Herida en el Corazón

"Eh Li", dijo su compañera de pupitre.

"¿Sí, qué pasa?", respondió.

"Sabes que Clara, la reina de la intimidación, está saliendo con Bastian, su compañero de clase, según los internautas de la escuela. Lo vi en el grupo", dijo.

"¿En serio? ¿Él querría estar con Clara, con esa forma de ser?", preguntó con inocencia.

"De verdad, también me sorprendió, pero Clara está más guapa ahora, ¿no? Su maquillaje ya no es tan exagerado".

"Es cierto, estoy de acuerdo", intervino otra amiga.

Al oírlas elogiar a Clara, Lili apretó los puños con fuerza, disgustada por que Clara fuera el centro de atención.

"Debería ser yo a quien admiraran, ¿pero por qué esa zorra?", pensó.

No la dejaré ser feliz, le quitaré lo que ya era mío: la atención de su familia y el cariño de los que la rodean, dijo con una sonrisa socarrona.

"Bueno, pero mejor así, ¿no? De esa manera, ya no tendrás que salir en secreto con el presidente de Antariksa", preguntó.

"Es cierto, Li, también lo he notado cambiar".

"Creo que os estáis dejando influenciar por su actitud. No es tan buena como parece", respondió con inocencia.

Mientras tanto, las amigas de Lili enarcaron las cejas, sorprendidas por la actitud de Lili, a la que no le gustaba el cambio de Clara.

*****

Comenzó el primer descanso y los alumnos se dirigieron al comedor del colegio para llenar sus estómagos.

Hacía mucho calor en la escuela, lo que sofocaba a los alumnos, incluido el grupo Antariksa, que estaba sentado bajo el árbol de acacia donde había asientos para que los alumnos se protegieran del sol.

"Joder, qué calor hace, estoy sudando. En clase también hacía mucho bochorno, y Sindi apestaba a sudor, me estaba dando arcadas al estar cerca de ella, ¡puaj! Quería vomitar", se quejó Alif.

"Jajajaja, me lo imagino", dijo Danu, presenciando las payasadas de sus amigos.

"Es guapa, pero es una pena que huela a sudor, no puedo acercarme a ella. Mi alma de playboy se desvanece cuando estoy cerca de ella, tío", dijo Alif.

"Esa es una señal de que debes arrepentirte", respondió Devan.

"Sí, es verdad, arrepiéntete. Tienes demasiadas chicas, por eso te llaman así. He visto a papá, mamá, cariño, cielo... cada una con su título, tío".

"Sí, es verdad, el karma te golpeará, ya verás el karma del playboy".

"Jajaja".

Leon se limitó a escuchar en silencio las charlas de sus amigos.

Al poco rato llegó Lili.

"Hola, Leon", dijo con una dulce sonrisa y una mirada inocente.

"Te he traído una bebida fría", dijo, ofreciéndole una botella de zumo de naranja que había comprado en el comedor de la escuela.

"Gracias", dijo Leon con una leve sonrisa.

"Mira, el borde está sonriendo, sonríe cuando su amor está cerca", dijo Alif.

"Eh, chicos, lo siento, solo he traído una para Leon".

"No te preocupes, Li, nosotros tampoco tenemos sed", dijo Devan con su suave voz.

"Devan, ¿es verdad la noticia de Lambe Turah sobre Clara y Bastian?", preguntó.

"No lo sé, y no me importa", respondió.

"Pero es tu hermana pequeña", preguntó.

"Estaría más contento si fueras tú mi hermana pequeña, ¿sabes?", dijo Devan acariciando el largo cabello de Lili.

"No deberías hacer eso, Van. Al fin y al cabo, sigue siendo tu hermana pequeña. No seas tan cruel con ella, te arrepentirás", dijo Danu, que sentía que la actitud de Devan empezaba a ser demasiado.

"Además, lo que dice Devan es cierto", dijo Leon. "Solo está intentando ganarse nuestra simpatía, fingiendo que ha cambiado", dijo Leon.

"Sinceramente, me alegro de ver a Clara más alegre ahora con sus compañeros de clase. La aceptan como a una más, a pesar de que la apodaban 'la reina de la intimidación', pero nunca la menosprecian. Sin embargo, tú, su propio hermano, la tratas con crueldad", dijo Danu, y los dejó allí plantados.

"Dan, Dan, ¿qué te pasa? ¿Por qué gritas?", dijo Alif.

"Sí, Danu se ha enfadado", dijo Alif.

"Déjalo, ¿por qué iba a defenderla? Me da asco", dijo Leon.

Devan se quedó callado, pensando en las palabras de Danu. Había algo que le hacía sentirse incómodo y no sabía qué era.

"Huf".

"No te tomes a pecho las palabras de Danu, a lo mejor solo está sensible", dijo Leon.

"Maldita sea", pensó Lili.

"No puedo permitir que Danu defienda a esa chica".