PAPA A LA FUERZA ¿Destino O Accidente?

-¡Jhustin! Yo…

-Ujummmm… Mateo discúlpame, no quise interrumpirte.. -Hablo James.

-Ya lo hiciste pendejo -Contestaba Jhustin.

-Lo siento, no era mi intención, Mateo creo que lo mejor es que me valla, discúlpame de nuevo por ser tan insistente, deje un poco de mis feromonas en tu cama y recamara, espero sean suficientes para ti, con permiso.

-¡James! Pero ¿y el pastel?

-No te preocupes, no como mucho las cosas dulces, disfrútenlo ustedes, nos vemos Mateo..

Si más que decir el alfa salio del apartamento, Mateo se quedó mudo no supo que sensación fue esa, el ligero dolor acompañado de su instinto que le pedía a gritos salir tras James Baek, pero, delante de él su amor platónico, su amor unilateral de hacía unos años estaba allí, pidiéndole ser su novio, al fin estaba pasando ¿es esto real? Se preguntaba, ¿es esto de verdad? No lo creía, no podia creerlo, lo soño tantas veces y justo ahora sucedía, pero ¿Qué pasaba con el? ¿Por qué no era feliz? ¿Por qué ya no sentía nada? Jhustin estaba justo delante de él y necesitaba una respuesta, Mateo solo suspiro.

-Lo siento jhus… yo no puedo.

-¿Que? Creí… creía que te gustaba…

-Juro que crei que sí, que creía que así era, pero.. Jhustin debo decirte la verdad, yo me acosté con James, y antes de que digas algo, fui yo quien lo busco, yo fui quien lo quiso así, yo fui Jhustin, al parecer, James me gusta y no como amigo, si no como hombre, como mi alfa.

-¿Tu alfa? ¿Que dices? ¿Bromeas verdad?

-jajajaja ¡quisiera! Pero no, yo soy el más absorto con esta situación, yo no querías aceptarlo, no quería admitir que desde que lo ví algo cambio, algo dentro, y ayer al oler su aroma, yo solo deseo estar con el pero soy tan miedoso que espere que si lo ignoraba este sentimiento pasaría, pero la escucho, a mi loca luna que lo reclama, es mío, es mi alfa, James Baek me gusta.

-¿Estas seguro mat?

-Si lo estoy.

-Bien, entonces, cuenta conmigo, te apoyo, solo quiero que seas feliz.

-¡gracias!

El alfa se despidió y Mateo entro a la recámara, en su cama el aroma del alfa lo inundó, se recostó para revolverse y frotarse en todo ese delicioso aroma, suspiro mientras miro la chaqueta que el alfa le había dado la tomo para envolverse en ella y acurrucarse mientras pensaba, recordó la forma en que el alfa se había ido de su casa y su pecho dolió, no quería, no quería que James se fuera.

-Pfff ¡mierda!

Se levantó y salió a la cocina donde el pastelillos de frutas estaba sobre la mesa, tomo el pastel, dos cucharas y las llaves de su auto y salió rumbo a la mansión Baek de nuevo.

Condujo alrededor de 15 minutos, en el garage miro el auto del alfa, tocó el timbre y una mucama abrió.

-Señor Sánchez, ¿se le olvido algo?

-¿Esta James?

-Si, está con el señor Nathan en la biblioteca, ¿quiere que lo anuncie?

-No gracias pasaré

-Espe.. espere…

En la biblioteca tomando licor estaba James que contaba con pesar sus penas a Nathan, Nathan lo miraba mientras tomaba otra copa de licor.

-Vamos amigo, si es así debes dejarlo ser feliz, las parejas destinadas no siempre están juntas…

-Voy a morir solo Nathan, nadie me quiere…

-Eres un jodido amargado, el limon que te chupe hace gestos, debes ser más dulce, más cariñoso, Mateo es delicado es bonito y tierno, cualquier alfa querría estar con el, y si el mejor amigo lo beso ¿que piensas tú qué eso significa?

-No puedo creer que Mateo quisiera estar con un estúpido con olor a plantas y chicles.

-Jajajaja eres tan infantil, tan mal perdedor….

-Jodet…

¡¡PUM!! El golpe en la puerta hizo a los alfas gritar y brincar, del otro lado de la puerta el Omega dominante con el pastel en la mano había abierto la puerta de un patadón y entra a furioso.

-Tu, James Baek, maldito estúpido, ¿como mierda te atreves a dejarme a mi con un maldito pasteles a qué me lo coma yo solo?

-Ma…Mateo, ¿que haces?, yo te acaba de ir a dejar, tu ¿qué haces, como, como coño entraste?

-¡Callateee y abre la maldita boca!

-Mateo de verdad las cosas dulces no son lo mío yo….

-Abre la boca James …

-James solo obedeció y entre abrió la boca mientras esperaba la cucharada de pastel, Nathan miraba todo incrédulo, ¿ese era su primo? ¿El tipo frío que no se doblegaba con nada? ¿Cómo permitía ahora que le hablarán así? Sonrió y saco su celular para grabar, tenía que molestarlo con eso más adelante seguro. Miro a Mateo acercarse a James y sonreír para después besarlo con ganas.

James se quedó helado, se paralizo al instante que cerro los ojos y apretó la cintura de Mateo con muchas ganas y profundizó el beso, el aire les obligó a separarse.

-Mateo, yo creo que tú… tu y el pendejo olor a chicles…

-Callate, no se que me hiciste James, pero debes saber que es momento que te hagas responsable de este latino, James Baek me gustas y no pretendo dejarte ir.

James solo sonrió mientras volvió a besarlo.

-Tu también me gustas Mateo Sánchez, y no pretendo dejarte ir.

Nathan los miro y suspiro.

-Siempre espectador nunca protagonista…

se dijo mientras salio de la biblioteca con la botella en su mano.