En una tribu donde los demonios dominan y los humanos son vistos como enemigos, Tae, una joven demonio, es rescatada por Aarón, un humano común y corriente. A medida que sus caminos se entrelazan, surge un amor prohibido que desafía las normas de su tribu. Sin embargo, Alma, movida por la envidia y el capricho, hará todo lo posible por destruir su romance. Entre pasiones desbordadas y secretos oscuros, Tae y Aarón deberán luchar no solo contra los prejuicios de su mundo, sino también contra aquellos que desean separarlos. ¿Podrá su amor sobrevivir en un lugar donde lel romance esta prohibido?
NovelToon tiene autorización de Brabell para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 24
El laberinto Dola ubicada a unos kilómetros de la tribu cruzando el bosque y parte del desierto.
La razón del viaje era asustar a Tae pero para sorpresa de Alma no tenía ni pizca de duda en su rostro...
Sorprendida por esto Alma comienza a ceder antes que ella pero Aarón lo impide diciendo que no tenga miedo.
No había razón para que solo tres personas estuvieran en el laberinto Dola, es cierto que entre los tres era el menos peligroso pero ni siquiera un grupo de adultos consigue superar la mitad.
Lo mejor era dar la vuelta y volver a casa pero su orgullo no se lo permitió, si volvía mostraría miedo frente a Tae y Aarón rompiendo toda imagen que ambos tenían de ella.
Alma busca entre sus ideas algunas para evitar entrar sin éxito.
—Vamos—. Exclama Aarón.
Él se ve emocionado incluso con su fuerza humana se esfuerza para abrir las enormes puertas de piedra tan pesadas que apenas las movía.
La sorpresa es doble, mover esas puertas con su escasa fuerza es demasiado ilógico... Aunque es poco pero lo está haciendo.
¿Acaso es magia? Tae no duda en ayudarle juntos consiguen abrir una de las puertas mientras Alma solo observa con temor lo que deberán afrontar.
El interés por Aarón y la imagen personal ya no le parecía tan importante cuando abre aquellas puertas directas al infierno.
—D-Deberíamos volver... Los adultos no saben lo que estamos haciendo podríamos tener problemas—. Comenta Alma en un intento de volver en sus pasos.
Tae la mira con algo de sospecha es la primera vez que Alma era ambigua e insegura, viajar tan lejos para luego arrepentirse no era propio de ella.
—Alma...—. Murmura casi en silencio.
Nerviosa Alma comienza a jugar con el final de una de sus trenzas marcando sus nervios y dejándolos en evidencia, lo que hace que Tae se ponga en guardia.
—Mia y Kim estarán furiosos si se enteran al igual que mi padre Als—. Declara nerviosa.
En este punto era claro su arrepentimiento que contagiaba a su compañera de travesuras.
Por otro lado Aarón no se lo piensa dos veces para entrar con una sonrisa en el rostro.
Tae mira indignada a su amiga, no, su rostro muestra desprecio o tal vez desilusión de la persona en la que se ha convertido Alma desde la aparición del humano.
Solo una mirada antes de entrar junto a él pero Alma puede sentir como esa imagen logra tocar su corazón entendiendo lo torpe que actuaba como si no fuese ella.
Alma jamás traería a dos jóvenes junto a ella a un laberinto por un amorío sin sentido, por un capricho de obtener algo que no tiene y al ver que alguien más lo tiene lo quiere.
—¡Escuchen debemos volver a la tribu! ¡Ahora!—. Exclama con fuerza entrando al laberinto.
—¿Q-Qué?¿Alma?—.
—Tae yo... Yo...—.
Entre dientes y evitando la mirada de su amiga Alma siente el dolor en su pecho hasta ahora ha hecho todo mal por que sus motivos eran puros caprichos tontos, ahora se daba cuenta de como estaba haciendo mal y arriesgando sus vidas... Y la suya misma.
Ambas cruzan sus miradas con sinceridad por parte de Alma por primera vez, Tae espera con ansias nerviosas lo que tenga que decir.
Una mano en forma de puño en el pecho de Tae mientras observaba como lentamente la puerta tan pesada se cerraba sin que nadie la empujara.
Tan solo un vistazo a lo que sucedía y sin nada que hacer estaban encerrados en el laberinto.
Las puertas solo se abren en una dirección por seguridad, es decir, solo es posible salir si alguien más abre las puertas desde fuera algo que no pensaron, ya que Alma nunca creyó que algo así pasaría.
No conozco una forma de salir de aquí, estás puertas no se pueden tirar hacia atrás, solo empujar desde fuera.
—Ay no— Mientras con temor se dirije a Tae —Las puertas... No pueden abrirse desde fuera... Estamos encerrados—.
Al escuchar estas palabras intenta abrirla empujando una de ellas y también tirar sin conseguir que se moviera ni un milímetro.
No hay lugar para Tirar y abrir las puertas como las puertas normales no existe lugar de donde arrastrar las puertas a su dirección.
Alma también ayuda con un sentimiento de culpa pero no tarda en rendirse.
—Es inútil, estas puertas fueron creadas para que no pudiesen ser abiertas por ninguna bestia o monstruo con extremidades o garras....—. Murmura Alma tocando uno sus codos.
—¿Cómo ibas a salir? ¿Planeabas quedarte aquí con Aarón? ¿Es una especie de suicidio?—. Pregunta en un ataque de confusión.
—No tenía pensado venir idiota... Solo quería que nos dejaras solos, quería que fueses cobarde como de costumbre y dieras un paso atrás para hacer lo que se me de en gana... Nunca creí que esto llegaría a estos extremos—.
—No entiendo... ¿Entramos por nada? Creí que saldríamos si era complicado... Creí que junto a Aarón superaríamos el laberinto sin problema—. Exclama ella.
—¿Eres idiota? Él es solo un humano con algo de magia, ni siquiera Kim puede completar el laberinto no hay forma de que solo nosotros lo completáramos... No existía tal cosa como ayudar a los demás, era solo una mentira ¿Entiendes? Mentí—.
—N-No puede ser... No tienes que mentirme somos amigas yo podría—
—¡No lo somos!— Alma la detiene de un grito —No somos amigas, estoy en una escala superior a ti en más de un sentido, no somos iguales no podemos ser amigas, no es solo por su aparición—. Finaliza apuntando a Aarón.
—¿Hablan de mí?—. Pregunta confundido.
—Eso no tiene nada que ver, siempre hemos estado juntas no somos diferentes—.
—Por favor no... No digas eso, eso es solo por que somos primas pero nada más... No somos iguales en lo absoluto—.
Alma muestra sus verdaderos pensamientos de como veía a su prima como un familiar inferior a ella lo que molesta un poco a Tae pero ella insiste en que son amigas a pesar de las diferencias.
—Tu eres la inferior... Eres la siguiente líder y haces algo como esto... Encerrarnos en el laberinto por tus celos—. Reclama ella.
—Yo también es estoy dentro ¿O te olvidas? Lo sé, hice mal... Pero por ahora solo... Solo busquemos una salida, los monstruos salen por algún lugar hay que buscarlo—.