vida, no es por ser desagradecida, sino porque ellos son importantes para mí y no quería ser una decepción para ellos, o incluso que me mirarán con lástima. —alzo los hombros— Prácticamente repetiré cada repertorio, pero agregare algo al final. ¿Listo? ¡es largo!— advierto. Jasha sólo asintió con la cabeza y yo seguí hablando.