UNA PELIGROSA OBCECIÓN.

Después de llegar a casa le ruego a Matías que le de algo de comer a Elena y él accede de muy mala gana. Luego de eso me encierro en mi cuarto a analizar todo lo vivido..

Sin duda alguna Matías es un hombre extremadamente peligroso, pero yo no estoy lejos de llegar a su nivel, lo que me tiene más molesta es saber que estuvo conmigo en el mismo lugar que con esa mujer y sé que suena absurdo, pero la incomodidad que tengo en mi pecho es demasiado real como para ignorarla.

Teniendo tantos puntos claves para estar enojada incluso asustada lo que más furiosa me pone es saber que ambas disfrutamos del mismo hombre en el mismo lugar auque esa perra en realidad ya estaba muerta aun así estoy enojada. Luego de bañarme me miro al espejo y la veo a ella, otra vez a vuelto a torturarme.

- Es porque estás celosa Abril.

¿Es posible que yo esté celosa? No puede ser real.

- Como que no es real, lo amas y te están consumiendo los celos de saber que a él le da lo mismo estar con cualquiera al igual que le da lo mismo verte a ti con otro hombre.

- Cállate, sal de mi cabeza.

- Incluso a ella le acabo adentro ósea ella ganó y tú eres una perdedora.

- YA CÁLLATE MALDITA SEA. No es verdad, no puede ser verdad, yo no lo amo, no soy una perdedora. El acosador puede ser solo mío porque así yo lo voy a escribir.

Sin darse cuenta Abril cayó en el plan bien calculado de Matías y poco a poco la estaba transformando en lo que él quería que fuera dándole la falsedad de que era ella la que tenía el control de todo, pero en realidad desde el principio fue todo lo contrario y ahora la que se volvería un personaje de la novela sería la propia creadora de esta.

Luego de esa pelea interna conmigo misma me pongo a trabajar sin parar, después de todo Matías tenía razón gracias a su ayuda tengo mucha inspiración y necesito dejar vacía mi cabeza antes de que explote. No se cuantas horas llevo frente a la pantalla, pero ya es de noche cuando lo veo entrar.

- Quieres comer algo amor.

- No, puedes irte y dormir en otro lado.

- ¿Estás enojada conmigo?

- Solo déjame trabajar tranquila, Matías.

- Bien, te dejaré trabajar. Buenas noches amor.

Por fin veo el progreso que tanto deseaba obtener, mi bella Abril ya casi está lista para tomar el lugar de la protagonista. Valió la pena toda la paciencia y mi manera de distribuir la información en los momentos claves. Ahora solo falta darle un poco de espacio para que sea ella misma la que tome la decisión de matar a Inés.

Pero me queda un cabo suelto por resolver, esa tal Emma está comenzando a sospechar, necesito que sea Abril la que le diga que está conmigo por voluntad propia y no en contra de su voluntad. Siempre puedo solo deshacerme de ella, pero quiero escuchar de la boca de mi amor que quiere estar conmigo así que le daré un tiempo de gracia a esa estúpida mujer que intenta destruir el mundo perfecto que estoy construyendo.

Rebusco en mi cajón y escribo el siguiente paso a seguir, todo tiene que salir perfecto y sucederá en el momento exacto.

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Emma desesperada al no obtener ninguna pista en los lugares donde supuestamente Abril se encontraba de vacaciones acude a su madre, la única familia que le queda a ella.

- Tal vez por fin estuvo dispuesta a hacer las pases con su pasado, después de todo ella sigue siendo su madre y una madre es el lugar seguro donde uno puede esconderse del mundo cruel que nos rodea.

Doy un gran respiro y golpeó la puerta, poco después veo a una mujer de avanzada edad y de expresión agotada abrir la puerta.

- En que la puedo ayudar señorita.

- Hola señora Blanca, yo soy Emma una buena amiga de su hija Abril y quería saber si ella estaba aquí.

- Oh si te recuerdo Emma, pero yo no visto a mi hija desde hace más de 10 años. ¿Quieres pasar?

- Se lo agradecería mucho.

La veo servir limonada y sentarse junto a mí, está casa está llena de fotos de la niñez de Abril, su madre aún la ama y desea que su única hija vuelva algún día.

- Que está pasando con mi hija, Emma.

- La verdad no lo sé. Ella solo se fue dejando un mensaje decía que se iba de vacaciones, pero no he podido contactarla y ya lleva meses.

- Bueno sé por experiencia propia que cuando ella quiere desaparecer lo hace demasiado bien.

- Señora no quiero preocuparla, pero antes de esto ella sufrió un ataque, todos lo minimizaron, pero ya es sospechosa su ausencia.

- Esa niña. ¿Fuiste a la policía?

- Fue la policía quien ni siquiera quiso tomar su denuncia en aquella ocasión, yo le sugerí las vacaciones, pero estoy preocupada.

Maldición no debí esperar que pasará tanto tiempo. ¿Y si de verdad le paso algo malo a Abril?