Casada por dos años con un hombre que pensaba que la amaba, pero luego este le fue infiel y decidida se divorció, se fue del país y comenzó otra vida lejos de ese mal recuerdo.
Sin imaginar que se encontraría con un problema...
Viviendo en otro país, lo primero que hizo fue ir a un bar, tomar quién sabe cuantos tragos de tequila y un par de margaritas, termina teniendo una aventura de una noche y luego se fue sin decir una sola palabra.
Después de ello su familia busca casarla, pero antes la hacen firmar a ella y futuro esposo un contrato el cual establece que sí alguno de los dos era infiel, el divorcio sería inmediato y además de tener que pagar una indemnización que era el equivalente al valor de ambas empresas familiares.
Firmaron. Ella trataba de olvidar aquella aventura, mientras que él buscaba con desesperación hacerle saber a ella que él era el hombre al que le había dado el mejor sexo de su vida y que su aventura no es un error, si no un perfecto error.
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Capítulo 14
SOFÍA
Sabía que tarde o temprano mi Tío iba a ser atrapado, pero esperaba o más rogaba porque eso pasara luego de haberme casado, sin embargo, eso no pasó y, en cambio, mi Tío tuvo la brillante idea de huir del país. Lo cual seguramente tenía a mi Padre y abuelo más que decepcionados y a la vez preocupados, pero tenía la certeza de que mi Tío iba a querer hablar conmigo o con mi abuelo o tal vez mi papá.
Además, no estaba de humor para hablar con él, por mi Tío era que yo me comprometí a la fuerza luego de su estupidez, estaba enojada con él no con Dmitri, lo cual irónico y a la vez tan... raro, porque no podía estar enojada con el hombre que me amaba, me cuidaba, me protegía y que además me hacía sentir segura y plena conmigo misma.
Así que... con la única persona con la que podía estar furiosa era con mi Tío por no haber tenido el valor de hablar sobre lo que estaba pasando en la compañía, de la cual me fui porque odiaba trabajar allí, no era lo mío. Jamás lo fue.
Ser la Gerente de la Empresa era ridículo para mí, no era lo mío y luego de que tomé la decisión de renunciar eso provocó que mi familia se enojara en un inicio, pero pronto comprendieron y entendieron mi decisión.
Después comencé a trabajar con Elsa lo cual me ayudó a encontrar mi vocación, y me convertí escritora de plataforma de historias y con ello me llevó a trabajar para la misma editorial para la cual trabaja Elsa. Me quedé pensando estando en brazos de Dimitri llorando en silencio, pensando en lo patética y triste que era la situación de mi Tío.
—¿Estás bien?—Preguntó Dmitri luego de un rato.
—Simplemente, no sé qué pensar, por un lado, estoy molesta con mi Tío, por las decisiones que tomó, pero por otra parte... sé que gracias a él he podido conocerte y estar contigo, aunque fue por una razón bastante complicada y difícil, porque sé que mi abuelo no me haría casarme con alguien sin antes saber que realmente me va a respetar y me tratará con respeto.
Dmitri se mantuvo en silencio un momento, sabía que me escuchaba, pero no decía nada. Y antes de poder decir algo mi teléfono sonó, era un mensaje de mi abuelo que decía:
"No salgas de casa, no des explicaciones, la prensa está tras nosotros, ten cuidado y cuídate mucho pequeña..."
—¿Quién es?—Preguntó Dmitri desconcertado.
—Mi abuelo, dijo que no salga de casa, que la prensa nos está cazando.
En ese momento oímos voces y Dmitri se asomó por la ventana alejando un poco la cortina gris y en ese instante dijo:
— La prensa está afuera de la casa, Sofía cierra todas ventanas y que no te vean—. Fui hacer lo que me dijo, lo hice tan rápido como pude que sin darme cuenta me quedé sin aliento demasiado pronto.
Regresé a la sala de estar y vi a Dmitri al teléfono enojado, estaba gritando y exigiendo para que se fueran los reporteros. Luego de cuarenta y cinco minutos angustiantes finalmente los reporteros se fueron, ya no oía voces ni el sonido de las cámaras tomando fotografías, sabía que no se iban a rendir y que harían hasta lo imposible por dar conmigo, me iban a perseguir como buitres hasta conseguir lo que querían.
Dmitri terminó su llamada y yo me derrumbé a llorar en el suelo, solté un grito de desesperación, lloraba y gritaba tan fuerte, que Dmitri no dudó en ir hacia al ver que me había dejado caer de rodillas y después me desplome en el suelo. Me levantó del suelo y se sentó junto a mí, me abrazó con fuerza consolándome, estuvimos así un rato, hubo un silencio mortal, no hubo ruido, nada, solo silencio absoluto. Dejé de gritar luego de que Dmitri me abrazó y no me di cuenta en qué momento me había quedado dormida.
Desperté en la cama y Dmitri estaba a mi lado, también durmiendo, se veía muy cansado. Miré mi teléfono y eran las cuatro de la madrugada. No sabía cuánto tiempo había dormido, pero ya no podía seguir durmiendo, estaba preocupada por mi Tío y necesitaba saber sí él estaba bien o no.
Era irónico que luego de haber pasado aquel momento en el que un enjambre de reporteros me estaba cazando para clavarme cientos de aguijones con miles de preguntas, para después querer saber cómo estaba él. Había que estar loco para hacer algo como eso.
Entonces le envié un mensaje a mi Padre preguntándole y luego de unos minutos dijo:
"Él está bien. No te preocupes por nada, quédate en casa y no salgas, y sí lo haces no lo hagas sola."
Me sentí algo aliviada. Dejé el teléfono de lado y me pasé el resto de la madrugada pensando en tantas cosas y entre ellas, sí el compromiso entre Dmitri y yo iba a seguir en pie, no quería que acabara por ello, sin embargo, tenía la sensación de que algo iba a suceder y realmente deseaba estar equivocada.
