1000 Años

Qiang sigue revelando detalles de las batallas contra los kitanos, que el ejército Song no puede contra el enemigo fácilmente, ellos tienen buena estrategia, la zanja les ayuda, pero no tanto como lo habían pensado. Según Qiang, las luchas se mantuvieron intensas por varias estaciones, y según las visiones fueron tres años, es decir que hasta el año 989. Año en que murió el general, ese hombre logró enamorar a Mei, ahora un militar que estaba listo para el cargo de general, hizo su juramento después del entierro.

Lin tiene mucha información que procesar, durante toda una semana, puras batallas, muchas victorias y pocos refuerzos. Los Song pelean sin cesar, no permitiendo que el enemigo invada su  territorio. Casi no hay información de Mei, al parecer ella pasó tiempo sola llorando por el general.

El arqueólogo necesita más información sobre Mei, pero ella no se manifiesta, quizás no es el tiempo apropiado. Mientras Lin pone orden a todos sus apuntes de la semana, va ubicando fechas y va armando la nueva malla histórica, con la ayuda de viejos mapas, va armando los desplazamientos según Qiang le va revelando.

El soldado toma posesión del cuerpo del arqueólogo y le indica punto por punto como fueron los movimientos de ambas tropas y porque perdían. Con la ayuda de marcador, Lin, bajo posesión de Qiang, hace los trazos de rojo para los Song y de azul para los kitanos.

Poco a poco se esclarecen los motivos de las victorias. De repente, suena su teléfono y era un mensaje de Ana. Lin dejó los lápices sobre el mapa y atiende el mensaje de Ana.

“Buenas noches, licenciado Kong. Soy Ana. Usted sigue ocupado ¿verdad?”

Lin, sonríe. Hablar con Ana le alivia un poco del estrés.

- “Buenos días, señorita Ana. Es un placer poder leer su mensaje.”

Ana, no esperaba recibir el mensaje tan rápido. Supuso que no tenía mucho trabajo y le responde.

- “He tenido una visión, se trata de la misma mujer que la primera visión”.

¡Bingo! Lin pronto tendrá más información de Mei.

-“Dígame, tengo tiempo para leer sus mensajes”

Ana le escribe que si  favor le daría tiempo para escribir el mensaje. Una hora después le escribe.

“Qiang fue castigado por responder a su general, luego él me pidió que cuide del castigado hasta que se recupere del todo, pero que jamás estaría sola, siempre un guardia conmigo por seguridad. El general de nombre Zhao me hacía regalos de vez en cuando, me daba flores y yo con la arcilla hacía platos, vasos, floreros y otras cosas para el hogar, siempre fue bueno conmigo. Cuando Qiang volvió al ejército, dejé de verlo, fue un alivio, no había quien me hablara tan mal.  Las batallas son más frecuentes y en una de ellas perdí al general Zhao, lo quería mucho y lloré bastante. Qiang estuvo escalando rango en el ejército y poco a poco me enviaba regalos, tenía miedo de aceptarlos, como él es malo, pensé que era una trampa, actué siempre con cautela, siempre fue tosco, por más intentos que hizo por imitar al general Zhao, siempre le tuve miedo. Su mirada era fuerte, como si estuviera molesto todo el tiempo. Cada vez que se acercaba yo retrocedía, él seguía, intenté huir cada vez, pero era mas rápido que yo y me atrapaba, quería ser cariñoso, pero mi cuerpo temblaba del terror por si me daba golpes, al no dejarla escapar, gritaba. Esos momentos se verán terribles para mí, él me dejaba ir, pero me vigilaba, me sentía indefensa sin el general, el nuevo general era otro Qiang, no podía pedirle ayuda. Mi vida ya no tenía sentido, cuando murió el general Zhao, todo murió en mí. Qiang era la sombra que me aterraba.”

El arqueólogo leyó cuidadosamente el mensaje y lo impresionante es que ahora está el nombre del general y es Zhao, y tradujo del inglés al chino para tener todos los datos completos de Mei, pero por alguna razón, Lin lloró al traducir las últimas líneas, era Qiang que se desahogaba usando al arqueólogo.

- ¿Tanto lo has querido Mei? ¿Todo el tiempo me has tenido miedo?  Te quise tanto Mei, estaba tan celoso de Zhao, que todas las cartas que te enviaba,  yo las robaba. Al mensajero lo amenacé con matarlo si hablaba, las cartas las leí todas, hasta la última carta las guardé en un caja y la sepulté.

Lin había escrito todo lo que había murmurado, Qiang salió del cuerpo de Lin, se desahogó y reveló más cosas. Al leer su última línea, Lin tuvo la curiosidad de buscar esa caja y desenterrar los sentimientos del general Zhao por Mei.

Para Lin le fue difícil escribir un mensaje a Ana, necesita reponerse, asimilar estos nuevos datos le tomará un poco de tiempo. Apenas se recuperó le respondió.

- “Señorita Ana, gracias por contarme la visión, nuestra historia está con detalles que no entendíamos. Su colaboración sigue siendo valiosa. Nuevamente gracias.”

Lin envía el mensaje y apaga su teléfono. Ahora tiene mucha información para la reunión de éste lunes. Lo que lo intriga es saber dónde está sepultada la caja con las cartas del general Zhao, saber que tan profundo era su cariño por Mei

Los Liao no han podido ganar los primeros años de batallas contra los Song, fueron superados en estrategia, pero éstos tuvieron un precio que pagar. Es considerado un fracaso hasta el momento. Otro asunto que terminó en fracaso fue la vida de Zhao, Mei nunca recibió sus cartas porque los celos de Qiang estaba a flor de piel, el amor del general llegó a su fin con su muerte. Y el otro fracaso es del mismísimo Qiang, por más intentos de conquistar a Mei, ella siempre le tuvo miedo, siempre lloraba, temblaba.

Tres situaciones, dos fracasos. Qiang aún tiene la esperanza de cuidar de Mei en el más allá, él está convencido que por medio de Lin, puede convencer a Mei de su cariño, hacerle entender que él ha cambiado y que está dispuesto a cuidarla, que ésta vez podrán descansar en paz.