La seducción femenina es un arte que he dominado con gracia y precisión. Mi nombre es Ela West, y soy una mujer que inspira deseo y envidia en igual medida. Mi belleza es mi arma más poderosa, y la uso con sabiduría.
Mi vida estaba siendo perfecta, hasta el momento en que el socio de mi padre decide jubilarse y dejar en su lugar a su hijo mayor, quien me hizo la vida imposible siendo una niña, ahora es mi momento de hacerle la vida imposible a él.
Pero no esperaba que mis sentimientos por él volvieran a arder con tanta intensidad. Pensé que había logrado apagar las llamas de la pasión y el amor, pero parece que solo estaban dormidas, esperando el momento adecuado para renacer de las cenizas.
La memoria de nuestros momentos juntos comenzó a regresar, y con ella, el dolor y la nostalgia. La llama del amor que creí extinguida volvió a encenderse, y ahora me encuentro en una encrucijada. ¿Podremos estar juntos esta vez?
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Una Tentativa
—Todos somos conscientes de que ella puede hacerlo sola, pero, ¿Todavía no has caído en cuenta del plan de nuestro padre y Alejandro?—Sonrio. —Ellos desean verlos juntos y no precisamente en una sociedad o simple amistad—.La observo mirar su reloj mientras se levanta del asiento. —Ela suele y todos los sabados a tomar algo, si te apresuras quizás la alcances, disculpate con ella, se sincero—
En el fondo sabía que ella tenía razón, debía intentar disculparme con ella y aclarar las cosas. Me levanté de la silla y tomé mis cosas del escritorio para salir apresurado.
Todo lo que me había dicho mi hermana era cierto, me he estado comportando como un reverendo idiota, y yo no soy así. Siempre he sido un hombre muy recto y respetuoso, lo único que no entiendo es porque con ella actuó de esa manera sin meterme sabiendo perfectamente que ella tiene un carácter fuerte.
Que pase de largo cuando me ve, o que simplemente me ignore cuando nos encontramos por los pasillos de la empresa me está matando. No me gusta lo que veo en sus ojos cuando me ve.
Necesito que ella saque todo ese veneno y odio que tiene para que al fin me deje ver de nuevo sus hermosos ojos de atardecer.
»Esa mujer me vuelve loco con solo una mirada que me de«
Al llegar al pasillo la vi, y como un niño, me devolví escondiéndome detrás de la pared.
Caminaba como reina por su castillo, moviendo sus caderas de una manera sutil, elegante y sensual mientras sus tacones resonaban con fuerza.
Ese traje de pantalón y blazer le queda tan ajustado, que permite ver sus atributos a la perfección.
Llevo mucho tiempo cuestionandome a mí mismo que lo que siento por ella solo es deseo sexual, pero después de todos estos años que han pasado, mi corazón sigue alterándose con solo tenerla cerca.
Ela sigue siendo mi amor platónico, tan lejana e inalcanzable.
—¿Donde estás?—dijo Una vez que se puso el teléfono en la oreja. —Ya estoy saliendo de la oficina. Te espero en el mismo lugar de siempre, muera de ganas por verte—
»¿Con quien carajos se va a encontrar?«
Puede que sea con una amiga, pero a los amigos no les dices que mueres de ganas de verlos. Dania me dijo que no tenía novio, aunque a veces solía verse con un hombre que ella no conocía, y Ella hablaba muy poco de él.
la curiosidad de ver con quién se encontraría me llevó a seguirla. Sé que no estoy haciendo bien seguir sus pasos Y si me llega a descubrir sé que se enojará conmigo el doble, pero necesito saber quién es ese hombre con el que ella se está viendo y qué tipo de relación tienen. Necesito saber si su corazón ya tiene dueño o está ligando al de otro, porque de ser así seguir en esta compañía sería una pérdida de tiempo.
POV ELA.
—Pense que te habías olvidado definitivamente de mí— inquirió el hombre en cuanto llegue al bar.
—Por supuesto que no, sabes que eres difícil de olvidar— dejé un beso en su mejilla y me senté a su lado. —He estaba muy ocupada en la compañía, últimamente he tenido más trabajo de lo habitual—
—¿Ya te ascendieron?—
—¿Como lo sabes?—
—Los chismes vuelan, cariño. Un pajarito me contó que ya tu padre y sus socios se habían jubilado. Por lo que no es difícil deducir que tú eres la nueva presidente de la compañía—
—¿Por casualidad ese pajarito no te dijo que me toca dirigir la compañía con el hijo mayor de los Cooper?—
Abrió los ojos de par en par, luciendo realmente sorprendido ante mi declaración, a lo que me respecta me fue gracioso la escena y comencé a reír.
—¿Me estás hablando del mismo que lastimó tu negro corazón? ¿Dante regreso?—
—Regreso, y no tienes la menor idea de lo difícil que ha sido lidiar con él nuevamente, A veces quisiera ahorcarlo y enterrarlo yo misma para no tener que verlo en mi santa vida. No lo soporto—
—Oh, ¿y qué sucedió con todo ese amor que hubo entre ustedes?—
—Murio el día en que se fue y tú muy bien lo sabes, Mais— Resoplé. —Pero no hablemos de ese hombre, que no quiero saber más nada de él por hoy—
—De acuerdo, pero no te vas a escapar del interrogatorio que te voy a hacer. Tienes que contarme con pelos y señales todo lo que ha sucedido desde que tu amor platónico regresó, así que ve preparando esa lengua viperina, cariño—
—No ha pasado nada interesante y no va a suceder nada entre nosotros, así que deja de incordiar y de hacerte películas pornos en la cabeza— levanté la mano y llamé al camarero para ordenar una botella de vodka. —En esta mesa está prohibido nombrar el nombre de ese. ¿Me entendiste?—
—Entiendo— respondió en medio de una risa la cual me contagió Y ambos empezamos a reír. —Pero no pueden negar que todavía tiene sentimientos por él—
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—Pense que te habías olvidado definitivamente de mí— inquirió el hombre en cuanto llegue al bar.
—Por supuesto que no, sabes que eres difícil de olvidar— dejé un beso en su mejilla y me senté a su lado. —He estaba muy ocupada en la compañía, últimamente he tenido más trabajo de lo habitual—
—¿Ya te ascendieron?—
—¿Como lo sabes?—
—Los chismes vuelan, cariño. Un pajarito me contó que ya tu padre y sus socios se habían jubilado. Por lo qvue no es difícil deducir que tú eres la nueva presidente de la compañía—
—¿Por casualidad ese pajarito no te dijo que me toca dirigir la compañía con el hijo mayor de los Cooper?—
Abrió los ojos de par en par, luciendo realmente sorprendido ante mi declaración, a lo que me respeta me fue gracioso a la escena y comencé a reír.
—¿Me estás hablando del mismo que lastimó tu negro corazón? ¿Dante regreso?—
—Regreso, y no tienes la menor idea de lo difícil que ha sido lidiar con él nuevamente, A veces quisiera ahorcarlo y enterrarlo yo misma para no tener que verlo en mi santa vida. No lo soporto—
—Oh, ¿y qué sucedió con todo ese amor que hubo entre ustedes?—
—Murio el día en que se fue y tú muy bien lo sabes, Mais— Resoplé. —Pero no hablemos de ese hombre, que no quiero saber más nada de él por hoy—
—De acuerdo, pero no te vas a escapar del interrogatorio que te voy a hacer. Tienes que contarme con pelos y señales todo lo que ha sucedido desde que tu amor platónico regresó, así que ve preparando esa lengua viperina, cariño—
—No ha pasado nada interesante y no va a suceder nada entre nosotros, así que deja de incordiar y de hacerte películas pornos en la cabeza— levanté la mano y llamé al camarero para ordenar una botella de vodka. —En esta mesa está prohibido nombrar el nombre de ese. ¿Me entendiste?—
—Entiendo— respondió en medio de una risa la cual me contagió Y ambos empezamos a reír. —Pero no pueden negar que todavía tiene sentimientos por él—
El mesero llegó, y nos trajo la botella de vodkat y unas copitas, con un platico con algunos limones.
»El sabe que es lo que siempre ordeno«
Le sonreí al mesero dándole las gracias, para luego servirme una copita y tomarla sin darme un solo respiro.
Los sentimientos que existen por Dante son mucho desaparecieron, pero es que verlo y tenerlo cerca me genera un caos interno que no puedo entender. Por eso lo mejor que puedo hacer es estar lo más lejos posible de él, porque siento temor a que ese sentir vuelva a renacer.
»No quiero volver a sufrir«
