Solo Sé Mía

Estaban cenando en un restaurante cuando llego Andrew.

Sarah estaba apenada.

Andrew: Hola, ¿Como estas? Sarah.

Sarah se limpió la comisura de sus labios.

- Bien\, gracias.

Steven miro a su amigo.

- ¿Ya revisaste lo que faltaba?

Andrew: Si ya todo está listo, hable con Tiffany y me confirmo que todo está

marchando bien.

Steven: Perfecto.

Sarah se retiró al baño.

Andrew: Stev, ¿Qué es lo que pretendes? con esto.

Steven: No pretendo nada Andrew. Sabes que Sarah me interesó desde el primer

momento, y ahora que tengo una oportunidad no pienso desaprovecharla.

Andrew: Y Tiffany, ¿Qué piensas hacer con ella?

Steven: No pienso hacer nada, tú sabes muy bien que ella y yo no tenemos

ningún compromiso.

Andrew: Bien, ¿Cuándo se casan?

Steven: Lo más pronto posible.

Sarah llegó en ese momento.

Steven: ¿Nos vamos?

Sarah: Si.

Los tres llegaron a la mansión Cooper, no se veía señal de la familia de

Steven, él acompañó a Sarah a su habitación, le dio un casto beso y se despidió

para dirigirse a la suya.

Sarah ingresó e iba a quitar sus zapatos cuando.

Jason: Hasta que por fin regresas, ¿Como estuvo tu cena?

Sarah se puso bastante nerviosa.

- ¿Qué haces aquí? Jason.

Jason: El que te vayas a casar con mi hermano no te hace dueña de esta casa,

por lo tanto, puedo estar en donde yo quiera.

Sarah: Esta es tu casa y lo sé, pero eso no te da derecho a ingresar en esta

habitación mientras yo esté en ella.

Jason se acercó de manera peligrosa, mientras Sarah retrocedía.

- ¿Por qué? Sarah\, ¿Por qué mi hermano?

Sarah: Jason sé que te debo una explicación, pero trate de explicarlo antes

y tú no me lo permitiste. Las cosas ocurrieron sin que él y yo lo planeáramos,

nunca quise fallarte, no fue mi intención engañarte y la verdad no sabía que

Steven era tu hermano hasta que lo vi en la cabaña.

Jason la observo y sus ojos se cristalizaron.

- Te amaba Sarah\, créeme que hubiese dado mi vida por ti si fuera necesario.

Sarah no pudo evitar que un nudo se formara en su garganta.

- Perdóname Jason\, solo...

No pudo terminar sus palabras cuando fue interrumpida por los labios de

Jason. Él la besó con desesperación, beso que Sarah correspondió, después de

algunos minutos se separaron por falta de aire.

Sarah se apartó.

- Esto es un error Jason\, por favor vete.

Jason: No me voy a ir Sarah, admite que con ese beso sentiste lo mismo que

yo.

Sarah no sabía que responder. Aunque lo cierto era que con ese beso ella revivió

todo lo que sentía por su exnovio, contrario a Steven pues cuando él la besaba,

ella no podía sentir nada.

- Vete por favor.

Jason salió de la habitación sintiéndose victorioso, pues sabía que Sarah

aún lo amaba y esto era algo que él iba a utilizar en su plan de venganza.

Steven salía de su habitación, cuando observo a Jason quien salía de la de

Sarah. Esto hizo que se molestara y apretara sus puños con furia.

Decidió ir al estudio de su padre, allí tomó una botella de Whisky y empezó a

beberla en silencio, mientras pensaba cual sería su próximo movimiento, pues

era consiente que, si continuaba con Sarah en esa casa, podía perderla.

Al siguiente día todos se encontraban desayunando, Jason no disimulaba las

miradas de burla hacía su hermano.

Steven: Sarah, si ya terminaste vámonos debemos organizar algunas cosas de

la boda.

Sarah asintió algo tímida y ambos se retiraron.

Gisell: No creo que pueda soportar más esta situación, me hierve la sangre

al tener que compartir la mesa con esa ramera.

Filip: GISELL. Respétala, Sarah será la esposa de tu hermano, por lo tanto,

en poco tiempo seremos familia.

Gisell: Padre no estoy diciendo nada que no sea verdad, ella es una

cualquiera.

Jason sonreía por las palabras de Gisell.

Andrew por su parte la observaba fastidiado.

- Gracias por el desayuno\, me debo retirar.

Intento levantarse de la mesa, cuando Gisell tomó su brazo.

Gisell: Andrew ¿A dónde vas?, ¿Te puedo acompañar?

Andrew: No creo Gisell, debo hacer algunas diligencias de trabajo.

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Steven estaba en el centro comercial con Sarah.

- Y ¿Como dormiste?

Sarah: Bien, muy bien de hecho.

Steven: ¿No pasó nada extraño?, pues me refiero a que si no extrañaste tu

casa.

Sarah: Pues si me hace falta mi casa, pero dormí bien.

Steven apretó sus puños en señal de frustración, pues esperaba que Sarah le

confesara que Jason había estado en su cuarto.

- Debo ir al hotel a supervisar unas cosas\, ¿Me quieres acompañar?

Sarah lo pensó y después aceptó.

Estaban en el hotel en la oficina de Steven.

Sarah: Steven, ¿Te puedo pedir algo?

Steven: Si claro, dime.

Sarah: Puedes permitir que me quede aquí en una de las habitaciones.

Steven: ¿Por qué?

Sarah optó por ser sincera.

- La verdad es que no me siento cómoda en tu casa. Anoche cuando llegamos

Jason estaba en mi habitación y fue bastante incómodo.

Steven: ¿Por qué no me buscaste anoche y me lo contaste?

Sarah: No quiero crear más problemas, lo último que deseo es que haya más

enfrentamientos entre Jason y tú.

Steven: Si él no se comporta, créeme que yo no me voy a contener. Dime ¿Aún

lo amas?

Sarah: No te lo puedo negar, aún lo Amo, pero soy consciente que voy a ser

tu esposa.

Steven: ¿Eso que significa?

Sarah: Steven, uno no elige a quien amar, son cosas que suceden por

naturaleza. No te Amo, pero eso no significa que te vaya a engañar; si tú

decidiste arriesgarte por mí, lo mínimo que puedo hacer es hacer lo mismo por

ti.

Steven se acercó y la beso, aunque se arrepintió de inmediato por que pudo

percibir que ella no sentía los mismos deseos que él.

- Toma.

Él le extendió una tarjeta.

Sarah: ¿Esto que es?

Steven: Es una tarjeta de crédito ilimitado.

Sarah: Eso ya lo sé, pero no entiendo para que me la das.

Steven: Pues no quiero que estés sin dinero, úsala para lo que necesites.

Sarah: Esto ya es mucho, no puedo aceptarla.

Steven: Acéptala por favor.