Una tarde como cualquiera, Andi escuchó el grito de una niña que le decía "papá" a su esposo. En ese momento, ella sintió que el amor era egoísta y cruel. Pero nadie sabia que ese encuentro cambiaría sus destinos.
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Peligro
Andi recibió alarmada la llamada de la escuela de Lara. No entendía la urgencia, pero dejó su trabajo y se fue a la escuela. Al llegar, le dijeron que vaya a directamente a la dirección. Tocó la puerta con los nudillos de la mano; una voz de adentro le dijo que pasara. Andi abrió la puerta.
—Acérquese, por favor, tome asiento— le dijo la directora. Una mujer de unos cincuenta años aproximadamente, pero que aparentaba de menos.
—Muchas gracias— dijo Andi y se sentó en frente de la directora.
—Perdón por llamarla con mucha urgencia, pero estamos preocupados por la niña.
—¿Qué pasó con Lara?
—La seño, en clase, les pidió que realizaran un dibujo de la familia y esto fue lo que dibujó Lara— explicó la directora, sacando un dibujo de un folio para mostrarle a Andi.
Andi tomó el dibujo y lo observo con mucho cuidado, en el dibujo se mostraba una familia feliz, pero lo que llamaba la atención era unas pequeñas sombras que parecían de terror.
—Sabemos perfectamente que Lara perdió a sus padres en un accidente; quizás esto la haya afectado y haya tenido pesadillas la niña.— comenta la directora, muy preocupada.
—Estos días Lara a estado actuando normal, aun principio le costó adaptarse a la nueva vida, pero este dibujo me llama mucho la atención. Voy a hablar con ella para saber si hay algo que la está asustando.
—La maestra quiso preguntarle, pero tenemos miedo de, que toquemos temas que no podamos responder o la pongamos sensible y no sepamos cómo contenerla por los hechos de los últimos días.
—Muchas gracias por su preocupación, yo hablaré con la niña y veré como puedo hacer que tenga una vida mejor.
—Si a la madre de Lara le estaría contando esto, estaría haciendo un gran lío.
—¿Tan mala era Aylin?
—Fueron contadas las veces que trajo a la niña a la escuela. Siempre le traía el chófer o su padre.
—Lara es un amor de personita, cualquier cosa que pase, por favor, no dude en llamarme.
—Claro. En quince minutos saldrán de clases, si quiere puede esperarla.
—Sí, lo haré.
Andi se despidió de la directora y salió a la salida de la escuela para esperar a Lara. Cuando salía un rostro conocido estaba en frente esperando su llegada, Andi le sonrió.
—¿Qué haces aquí?— preguntó sonriente.
—¿No vas a saludarme antes?
—Hola, Kevin.
—¿Sabes que te hace falta?
—¡Qué!
—¡Esto!...— dijo Kevin dándole un beso corto en los labios a su esposa.
—¡Hey!... tranquilo que me vas a comer los labios— dijo Andi cortando el beso.
—No dejo de pensar en ese día.
—¿Qué día?
—El día que fuiste mía.
—Solo fue algo de momento.
—De momento hermoso.
Andi y Kevin se divertían con sus juegos de palabras y declaraciones. Lara no pudo evitar sonreír cuando les vio juntos al salir de la escuela. Corrió hacia ellos, Kevin la levantó en sus brazos al ver que venía, la llenó de besos. Después de un momento, Andi también abrazo a la niña y la besó en la frente.
Su alegría, como un fantasma, desapareció en cuestión de segundos de sus rostros. La ira y la bronca en los ojos de Diana era como un hechizo malicioso; miraba a Andi como a una rival.
La niña al reconocerla se escondió detrás de Andi, su pequeño corazón intuía peligro. La tristeza volvió a los ojos de la niña, esa presencia impregnaba su aliento, no pudo sostener su pequeño cuerpo y cayó.
Andi la sostuvo en sus manos antes de que se desvaneciera al suelo por completo, "Lara..." gritó, pero la niña no reaccionaba. Kevin de inmediato las subió al auto y se las llevó al hospital.
—¡No pueden pasar!— empezó diciendo el médico que recibió a la niña.
Kevin detenio a Andi, antes de que corriera tras el médico.
—¡Suéltame!...— gritó Andi.
—¡También estoy preocupado!, pero no podemos hacer nada. Solo esperar.
—¿Qué es lo que quieres esa mujer?
—Dice que es la madre biológica de Lara.
—Ya te dije que Aylin era su madre.
—¡Andi, escúchame!— dijo Kevin sosteniéndola de los brazos y obligándola a que le mirará.
—También tuve sospechas de eso y me atreví a hacer un examen y desgraciadamente Diana es la madre biológica.
—¡Qué mierda es todo esto!
—Andi, ya sé que todo es confuso. Pero no voy a permitir que nos alejen de Lara. ¡Está bien!
—Me lo prometes.
—Sí.
—¿Por qué una niña tan dulce tiene que pasar por todo esto, Kevin?
—Todo es mi culpa, nunca puse orden en mi vida, deje que mi madre tome algunas decisiones y eso lo empeoró todo.
A los segundos llegó Diana y cacheteo a Andi.
—¿Qué le hiciste a mi hija, puta de mierda?— gritó Diana empujando a Andi.
Andi miró los rincones y los pasillos del hospital, era un lugar donde la bulla no estaba permitido,
—Si quieres pelear, hazlo con tu puta ignorancia, pero no en este lugar— susurró Andi a los oídos de Diana y se alejó de ella.
Kevin tomó del brazo a Diana y la sacó del hospital a empujones.
—¿Qué haces, Kevin?
—¿Qué es lo que te pasa, Diana?, ¡no fue suficiente con todo el daño que me hiciste!
—Mi amor, solo quiero recuperar a mi familia.
—¿Qué familia?. Nunca fuimos una familia. ¡Yo, que recuerde!
—Kevin, amor, nos íbamos a casar. ¿Se te olvidó?
—Me encantaba esa idea, pero vos decidiste ser la marioneta de mi madre, y eso nos arruinó.
—Dame una oportunidad, Kevin. Nuestra hija nos necesita, sabes cuanto sufrí al saber que la había perdido.
—No puedo imaginar tu dolor, ni tampoco creo que vos puedas imaginar toda la pesadilla que me tocó superar para darle de comer a tu familia y a la mía.
—Volver al pasado solo nos lastimará. No seamos egoístas, pensemos en la bonita familia que podemos ser a lado de nuestra hija.
—Lara no te necesita, porque ya tiene a Andi.
—¡Esa mujer no es su madre!
—Aunque no lo creas, lo es.
—¿Vas a entregar a tu hija a una mujer que ni siquiera conoces?
—Ya lo hice.
—¿Qué?
—Andi tiene la custodia de la niña.
—¿Por qué hiciste eso?
—Porque Andi la quiere más que vos y yo.
—No voy a permitir que esa mujer se quede con mi hija, Kevin.
—¡Diana, por favor!
—Por favor nada. No voy a dejar que esa mujer se aproveche de las circunstancias. Por qué eso es lo que está haciendo, y vos sos un gran pelotudo que no se está dando cuenta. Pero ya vas a ver que esta oportunista te va a cagar.