Lilian amó con sinceridad al emperador Dmitri y él también dijo amarla, por eso a ella no le importo ser solo una concubina, pero después de que este se casara con su prometida, comenzó a ignorarla, el emperador se dejó manipular por la madre emperatriz al punto de condenar a la familia de Lillian e incluso ella fue ejecutada de manera injusta, pero para sorpresa de Lillian, ella regresó a su pasado, cuando apenas era una niña y ahora, tenía la oportunidad de cambiar su cruel destino y el de su familia.
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Capitulo 16
Narra Lillian
Después del almuerzo mi padre me contó por qué es que la emperatriz madre nos odia tanto y me pareció lo más patético esa mujer solo me hizo daño a mí y a mi familia por qué mi abuelo no la quiso que idiota es esa mujer
Salí de la biblioteca en busca de Alexander pero como la casa era grande me perdí así que tuve que pedirle ayuda a una doncella para que me llevará a la oficina de Alexander
Después de que toque escuche unos pasos acercarse a la puerta y que enseguida fue abierta por Alexander
Lillian: Hola Alex ¿puedo hablar contigo?
Alexander: Claro pasa
Entre a la oficina y él me dijo que me sentará, después de que lo hice él rodeó su escritorio y se sentó
Alexander: ¿Que es lo que quieres hablar conmigo?
Lillian: Bueno que desde que partimos del Norte mis hombres y yo no hemos podido entrenar ¿así que me podrías dar un lugar en el campo de entrenamiento para que mis hombres y yo entrenemos?
Alexander: Claro que si, puedes entrenar cuando quieras por mí no hay problema y si algunos de mis hombres te llega a faltar el respeto hazme saber
Lillian: Por eso no te preocupes que si llega a pasar yo misma le daré una lección
Alexander: ¿Te puedo preguntar algo?
Lillian: Si, ¿de que se trata?
Alexander: ¿Por qué rechazaste el compromiso que propusieron los emperadores del Norte?
Antes de responder a esa pregunta solté un suspiro y luego mire a Alexander
Lillian: Porque no quería estar atada a una persona que no amo, además porque quería cumplir mis sueños y al lado del príncipe no lo iba a lograr
Alexander: ¿Y por qué no lograrias cumplir tus sueños?
Lillian: Por que yo solo sería un lindo adorno entre tantas cosas, y yo no quiero eso lo que quiero yo es vivir sin restricciones y sin alguien que me juzgue por ser como soy
Alexander: Sabes que a pesar de tener 15 años hablas como una persona madura, otras chicas a tu edad solo pensarían en comprar vestidos y en tener tantas joyas como sea posible
Si supiera por todo lo que pase seguro regresaría al Norte y le daría una lección al príncipe Dimitri
Lillian: Porque a diferencia de esas chicas a mi me dieron una buena educación, y no es que piense que ella son tontas solo que no han vivido bien su vida eso es todo
Alexander: Ojalá conociera a una mujer que piense igual que tú
Lillian: Eso es imposible porque como yo ninguna cada quien tiene su manera de pensar, tú solo tienes que buscar a la correcta
Alexander: Te diré un secreto pero prométeme que no le dirás a nadie absolutamente a nadie
Coloque mi mano izquierda en mi pecho y la derecha la levanté
Lillian: Yo Lillian Zair Borneth le prometo al General Alexander no hablar de nada de lo que se diga en este lugar ( Después de hacerle esa promesa a Alexander lo mire y el sonrió ) satisfecho ya prometí no decir nada ahora dime ese secreto tuyo
Alexander: Bueno que desde que llegué a Nastia me enamore de la princesa Francis pero ella solo me ve como un amigo
Lillian: Pero has intentado acercarte a ella o confesarle tus sentimientos
Alexander: Bueno en realidad no, yo solo admiro su belleza desde Lejos y las veces que estoy cerca de ella es con el príncipe Cédric y con el duque de Cádiz
Lillian: Se que no soy la mejor consejera por qué nunca me he enamorado pero si de verdad la amas cuentale sobres tu sentimientos a lo mejor y ella también siente lo mismo por ti
Alexander: Okay lo haré ¿pero si pasara que ella no siente lo mismo que yo?
Lillian: Pues Charlie y yo te ayudaremos a conquistarla y si con eso no se enamora entonces quiere decir que ella no es la mujer indicada para ti
Alexander: Eso de contárselo a Charlie no me parece buena idea, tú sabes lo romántica que puede ser ella y creerá que está en una de sus tantas historias de amor
Lillian: Por lo mismo, ella te puede ayudar mucho más que yo piénsalo y después me dice
Me despedí de Alexander y cuando estaba por salir él habló
Alexander: Sabes antes de que te vayas quiero que sepas que ahora más tarde el príncipe Cédric Vendrá a visitarnos, dice que quedo encantado contigo y que quiere conocerte
Lillian: Pues dile a el príncipe que a mí no me interesa conocerlo, primero los hombres coquetos como él no me llama la atención y segundo que yo no soy cualquiera de esas chicas que con solo verlo caen rendidas a sus pies
Alexander: Okay yo se lo diré, pero lo conozco tan bien que sé que no se dará por vencido contigo
Lillian: Eso lo veremos
Salí de la oficina de Alexander pensando en como haría para deshacerme de ese hombre
